La Antártida descubre sus sectores

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Bajo los glaciares marítimos de la Antártida existe toda una red de canales gigantescos. Esta conclusión es el resultado del trabajo conjunto de los científicos de varias universidades británicas. Ellos no tienen la duda de que estas corrientes de alguna manera influyen en el tamaño de la cubierta de hielo y en el cambio del nivel del Océano mundial.

La investigación se centró en la barrera de hielo de Filchner-Ronne. Ella representa una parte de las losas de hielo continentales, que se adentran en el mar de Weddell. La gran atención que se presta a estos hielos se debe a que su superficie ha disminuido enormemente en los últimos años. Resultó ser que los hielos se han fundido debido a las corrientes cálidas que discurren por debajo de ellos. Los sensores infrarrojos del satélite de la NASA Terra, y también los radares de los aviones han descubierto verdaderos ríos bajo los hielos, los cuales se desplazan desde el continente durante cientos de kilómetros bajo los hielos hasta que llegan al océano. El espesor y la altura de estos canales son comparables a la torre de Eiffel.

Los científicos suponen que los canales continúan las fuentes de agua derretida que fluyen bajo la capa de hielo de la Antártida. A la salida del continente, las corrientes se mezclan con el agua de mar. El agua potable es más ligera que la salada, sube hacia la parte superior y se desliza por la parte inferior de la placa de hielo, de forma parecida a un río. En opinión de los autores del descubrimiento, de estos ríos es que depende la estabilidad de los campos de hielo marino.

Los glaciólogos rusos hace ya tiempo suponían que este tipo de corrientes deben existir, habla el vice director del instituto de investigación científicas sobre el Antártico y el Ártico, Valeri Lukín:

–El hecho de que existan los canales bajo estos sistemas de hielo fue establecido ya en los años 1960. Nuestro científico Ígor Zótikov calculó teóricamente los volúmenes de agua descongelada en la superficie inferior del glaciar continental. Él supuso que el agua que se forma en la superficie inferior del glaciar por su fricción con las rocas y por la alta presión que sufre, forma sistemas acuíferos subglaciares y solo puede fluir hacia el océano.

Según las palabras de Valeri Lukín, la fusión de la capa de hielo continentales independiente de la temperatura del medio ambiente:

–Esto depende de la presión que se ejerce, la cual está relacionada con el espesor del hielo y de la velocidad del movimiento del glaciar por la superficie rocosa. Mientras mayor sea esta velocidad, mayor será la fricción y por tanto, más se derrite el agua debajo de la superficie del glaciar, esto no tiene que ver con el calentamiento global

Resulta que los ríos de la parte submarina de los glaciares tampoco están relacionados con el clima mundial. Ellos surgen de otras causas completamente diferentes, entre ellas, el calor subterráneo de la Tierra. Sin embargo, al saber hacia dónde fluyen y donde caen en el océano, será ahora más fácil establecer el mapa de las corrientes cálidas alrededor de la Antártida. Significa que se puede pronosticar con más exactitud el comportamiento de la parte exterior de los glaciares marinos y de los icebergs que se desprenden. El iniciador de la creación de la organización Centro de Iniciativas Árticas, Matvei Chuprov está impresionado con los resultados de esta investigación:

–Es un descubrimiento maravilloso, el Ártico y la Antártida esconden dentro de sí todavía muchos secretos. Al día de hoy, siguen siendo las partes de la Tierra menos estudiadas. Puede ser que estos sean los lugares a partir de los cuales la Tierra nos envíe algunas señales.

Los científicos todavía no han dado respuesta al por qué el derretimiento de los hielos se ha acelerado en los últimos años a pesar de que los canales subglaciares han existido durante toda la vida. Pero su investigación confirmó la teoría de que el sistema hidrológico de la Antártida es mucho más complejo de lo que parecía.

ovm/lj

Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.