La
detenida presentadora de ‘Press TV’ es “el objeto ideal” de EE.UU. para
“criminalizar” a las voces que se alzan contra su política y la de
Israel.
En una entrevista con HispanTV, el analista internacional Ángel Molina ha abordado hoy viernes la polémica detención de la periodista de la cadena Press TV, Marziye Hashemi, en EE.UU. por los agentes del Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI, por sus siglas en inglés), sin que se presentara algún cargo en su contra.
Hashemi, según el analista político, es una figura “importante” para la Administración estadounidense, presidida por Donald Trump, porque “molesta en muchas cuestiones”; es una mujer afroamericana y musulmana que “se adhiere a los ideales” de la Revolución Islámica de Irán.
Todos estos factores le hacen a Hashemi “el objeto ideal para la Administración de Trump para elegir un modelo a partir del cual criminalizar a las voces críticas (…) Su detención es un intento clarísimo, situado fuera de la ley, incluso, por disciplinar las voces de la prensa en Estados Unidos”, ha aseverado Molina.
Washington, ha proseguido diciendo el analista, trata de generar una autocensura en las otras voces que pueden manifestarse en la misma línea que Hashemi, por lo que la ha usado como “el modelo disciplinador” para “limitar” y “autocensurar” a otras voces disidentes.
El también profesor universitario que hablaba con HispanTV desde Argentina, ha destacado asimismo que “criminalizar” a las voces contrarias al régimen de Tel Aviv también importa para la Casa Blanca.
En tal sentido, Molina ha recordado que el Congreso estadounidense también intentó hace unos días “criminalizar” el movimiento de Boicot, Sanciones y Desinversión (BDS) contra Israel.
“Esta campaña de hostigamiento” ataca “sistemáticamente” a quienes analizan de manera crítica las acciones de EE.UU. en el exterior y las del régimen de Tel Aviv, ha denunciado el analista político.
¿Qué es el BDS?
El movimiento BDS es una campaña que nació en el seno de la propia sociedad palestina y se extendió hacia el exterior. Esta campaña internacional busca aplicar presión financiera a Israel para obligarlo a cumplir con las normas según el Derecho Internacional, incluida la retirada de los territorios ocupados, la eliminación del muro de separación de Cisjordania y el derecho de retorno para los refugiados palestinos.
Así, los tres ejes principales de BDS son: ocupación, colonización y apartheid. La campaña no se dirige contra las ciudadanas y ciudadanos judíos, ni mucho menos contra los judíos del mundo (muchos judíos participan en el BDS, también dentro de los territorios ocupados), sino contra las instituciones que sostienen y financian las políticas de Israel en los territorios palestinos ocupados.
Fuente: HispanTV Noticias
ask/ktg/fmd/mkh
En una entrevista con HispanTV, el analista internacional Ángel Molina ha abordado hoy viernes la polémica detención de la periodista de la cadena Press TV, Marziye Hashemi, en EE.UU. por los agentes del Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI, por sus siglas en inglés), sin que se presentara algún cargo en su contra.
Hashemi, según el analista político, es una figura “importante” para la Administración estadounidense, presidida por Donald Trump, porque “molesta en muchas cuestiones”; es una mujer afroamericana y musulmana que “se adhiere a los ideales” de la Revolución Islámica de Irán.
Todos estos factores le hacen a Hashemi “el objeto ideal para la Administración de Trump para elegir un modelo a partir del cual criminalizar a las voces críticas (…) Su detención es un intento clarísimo, situado fuera de la ley, incluso, por disciplinar las voces de la prensa en Estados Unidos”, ha aseverado Molina.
Washington, ha proseguido diciendo el analista, trata de generar una autocensura en las otras voces que pueden manifestarse en la misma línea que Hashemi, por lo que la ha usado como “el modelo disciplinador” para “limitar” y “autocensurar” a otras voces disidentes.
(La presentadora de Press TV, Marziye) Hashemi es el objeto ideal para la Administración de Trump para elegir un modelo a partir del cual criminalizar a las voces críticas (…) Su detención es un intento clarísimo, situado fuera de la ley, incluso, por disciplinar las voces de la prensa en Estados Unidos”, ha aseverado el analista político, Ángel Molina.Activistas e internautas han manifestado en redes sociales como Twitter, con las etiquetas #FreeMarziehHashemi y #Pray4MarziehHashemi, su repudio al arresto de la presentadora y el maltrato que ha sufrido, a la vez que exigían al Gobierno estadounidense que la libere de inmediato.
El también profesor universitario que hablaba con HispanTV desde Argentina, ha destacado asimismo que “criminalizar” a las voces contrarias al régimen de Tel Aviv también importa para la Casa Blanca.
En tal sentido, Molina ha recordado que el Congreso estadounidense también intentó hace unos días “criminalizar” el movimiento de Boicot, Sanciones y Desinversión (BDS) contra Israel.
“Esta campaña de hostigamiento” ataca “sistemáticamente” a quienes analizan de manera crítica las acciones de EE.UU. en el exterior y las del régimen de Tel Aviv, ha denunciado el analista político.
¿Qué es el BDS?
El movimiento BDS es una campaña que nació en el seno de la propia sociedad palestina y se extendió hacia el exterior. Esta campaña internacional busca aplicar presión financiera a Israel para obligarlo a cumplir con las normas según el Derecho Internacional, incluida la retirada de los territorios ocupados, la eliminación del muro de separación de Cisjordania y el derecho de retorno para los refugiados palestinos.
Así, los tres ejes principales de BDS son: ocupación, colonización y apartheid. La campaña no se dirige contra las ciudadanas y ciudadanos judíos, ni mucho menos contra los judíos del mundo (muchos judíos participan en el BDS, también dentro de los territorios ocupados), sino contra las instituciones que sostienen y financian las políticas de Israel en los territorios palestinos ocupados.
Fuente: HispanTV Noticias
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