Algunos odios entre facciones encontradas dentro del islam no encuentran momentos de tregua. Al menos así lo dejaron ver dos jeques que debían participar de un debate televisivo en un programa del canal OTV, del Líbano. Los productores del ciclo habían invitado al ex parlamentario sirio Ahmad Shlash -simpatizante del régimen de Bashar Al-Asad y jefe tribal de Deir Al-Zour– y al jeque libanés sunita Bilal Daqmaq.
El debate, que no llegó a concretarse, comenzó con una intervención del conductor Bel Moubashar quien mostró sus condolencias a uno de los invitados, cuyo sobrino había sido ejecutado sanguinariamente por el Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés).
El conductor de la televisión libanesa Bel Moubashar presentó a los invitados que terminaron a los golpes (OVT)
El conductor de la televisión libanesa Bel Moubashar presentó a los invitados que terminaron a los golpes (OVT)
Ahmad Shlash le reprocha a Bilal Daqmaq que no le exprese condolencias por la ejecución de su sobrino (OTV)
Ahmad Shlash le reprocha a Bilal Daqmaq que no le exprese condolencias por la ejecución de su sobrino (OTV)
Ahmad Shlash se levanta de su silla para golpear a Bilal Daqmaq (OTV)
Ahmad Shlash se levanta de su silla para golpear a Bilal Daqmaq (OTV)
Bilal Daqmaq le lanza un vaso con agua a Ahmad Shlash. Es el inicio del caos (OTV)
Bilal Daqmaq le lanza un vaso con agua a Ahmad Shlash. Es el inicio del caos (OTV)
"Primero, me gustaría extender mis condolencias al ex diputado sirio Ahmad Shlash. Sabemos que su sobrino fue martirizado ayer. Fue decapitado por ISIS, que lo acusó de colaborar con el régimen sirio", señaló Moubashar e invitó al jeque libanés a rendir el mismo tributo al parlamentario. "Extiendo mis condolencias al pueblo sirio por cualquiera que haya sido asesinado…", comenzó Daqmaq su respuesta, pero fue interrumpido por Shlash: "Hermano, te hizo una pregunta directa: ¿haces extensivas tus condolencias o no?".
A partir de ese momento, la tensión fue sólo en aumento. "No es de tu incumbencia", le replicó con dureza Daqmaq.
– ¿Cómo puede ser posible que no sea de mi incumbencia?
– ¡Cállate tú! ¡Alguien como tú no debería abrir la boca! ¡Al demonio, bastardo!
En ese momento, Daqmaq al ver que su rival se acercaba a golpearlo le arrojó un vaso de agua y comenzaron los golpes ante la mirada del conductor y el resto de los productores que intentaron mediar en la brutal pelea entre ambos islamistas.