domingo, 4 de agosto de 2013

Emoción, pero la ansiedad también, como Uruguay establece senda liberal con la nueva ley de cannabis

Emoción, pero la ansiedad también, como Uruguay establece senda liberal con la nueva ley de cannabis

En el primer campo, situada en legalizar la venta y producción de marihuana, las opiniones están divididas en cuanto al fondo del experimento
Utensilios para fumar a la venta durante la segunda Copa Cannabis de Uruguay en Montevideo
Los visitantes examinan parafernalia de fumar durante el segundo concurso de la Copa Cannabis del Uruguay el mes pasado en Montevideo. Fotografía: Andrés Stapff / Reuters
Los "hermanos" de malas hierbas han acudido a potenciales clientes pot-compra de su pequeña tienda en el centro de Montevideo bastante recientemente. "Vienen unas tres veces al día para preguntar si estamos vendiendo marihuana todavía", dice Juan y Enrique Tubino. Han tenido que poner un cartel que decía: "No vendemos marihuana".
No es sólo porque los hermanos Tubino mantener su tienda llena de altura con cannabis tuberías, molinillos de hierba y papel laminado - o por la pipa de agua gigante verde en la pantalla - que los posibles clientes están invirtiendo pulg El gran entusiasmo se debe a pequeña Uruguay , un país tan pequeño que un único prefijo cubre todo el territorio, está a punto de convertirse en la primera en el mundo en legalizar la producción y venta de marihuana . Los Tubinos esperan que sus hermanos tienda Yuyo (yuyo es el español de malezas) puede capitalizar su fama entre los consumidores de cannabis Montevideo para vender legalmente lo que entra en las tuberías.
"Cuando la gente piensa de las leyes de drogas liberales, tienden a pensar en Holanda, pero en realidad es Uruguay, que siempre ha estado a la vanguardia", dice Hannah Hetzer, un joven de doble nacionalidad austriaco-americano de la Drug Policy Alliance (DPA), que desembarcó en Uruguay en febrero para ayudar a los activistas locales de reforma de la droga. El DPA es una pesada EE.UU. la política de drogas ONG reforma que puede presumir de magnates como George Soros y Richard Branson y celebridades como Sting en su junta directiva. "Uruguay nunca prohibió el consumo privado de cualquier droga en absoluto, incluyendo discos drogas como la heroína, a pesar de que su producción y venta está prohibida ", dice Hetzer.
Cuando José Mujica, presidente de Uruguay, puso su considerable peso político detrás de la reforma de la ley de drogas en este pequeño pero ultraliberal estado de América del Sur, el Hetzer enviado DPA a Montevideo para orientar el dinero de Open Society Foundations de Soros en una campaña mediática sin precedentes que contribuyó a que los cambios legales innovadores a través de la Cámara Baja del Congreso. Aprobación por el Senado, donde Mujica tiene una fuerte mayoría, se espera pronto.
Otros países de América Latina, como Colombia y Bolivia, envalentonado por la decisión de Uruguay y frustrado por su propio fracaso para vencer a los poderosos y sangrientos carteles ilegales que la producción de drogas de control de la región, será observar cuidadosamente cómo las tarifas de reforma.
Uruguay gráfico Crédito: gráficos observadores La ley otorgará licencias a los productores privados para el cultivo de cannabis a gran escala y regular la distribución de marihuana a precios controlados a través de las farmacias a los consumidores registrados, todo bajo la mirada estricta del gobierno. También permitirá a casa cada vez mayor de hasta seis plantas por hogar, y la creación de "clubes de cannabis" en las que los cultivadores caseros podrán unirse para producir marihuana en cantidades mayores, siempre y cuando no está en venta.
Esto es música para los oídos de los 27 años de edad, Enrique Tubino, el más joven de los dos "hermanos hierba", que ha ido creciendo cannabis ilegalmente en el país desde hace años. "Ahora vamos a ser capaces de hacer crecer nuestra malezas en paz sin tener que esconderse. Eso va a ser un gran cambio, en nuestras cabezas, en el concepto, en la calle. Va a haber muchos balcones coloridos ahora", se ríe .
Consumo de marihuana parece ser alta en Uruguay, sobre todo entre los jóvenes. "Las encuestas muestran que cerca del 4,5% de la población fuma marihuana de forma más o menos regular", dice Sebastián Sabini, de 32 años de edad, miembro del Congreso con barba y zapatillas de desgaste que redactó la nueva ley. "Nunca he visto a gente fumando en la calle tanto como lo hacen aquí", dice Hetzer. "Parece más extendida que en cualquier otro lugar."
Eso y una larga tradición liberal en materias tales como una estricta separación entre Iglesia y Estado ayudó a facilitar la aprobación de la nueva ley. Cuando el cardenal Jorge Bergoglio de Argentina se convirtió en Papa Francisco en febrero, Mujica decidió no viajar a Roma para su toma de posesión.
