jueves, 11 de mayo de 2017

Europeos ¿Confunden su enemigo? Creen que saben de Maduro pero no saben NADA del jefe del Estado Islámico

Europeos ¿Confunden su enemigo? Creen que saben de Maduro pero no saben NADA del jefe del Estado Islámico

 

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Europeos ¿Confunden su enemigo? Creen que saben de Maduro pero no saben NADA del jefe del Estado Islámico

Desde el 4 de octubre del año 2011, Abu Bakr al-Baghdadi, califa del DAESH, aparece retratado en la lista de los más buscados por la justicia estadounidense. Su cabeza se ha revaluado a lo largo de los años. Al principio ofrecían 10 millones de dólares por información que condujera a su ubicación, detención y condena. En la actualidad ofrecen 25.
Al-Baghdadi, bajo otra identidad, aparece en la lista del Comité de Sanciones de la ONU como antiguo miembro de Al-Qaeda, y líder actual del DAESH. Fue incluido en esta lista un día después de que EEUU lo fichara entre los más buscados, es decir, el 5 de octubre del 2011.
Dos años después, en mayo del 2013, Al-Baghdadi estuvo en la localidad de Idlib, Siria. Lo sabemos porque allí se reunió con un alto funcionario estadounidense: John McCain. El senador admitió haberse reunido con los terroristas y dijo: “Yo conozco a esa gente. Estoy en contacto permanente con ellos todo el tiempo.”
Un mes antes, Al-Baghdadi había creado la organización terrorista más peligrosa del mundo de hoy. En el 2014, en la ciudad de Mosul, se autoproclamó califa.
McCain visits rebels in Syria
Desde el 18 de abril del año 2013, el Consorcio Nacional para el Estudio del Terrorismo y Responsables del Terrorismo, adscrito al Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos en alianza con la Universidad de Maryland, registra los incidentes terroristas atribuidos al Estado Islámico de Irak y el Levante.
En total serían unos 2 mil 869 registros, según los cuales las víctimas fatales de este grupo terrorista alcanzarían a un mínimo de 19 mil 270 personas, mientras que otras 16 mil 66 habrían resultado lesionadas. En estos registros se deja constancia de que en al menos 859 actos terroristas, no lograron determinar el número real de víctimas. Para efectos de nuestro análisis llevamos esos casos a cero, lo que nos hace presumir que el número de fallecidos y heridos por los atentados efectuados por el grupo liderado por Al-Baghdadi es muy superior al mencionado.
El Estado Islámico ha reivindicado atentados terroristas en varios países del mundo, y perpetradores que le han jurado lealtad han actuado en Irak, Siria, Alemania, Bélgica, Francia, Indonesia, Líbano, Libia, Túnez, Turquía y EEUU. Sin embargo, el rostro de su cabecilla es prácticamente desconocido para la gran mayoría de los habitantes del planeta. ¿No es extraño que el enemigo público número uno de todo Medio Oriente, Rusia, Europa y Estados Unidos sea una sombra en un mundo de cristal?
VICTIMAS DEL DAESH
Expertos han afirmado que el hundimiento de los precios del petróleo experimentado hace pocos meses fue consecuencia de la saturación de crudo del mercado. Y efectivamente, son múltiples las causas, por ejemplo el fraking, o el hecho de que Arabia Saudita y Kuwait puedan bombear un barril de petróleo por menos de 10 dólares. Pero otro factor que se pasó -deliberadamente- por alto, fue el petróleo que extrajo y comercializó Abu Bakr al-Baghdadi, de modo ilegal en zonas bajo conflicto armado.
El economista e investigador de la Universidad de Essex, Javier Santacruz, dijo que para el año 2015, el grupo terrorista DAESH había logrado producir y comercializar una cantidad de crudo que lo colocaba -comparativamente hablando- entre los nueve mayores productores de la OPEP. Durante varios meses, el DAESH pudo conseguir cerca de un millón de dólares diarios por concepto de venta de crudo que remataban a una tercera parte de su valor. De acuerdo con el medio israelí The Globes, Israel y Turquía habrían sido los principales compradores del crudo que usurpaba el DAESH en Siria e Irak.
El columnista del Diario La Jornada Alfredo Jalife-Rahme apuntó que el petróleo contrabandeado también era comprado por las trasnacionales Exxon, BP y Conoco, cuyo objetivo deliberado residía en desplomar el precio para perjudicar a Rusia.
Esto nos hace sospechar que son intereses políticos, financieros y económicos los que están detrás del encubrimiento del califa que dirige células terroristas que han actuado en la desmembrada Libia, han tratado de cumplir el deseo de EEUU de fragmentar a Irak y de destrozar la Siria de Bashar al Assad para lograr la construcción de un gasoducto desde Catar hasta Europa.
Esos intereses que fueron capaces de crear el Estado Islámico y, al mismo tiempo, proteger a su califa – del que sólo sabemos que nació en Irak, en 1971, pesa unos 85 kilogramos y mide a penas 1 metro con 65 centímetros de altura, lo que le permite de vez en cuando efectuar escapes de último minuto- son los mismos intereses que atacan a Venezuela.

