Un Papa en blue jeans
La Perestroika vaticana
Roma. Ciudad del Vaticano
Hoy, la temperatura en Roma ronda los 5°C, pero este
frio es inversamente proporcional a los ánimos demostrados por los
cardenales que participaron ayer en la primera reunión antes del
cónclave.
Y es que si esto fuera un partido de fútbol, el
equipo que juega en casa estaría encabezado por el cardenal Tarcisio
Bertone; el capitán del equipo rival es nada menos que Angelo Sodano, el
decano del colegio cardenalicio y el árbito de la contienda estaría
representado por el obispo emérito de Roma, Joseph Ratzinger.
No es un juego justo, pero no se trata aquí de
justicia, sino de poder. La nada despreciable cifra de 1, 200 millones
de seres humanos están a la espera del que será el nuevo Vicario de
Cristo y en este contexto, surgen algunas preguntas necesarias ¿dónde
comienza la dimensión política, material y termina la religiosa,
espiritual?
No son éstas cuestiones menores, porque según los
diario italianos de izquierda La Unitá, la república y el Manifiesto,
los cardenales reunidos ayer en el Vaticano, abordarían tres cuestiones
de suma importancia, puestas sobre la mesa por el cardenal Sodano:
1.- El mensaje de salud y gratitud de los cardenales al papa emérito Benedicto XVI
2.- La urgencia de la congregación por conocer todo acerca del asunto Vatileaks
3.- La voluntad del colegio cardenalicio de que se nombre un Papa antes de la celebración de la Pascua.
Todo lo anterior, sin dejar de lado el centro del debate en el primer día de la congregación cardenalicia: el futuro Papa debe ser capaz de revelar el evangelio.
Y esto confirma la agenda de Sedano, acerca de
apuntalar su propio proyecto, dibujando los rasgos con los que debe
contar el sucesor de Joseph Ratzinger.
Un Papa en blue jeans
Todos los diarios en Roma (si, todos) coinciden en
señalar el protagonismo de los cardenales americanos en el pre cónclave.
Hasta hoy, el favorito de la contienda para la prensa italiana, es
Timothy Michael Dolan, el presidente de los obispos americanos, quien
probablemente juega en el equipo de casa, al mando de Bertone.
Existe la creencia de que el cardenal favorito antes
del cónclave, no será el próximo Papa, hecho que también revolucionó
Joseph Ratzinger, pues era uno de los favoritos de la contienda desde el
inicio de la reunión de Cardenales para nombrar al sucesor de Juan
pablo II y, a pesar de eso, salió electo Benedicto XVI.
Guido Moltedo, se pregunta “¿un Papa con barba? Sería el primero después de Inocencio XII, muerto en 213 ¿estadounidense? ¿por qué no?”
Y es que algunas miradas se centran en otro cardenal norteamericano,
Sean O´Malley, de Boston, quien también es considerado papable.
Los diarios de izquierda, ven este pre cónclave como una especie de perestroika vaticana, tomando en cuenta las características de los norteamericanos y afirman que no sería raro considerar “un papa en blue jeans, reformador de la curia, conservador de la doctrina y antagonista de Obama”.
Y si esto le parece descabellado, estimado lector,
también lo son las declaraciones que el cardenal cubano Jaime Castro
hizo a la periodista María Grazia Gerina: “Ratzinger dijo que las cosas
están cambiando”.
Y con su renuncia, Benedicto XVI muestra al mundo que el cambio y no la permanencia, son la regla y no la excepción.
¿Usted qué opina, estimado lector?
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