Slim y los medios públicos
Escrito por Monitoreo Informativo el 29
noviembre 2013 a las 9:56 am en Medios, Monitoreo Informativo
El Universal, Cartera, 29 noviembre 2013
Columna Telecom y Medios
por Gabriel Sosa Plata
América
Móvil cedió esta semana los derechos de transmisión de los Juegos Olímpicos de
Invierno, Sochi 2014, a 25 televisoras públicas de igual número de estados en
el país. Hace algunos días, el 6 de noviembre, hizo un acuerdo similar con el
Canal 22, del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, con la diferencia
de que este canal cultural sí puede legalmente transmitir publicidad (opera una
concesión comercial), lo que no ocurre con la mayoría de las televisoras
públicas existentes en México.
Esta generosidad no es común, mucho menos con las
televisoras públicas. La pregunta obligada es ¿por qué el multimillonario
Carlos Slim regala, en apariencia sin nada a cambio, los derechos de
transmisión en vivo de los juegos, que se llevarán a cabo del 7 al 23 de
febrero de 2014, y por los cuales pagó, incluidos los juegos en Río de Janeiro
de 2016, más de 100 millones de dólares?
Una primera respuesta es “por imagen” y para fortalecer sus
relaciones públicas –y políticas- con el gobierno federal, que opera el Canal
22 y la red de televisión del Organismo Promotor de Medios Audiovisuales
(OPMA), y los gobiernos estatales, que a su vez son permisionarios de los
canales de televisión, que podrán por primera vez en su historia transmitir
estos juegos. Quizás, en efecto, este objetivo político no sea prioritario,
pero indudablemente genera simpatías, en un contexto particularmente adverso
para Slim por la aplicación de la reforma constitucional en telecomunicaciones,
que afecta sus intereses, y la expedición de la legislación secundaria.
Un segundo factor es que América Móvil requería de
plataformas de transmisión, específicamente en televisión abierta en México,
para satisfacer la inquietud del Comité Olímpico Internacional (COI). Durante
la firma del convenio con Canal 22, el portavoz de América Móvil, Arturo Elías
Ayub, así lo explicó: “Cuando hicimos una oferta económica nos citaron en Miami
a los diferentes participantes para adquirir estos derechos, y me acuerdo que
cuando entré con la gente del Comité Olímpico me decía: ‘Oye, todo suena muy
bien, pero ¿dónde los vas a transmitir?”.
Elías Ayub les respondió que buscarían la forma de
transmitir los juegos por televisión abierta con convenios con televisoras,
además de hacerlo por Internet, tabletas y teléfonos celulares. En el primer
caso, el objetivo se pudo haber cumplido, más o menos satisfactoriamente, con
el acuerdo con Canal 22, pero era insuficiente si lo que se buscaba era una
mayor cobertura.
Canal 22 transmite en televisión abierta sólo en el Distrito
Federal y gracias a que su señal se encuentra “montada” en la red de los
canales digitales del OPMA, puede ser visto en las ciudades de Celaya, Coatzacoalcos,
Guadalajara, Hermosillo, León, Mérida, Monterrey, Morelia, Oaxaca, Puebla,
Querétaro, Tampico, Tapachula, Toluca y Xalapa. Si bien son ciudades grandes,
su cobertura no puede compararse con la que tienen las redes nacionales de
Televisa o Televisión Azteca.
Por eso, el acuerdo con las televisoras públicas que
integran la Red de Radiodifusoras Educativas y Culturales de México era
necesario, ya que los juegos podrán llegar así a prácticamente todo el país,
con un auditorio potencial de 90 millones de personas. De esta manera, gana
América Móvil en cobertura y preparación para los juegos olímpicos del 2016 y
ganan los medios públicos al incluir en su programación eventos deportivos,
cuyos derechos de transmisión muy difícilmente podrían haber adquirido por sus
acotados presupuestos.
Una pregunta al calce, no menos importante: ¿qué dejará de
programar la televisión pública para dar salida a la transmisión de deportes
que poco se practican en México y no cuentan con muchos seguidores, como el
esquí de fondo, el hockey sobre hielo o la combinada nórdica? ¿qué se sacrifica
para cumplir las cláusulas de un acuerdo con un ente privado?
Y un tercer factor es que Slim, pese a la imposibilidad
legal para ofrecer directamente televisión en México, con la transmisión de
estos juegos genera directa o indirectamente cada vez más contenidos
audiovisuales y da el mensaje de que para entrar en los hogares del país no
necesita de Televisa ni de Televisión Azteca, aunque ello implique ceder
gratuitamente los derechos de transmisión que tanto les costaron.
Es más, aprovechando el anuncio de los acuerdos con las
televisoras públicas, Elías Ayub dio a conocer el lanzamiento, en diciembre, de
su propio canal de deportes, Claro Sports, que se transmitirá en todos los
países donde América Móvil tiene sistemas de televisión de paga y que podrá ser
visto por sus más de 18.5 millones de clientes en América Latina. Esta señal
sustituirá a Viva Sports, canal que transmite Dish, de la familia Vargas.
Ante el desarrollo de este tipo de proyectos ¿América Móvil
será igual de generosa con los medios públicos en 2016, año de los juegos
olímpicos en Río de Janeiro, aun sin el candado para ofrecer televisión o
participando en la construcción de una red de televisión abierta, producto de la
licitación de frecuencias que llevará a cabo el Ifetel el año que viene?
Una pregunta más, a propósito de estas transmisiones
deportivas: ¿alguien tiene idea de lo que sucedió con la resolución de la
extinta Cofetel sobre si las transmisiones en internet de los juegos
panamericanos, de 2011, o de Uno Tv son televisión o no? Después de dos años de
investigaciones, ¿se habrá llegado a una conclusión o es tan complejo el tema
que fue imposible tenerla, mientras América Móvil continúa invirtiendo y
creciendo en la producción de contenidos para su transmisión en internet y en
otras plataformas?
Slim ya está en los deportes, en la comercialización de
contenidos y en las noticias con productos como Uno Tv. Sólo le resta
incorporarse en la producción de programas de ficción, los de mayor
efervescencia en la pantalla, como afirma el doctor Guillermo Orozco, con
telenovelas, series, miniseries o los reality–ficción. ¿Qué hace falta
para ello? ¿dinero? No lo creo.
Radio educación
El próximo miércoles 4 de diciembre, Radio Educación llevará
a cabo una ceremonia para conmemorar los 89 años de la fundación de la primera
emisora educativa y cultural en México. El acto se desarrollará en sus propias
instalaciones, a las 12 de la tarde.
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