Irán insta a EE.UU. a detener la iranofobia que fomenta vendiendo armas peligrosas a países defensores del terrorismo.
“El
presidente de EE.UU., en unas declaraciones intervencionistas,
repetidas y llenas de las acusaciones sin fundamento contra nuestro país
que promueven la iranofobia, ha intentado seguir con las políticas
hostiles de EE.UU. contra Irán y animar a los países de la región a
comprar aun más armas estadounidenses”, ha precisado este lunes el
portavoz de la Cancillería persa, Bahram Qasemi.El portavoz ha condenado contundentemente las posiciones erróneas, las declaraciones intervencionistas y las medidas perturbadoras y provocadoras de la nueva Administración de EE.UU., cuyo objetivo es conseguir la estabilidad y superioridad del régimen de Israel.
Recordando al presidente de EE.UU., Donald Trump, sus posiciones propagandísticas pasadas, en las que condenaba la injerencia de la anterior administración en los asuntos internos de los países de la región y su papel en la creación de grupos terroristas como EIIL (Daesh, en árabe), insta al Gobierno de EE.UU. a dejar de lado sus políticas belicistas e intervencionistas, su iranofobia y la venta de armas peligrosas e inútiles a los verdaderos y principales patrocinadores del terrorismo.
“Desafortunadamente, debido a las políticas hostiles y agresivas de las autoridades de EE.UU., somos testigos del fortalecimiento de los grupos terroristas en la región”, ha explicado.
Desafortunadamente, debido a las políticas hostiles y agresivas de las autoridades de EE.UU., somos testigos del fortalecimiento de los grupos terroristas en la región”, ha explicado el portavoz de la Cancillería persa, Bahram Qasemi.Asimismo, aclara que el nuevo Gobierno de EE.UU. ha adoptado una política de comercialización de la seguridad, y por tanto ha pedido a los estados regionales que, en lugar de comprar millones de dólares en armas, gasten su dinero en bienestar para su pueblo.
En otra parte de sus declaraciones, ha subrayado que EE.UU acusa a Irán de desestabilizar la región, pero recuerda a ese país que durante decenas de años ha brindado un apoyo multilateral, financiero, armamentístico y de inteligencia al régimen israelí para reprimir al pueblo palestino, y en los últimos años, ha armado a los regímenes árabes de la región de Golfo Pérsico para que estos maten al indefenso pueblo de Yemen.
En su intervención en una conferencia en Riad, la capital saudí, el mandatario norteamericano dedicó el domingo parte de su discurso a lanzar ataques verbales contra la República Islámica de Irán, a la que volvió a acusar de promover el “terrorismo y sectarismo” y pidió a todos los países que trabajen juntos para “aislar” a Irán.
En reacción, el canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, rechazó en la misma jornada las acusaciones antiraníes de Trump reiterando que Washington quiere sacarle dinero de Arabia Saudí.
Parece que las repetidas acusaciones de Trump y sus antecesores contra Irán y sus intentos de generar iranofobia en el Oriente Medio son parte de la estrategia de Washington para crear una amenaza ficticia con el fin de conseguir contratos millonarios de venta de armas con los Estados árabes, como hizo el sábado en Riad.
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