España y otros países de la UE convocan a los embajadores egipcios
- Erdogan pide una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de la ONU
- El Gobierno chino ha pedido "moderación" a las fuerzas políticas de Egipto
RTVE.es / Agencias 15.08.2013 - 10:47hVarios países europeos, entre ellos España,
han convocado a los respectivos embajadores egipcios en sus capitales
para transmitirles su condena y preocupación por la violencia desatada
durante la jornada de este miércoles en El Cairo. Por su parte, el
primer ministros turco, Recep Tayyip Erdogan, quien este miércoles
calificó de “masacre” el desalojo de las autoridades egipcias de las acampadas islamistas, ha solicitado una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU de urgencia. La condena internacional a la violenta represión desatada este miércoles en Egipto ha sido unánime.
España, Reino Unido, Francia y Alemania han convocado a los embajadores egipcios en sus capitales para transmitirles su preocupación por los incidentes de este miércoles. El presidente de Francia, François Hollande, ha pedido el cese "inmediato" de la represión en Egipto y ha subrayado que debe hacerse todo lo posible para evitar una guerra civil en ese país.
En la misma línea ha actuado Alemania, que también ha convocado al embajador egipcio en Berlín con el objetivo de trasladarle su preocupación por la extensión de la violencia en el país y apremiar a las autoridades de Egipto a poner fin a esa escalada. El ministerio de Exteriores creó este miércoles un equipo de crisis para atender a sus ciudadanos que se encuentren en Egipto, al tiempo que reforzó la advertencia a extremar las precauciones a quienes viajen o se encuentren en ese país.
Desde Túnez, el ministro de Exteriores alemán, Guido Westerwelle, ha condenado el uso de la "violencia" por parte de la Policía egipcia para disolver las acampadas y ha instado a finalizar el derramamiento de sangre. "Condeno firmemente el uso de la violencia para disolver las manifestaciones en Egipto", ha indicado Westerwelle, antes de advertir de que "los acontecimientos ocurridos ayer en Egipto no pasarán sin consecuencias", según Reuters.
Precisamente Túnez ha sido uno de los pocos países árabes que se ha pronunciado sobre los acontecimientos. Según informa la corresponsal de TVE en Rabat, Gemma García, el presidente islamista Rached Ghannouchi ha condenado firmemente la actuación de la policía egipcia y ha dicho que lo ocurrido “es una atrocidad contra todos los musulmanes que ni siquiera Israel se atrevería a hacer”.
"Siempre hemos dicho que era claramente un golpe de estado, pero Occidente ha preferido hablar de una intervención", ha añadido Erdogan. "Se trata de un asesinato muy grave del pueblo egipcio, que no hacían más que manifestarse pacíficamente", ha indicado.
Este miércoles, la represión y la proclamación por parte del Gobierno de Egipto del estado de excepción generó las críticas del secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, quien instó a levantar "cuanto antes" el estado de emergencia. "Estados Unidos se opone rotundamente a la vuelta a un estado de ley de emergencia y creemos que debe acabar lo antes posible", ha dicho Kerry en una declaración en el Departamento de Estado
"Espero que todas las partes pongan en primer lugar los intereses de los ciudadanos y que actúen con moderación para evitar más víctimas", ha manifestado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hong Lei, citado por la agencia oficial Xinhua.
Hong ha subrayado que China "sigue muy de cerca y está muy preocupada por el desarrollo de la situación en Egipto" e hizo un llamamiento a las partes para que restablezcan el orden y la estabilidad social.
También se ha pronunciado el papa Francisco, quien al comenzar el rezo, se ha digido a los fieles allí congregados desde primeras horas de la mañana y les ha hablado de la situación dolorosa de Egipto. "Deseo dirigir mi oración a la víctimas, a sus familiares, a los heridos y a todos los que sufren", ha indicado el papa.
España, Reino Unido, Francia y Alemania han convocado a los embajadores egipcios en sus capitales para transmitirles su preocupación por los incidentes de este miércoles. El presidente de Francia, François Hollande, ha pedido el cese "inmediato" de la represión en Egipto y ha subrayado que debe hacerse todo lo posible para evitar una guerra civil en ese país.
En la misma línea ha actuado Alemania, que también ha convocado al embajador egipcio en Berlín con el objetivo de trasladarle su preocupación por la extensión de la violencia en el país y apremiar a las autoridades de Egipto a poner fin a esa escalada. El ministerio de Exteriores creó este miércoles un equipo de crisis para atender a sus ciudadanos que se encuentren en Egipto, al tiempo que reforzó la advertencia a extremar las precauciones a quienes viajen o se encuentren en ese país.
Desde Túnez, el ministro de Exteriores alemán, Guido Westerwelle, ha condenado el uso de la "violencia" por parte de la Policía egipcia para disolver las acampadas y ha instado a finalizar el derramamiento de sangre. "Condeno firmemente el uso de la violencia para disolver las manifestaciones en Egipto", ha indicado Westerwelle, antes de advertir de que "los acontecimientos ocurridos ayer en Egipto no pasarán sin consecuencias", según Reuters.
Precisamente Túnez ha sido uno de los pocos países árabes que se ha pronunciado sobre los acontecimientos. Según informa la corresponsal de TVE en Rabat, Gemma García, el presidente islamista Rached Ghannouchi ha condenado firmemente la actuación de la policía egipcia y ha dicho que lo ocurrido “es una atrocidad contra todos los musulmanes que ni siquiera Israel se atrevería a hacer”.
Erdogan pide una reunión del Consejo de Seguridad
Por su parte, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, ha exigido una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de la ONU para analizar la situación en Egipto. "Los que se quedan en silencio frente a esta masacre son tan culpables como los que la llevan a cabo. El Consejo de Seguridad de la ONU debe ser convocado rápidamente ", ha comentado en una conferencia de prensa en Ankara tras criticar lo que llama la "hipocresía de Occidente"."Siempre hemos dicho que era claramente un golpe de estado, pero Occidente ha preferido hablar de una intervención", ha añadido Erdogan. "Se trata de un asesinato muy grave del pueblo egipcio, que no hacían más que manifestarse pacíficamente", ha indicado.
Este miércoles, la represión y la proclamación por parte del Gobierno de Egipto del estado de excepción generó las críticas del secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, quien instó a levantar "cuanto antes" el estado de emergencia. "Estados Unidos se opone rotundamente a la vuelta a un estado de ley de emergencia y creemos que debe acabar lo antes posible", ha dicho Kerry en una declaración en el Departamento de Estado
China pide moderación
Por su parte, el Gobierno chino ha pedido "moderación" a las fuerzas políticas de Egipto y que resuelvan sus diferencias mediante el diálogo, después de que los enfrentamientos de en todo el país dejaran al menos 325 muertos y casi 3.000 heridos, según el último balance oficial."Espero que todas las partes pongan en primer lugar los intereses de los ciudadanos y que actúen con moderación para evitar más víctimas", ha manifestado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hong Lei, citado por la agencia oficial Xinhua.
Hong ha subrayado que China "sigue muy de cerca y está muy preocupada por el desarrollo de la situación en Egipto" e hizo un llamamiento a las partes para que restablezcan el orden y la estabilidad social.
También se ha pronunciado el papa Francisco, quien al comenzar el rezo, se ha digido a los fieles allí congregados desde primeras horas de la mañana y les ha hablado de la situación dolorosa de Egipto. "Deseo dirigir mi oración a la víctimas, a sus familiares, a los heridos y a todos los que sufren", ha indicado el papa.
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