"Uruguay es un país totalmente laica", explicó Mujica en el momento. "No es la separación de Iglesia y Estado desde el siglo pasado. Uruguay es diferente del resto de América Latina con respecto a esto. Tenemos un gran respeto, no hay libertad de culto, pero no son creyentes."
A pesar de la aprobación de la reforma es bajo, tanto críticos como partidarios coinciden en que la oposición no es virulento. "Alguien garabateó" Sabini es un adicto "en una pared de la ciudad", dice Sabini. Pero eso es mansa protesta incluso para distintamente civiles Uruguay, donde los opositores políticos rara vez pelean demasiado alto. Con una población de sólo 3,3 millones, es difícil para los políticos y activistas que no conocen personalmente a los del otro lado de la valla ideológica.
A pesar de que el apoyo a la reforma es baja entre la población en general, no hay una fuerte oposición vocal hasta ahora. "Las encuestas colocan los contra de la ley en un 66% a principios de este año", dice Hetzer. "Incluso después de nuestra intensa campaña mediática, que sólo se redujo en cerca de tres puntos, pero no es un problema que podría influir en una elección. No es una cuestión importante, incluso para aquellos en contra de ella."
Los opositores de la ley no están de acuerdo con los aspectos técnicos, pero no la esencia. "Fumar marihuana es legal en Uruguay, no se puede ser arrestado por fumar en la calle, se puede fumar aquí en frente del edificio del Congreso sin ningún problema, incluso antes de que esta ley", dice Javier García, diputado que votó en contra el cambio. "Yo soy médico y no estoy de acuerdo con la ley por razones médicas. Yo no creo que la marihuana no es un paso hacia drogas más duras, como la cocaína, ya que sus defensores alegan. Siento que no hacemos tener suficiente investigación científica todavía no apoyen esta ley, no hay precedente internacional se eleva el riesgo de turismo de la droga y el consumo ya es legal, ¿cuál es la base para que la libertad no es individual, ya que el consumo privado ya está garantizada ".?.
Partidarios y detractores de la reforma tanto de ver el fantasma del "imperialismo" estadounidense detrás de la legalización, por una parte, y la guerra contra las drogas, por otro. Sabini considera que el apoyo de EE.UU. a la guerra contra las drogas en América Latina como una herramienta para la dominación sobre las naciones débiles. "Los EE.UU. ofrece los brazos y proporcionamos a los muertos", dice.
Pero García considera que en lugar de una nueva marca de "imperialismo de EE.UU." detrás de las organizaciones no gubernamentales de gran alcance tales como la Drug Policy Alliance bombeo de dólares a Uruguay para apoyar la nueva ley. "Nos están usando como banco de pruebas para las reformas que no se atreverían a prueba en casa. Nos están tratando como conejillos de indias".
Hetzer ve de otra manera. "Uruguay es el país perfecto para hacer esto, es pequeña, tiene buenas instituciones, muy poca corrupción", dice ella. "Y esta reforma de la ley de drogas sigue en el mismo año en que Uruguay legalizó el aborto y el matrimonio entre personas del mismo sexo es parte de una tendencia más amplia hacia una sociedad más liberal que está teniendo lugar;. No se trata sólo de una cuestión concreta."
A pesar del consenso, algunos aspectos de la ley son puestos en duda. Los pequeños empresarios como los hermanos Tubino no están contentos con sólo las farmacias hasta el momento de ser autorizados a vender marihuana.
"Eso está dando demasiado poder a las multinacionales o cualquier persona con mucho dinero, ya que serían los únicos que podrían financiar un sistema de este tipo", dice Enrique Tubino. "Hay un rumor de que las compañías de tabaco están estudiando esto, que sería lo peor. ¿Te imaginas? The Marlboro verde!"
Pero Sabini defiende la decisión de conceder un monopolio farmacias marihuana.
"Las farmacias tienen más experiencia en la venta de drogas para uso medicinal", dice. "Ellos tienen un alcance a nivel nacional, que cuentan con personal capacitado, las precauciones de seguridad vigentes para el manejo de importantes sumas de dinero y un sistema de datos para las recetas que se pueden adaptar a la venta de la marihuana sólo para usuarios registrados."
Los hermanos Tubino no están convencidos. "Hemos tenido ofertas de los inversores de España y Holanda. Son grandes los tigres", dice Juan Tubino.
"Nos gustaría que el gobierno estableció algunos proteccionismo para defendernos uruguayos contra eso. Pero si no lo hace, tendremos que hacer crecer las uñas fuertes y luchar contra los Tigres, también."

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