En Europa no saben quién es su enemigo

Contacté a algunos amigos en Europa, el periodista venezolano Napoleón Suárez y a nuestro queridísimo @CervantesFAQs. Elegimos al azar dos países de Europa, Reino Unido y España. Sondeamos los conocimientos de los ciudadanos europeos sobre dos polos opuestos: Nicolás Maduro líder de un proyecto político profundamente democrático, bolivariano y humanista, y un terrorista que representa una amenaza para la humanidad. Esto fue lo que pasó:
Aunque los españoles comparten una frontera de 656,3 kilómetros con Francia, país en el que el Estado Islámico ha cometido no uno, sino varios atentados terroristas, ellos encuentran como una amenaza más crítica para sus intereses el escenario político venezolano. En Londres, no saben quién es Abu Bark Al Baghdadi, aunque el Estado islámico reivindicó como un soldado de su causa al terrorista que efectuó un atentado el 22 de marzo de este año en Westminster.
¿No es extraño que los ciudadanos de Europa conozcan más la imagen mediática irreal y deforme fabricada por las grandes trasnacionales de noticias sobre Venezuela y su Presidente? ¿Por qué si nuestro Jefe de Estado y líder jamás ha perpetrado ningún acto hostil contra ninguna nación es mostrado como un peligro superior al hombre que encabeza el grupo terrorista que ha ejecutado un número importante de atentados en Francia, Alemania, Londres y Bélgica? ¿No es ridículo que Obama en 2015 firmara una orden ejecutiva contra Venezuela declarándola una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos y pero en el 2016 dijera que el Estado islámico no representaba un peligro para ese país? ¿Por qué amparan bajo un velo al Jefe del Estado Islámico al tiempo que hacen ver como una amenaza a Venezuela?

En Venezuela están claros y repudian a los medios

Veamos la otra cara de la moneda. Como experimento social, un compañero se comunicó con varios hogares venezolanos vía telefónica identificándose como parte de una redacción de un medio español. Esta fue la reacción:
https://soundcloud.com/un-lugar-para-encontrarnos/experimento-social-numero-3

Dato de interés: en la “dictadura” venezolana todos hablaron de sus preocupaciones, intereses y opiniones sin sentir coacciones de ninguna naturaleza, pero en la “democracia” española un índice importante de las entrevistas no pudieron hacerse públicas porque las personas manifestaron temores de diversas índoles.
Urge la reflexión sobre cómo los medios de comunicación se van fabricando amenazas ficticias a nivel global para complacer la sed bélica de las corporaciones petroleras, pero también cómo ellos mismos encubren con el anonimato a peligros reales que les resultan sospechosamente convenientes. ¿Por qué un proceso de liberación nacional, profundamente democrático como el Venezolano es criminalizado, pero se ampara con un práctico anonimato al terrorismo que funciona al servicio de las grandes corporaciones petroleras?

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