ENFOQUE SOTT: Rusia frente a la Gladio 2.0 de la OTAN: la yihad turca desde China a Siria

ENFOQUE SOTT: Rusia frente a la Gladio 2.0 de la OTAN: la yihad turca desde China a Siria

Para entender lo que está sucediendo en la escena geopolítica mundial de hoy en día, hay que entender lo que ha estado ocurriendo en esa misma escena durante los últimos 100 años, porque en realidad no ha cambiado mucho. El imperio de Estados Unidos ha sido la única (y la "más grande") superpotencia del mundo, al menos desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Una vez que el Imperio había alcanzado esa posición, estaba determinado a mantenerla. Se suponía que Rusia debería haber sido destruida como consecuencia de la guerra de 1939 a 1945, pero su ingenio y su resistencia, y el sorprendente carácter independiente de Stalin, obligó al Imperio a aceptar una división del mundo entre "Oriente" y "Occidente". Sin embargo, tan pronto como se marcaron los límites, el Imperio envió a sus agentes a continuar y completar el proceso de conquista mundial. Aparte de las pocas incursiones militares abiertas de Estados Unidos (Corea, Vietnam, el peculiar tiro al pavo en América Latina), el Imperio se basó principalmente en operaciones encubiertas para expandir su control. En Europa occidental (una pieza preciada en el "gran tablero de ajedrez") el imperio de Estados Unidos estableció redes "stay-behind" [quedarse atrás - NdT] compuestas de grupos paramilitares de diversos orígenes y adherentes a ideologías de derecha y fascistas. La justificación para "minar" Europa con depósitos de armas y chiflados entrenados para sabotear y crear caos sangriento era que, en caso de una invasión y ocupación soviética de Europa, los "combatientes de resistencia" formarían la primera línea de Occidente en la próxima guerra contra los soviéticos. Estos grupos fueron creados y financiados como parte de la Doctrina Truman, que se comprometió a "apoyar a los pueblos libres que están resistiendo los intentos de subyugación por parte de minorías armadas o por presiones externas." Una invasión soviética nunca estuvo en los planes, por su puesto, y por lo tanto, este "apoyo" tomó forma de financiación, entrenamiento y armamento de la CIA a los grupos minoritarios que utilizaban la violencia extrema para "corregir" cualquier desvío político o social hacia "la izquierda" en Europa, o cualquier cosa que se opusiera a los intereses del Imperio. En su tiempo libre, muchos de estos grupos se involucraron en el tráfico de armas y drogas, y otros crímenes organizados, los cuales se cometían en gran parte bajo del control del CIA y otras agencias de inteligencia occidentales. Este aspecto de la Doctrina Truman fue el comienzo fervoroso de la política exterior encubierta del Estado de Seguridad Nacional de EE.UU., la cual ha abarcado la mayor parte de toda la política exterior estadounidense durante los últimos 70 años. La mayoría de los detalles de esa política exterior no sólo ha sido ocultada al pueblo estadounidense, sino que también a la mayoría de los políticos estadounidenses. En diciembre de 1947, la directiva 4-A del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSC por sus siglas en inglés) "autorizó en secreto a la CIA a llevar a cabo y administrar programas oficialmente inexistentes", de tal manera que "quitaba al Congreso de Estados Unidos y al público de cualquier debate sobre la conveniencia de emprender una guerra psicológica en el extranjero".