Peña deja vía libre a empresarios en minería: 130 mil toneladas diarias de oro y plata para extranjeros
(12 de febrero, 2015. Revolución TRESPUNTOCERO).- Durante los
primeros años del sexenio de Enrique Peña Nieto, la inversión extranjera
directa en la industria minera se duplicó. El geólogo Roberto Almeida
declara “Peña Nieto le dejó vía libre a las empresas extranjeras, por
medio de la explotación capitalista de libre mercado, así es como se
facilitan los negocios”.
Asimismo afirma “Enrique Peña Nieto ha autorizado el desarrollo de
los proyectos de minería a cielo abierto, en distintos puntos del país,
este tipo de actividad produce impactos ambientales, afectación de la
superficie, afectación del entorno, contaminación del aire, afectación
de las aguas superficiales, afectación de las aguas subterráneas o
freáticas, afectación de los suelos, impacto sobre la flora y la fauna,
impacto sobre las poblaciones y por otra parte, puede provocar un
impacto económico negativo, por el desplazamiento de otras actividades
económicas locales actuales y/o futuras, teniendo los informes en sus
manos o no los ha leído o ha hecho caso omiso, provocando desde otro
rubro la debacle de este país”.
La minera canadiense Goldcorp produjo un millón de onzas de oro en
México en 2014, lo que representa cerca de un tercio de su producción
global anual. Dicha empresa es considerada la minera de oro más valiosa
del mundo por capitalización de mercado, produjo entre de 2.95 y 3.10
millones de onzas de oro en 2014.
José Narro Céspedes, dirigente de la Coordinadora Nacional Plan de
Ayala (CNPA), declara “la minera extrae a diario 130 mil toneladas de
oro, plata y zinc; su paquete accionario tiene un costo de 80 mil
millones de dólares. Toda esa riqueza se va del país, pero se niega a
cumplir los compromisos adquiridos con los ejidatarios; y para que no
haya problemas de manifestaciones, elementos del Ejército y de la
Policía Federal resguardan las instalaciones de la minera”.
GoldCorp mantiene su sede en Guerrero, estado que ocupa el segundo
lugar en pobreza. A una hora de Iguala, se encuentra la que podría ser
la mina de oro más importante de Latinoamerica. Ahí la empresa extraerá
más de 60 millones de toneladas de oro.
Su proyecto Filos se
convertiría en la mina de oro más grande de México, aunque cientos de
habitantes se han opuesto, por medio de marchas y manifestaciones, la
minera que en un principio aceptó retirarse, ha seguido poco a poco con
sus planes de expansión. Hoy dentro de sus operaciones, se encuentra la
actividad de dos minas a cielo abierto, desde 2008 y una mina
subterránea.
Guerrero se caracteriza por mantener minerales como hierro, plata,
zinc, plomo y oro. GoldCorp pretende explotar un “cinturón de oro” que
empieza en Mezcala y llega hasta Argelia, zona en donde también se puede
encontrar dichos minerales.
El titular de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco), Enrique
Castro Soto, afirma que en dicho estado existen en operación 700
proyectos mineros, sumándose a ellos la explotación de oro en
Teloloapan, en este año. Asegura que empresas transnacionales son
quienes realizan trabajos de exploración en un cinturón minero que
comprende las regiones Centro, Norte y Tierra Caliente.
Según el geólogo Claudio Garibay “el vínculo de Goldcorp con las comunidades de Guerrero se caracteriza por ser de
reciprocidad negativa organizada
con la intención de obtener oro impunemente sin dar nada a cambio y que
se despliega como un esfuerzo corporativo por transitar de
una negatividad
simétrica, en la que las comunidades mantienen su
autonomía como sujeto social, a una negatividad asimétrica, en la que
éstas quedan sometidas a un régimen de dominación”.
Al mismo tiempo argumenta que las mineras en Guerrero, al hacerse del
control del campo social, las comunidades entran en disputa entre
facciones internas por el control del gobierno comunitario: entre una
facción que acepta la relación vigente con la corporación invocando los
beneficios recibidos, y otra que la repudia invocando ‘argumentos de
injusticia’ y que llama a transformar la reciprocidad negativa
en reciprocidad balanceada.
Según el ingeniero Julio Hernández, “en Guerrero las empresas
extranjeras tienen las puertas abiertas desde la firma del Tratado de
Libre Comercio (TLC), si el pueblo se opone, ejercen presión y chantaje
para frenar protestas.”
En Guerrero más de un 80% de los proyectos mineros son de firmas
canadienses y aunque los habitantes de comunidades, generalmente
caracterizados por la pobreza, se quejan de daños ecológicos y a la
salud, ni el gobierno federal, ni el estatal, hacen caso de sus
demandas.
A diferencia de otros países, en donde las concesiones mineras se
otorgan luego de un largo proceso que puede tardar entre 8 y 10 años,
durante los cuales se realizan audiencias públicas y foros en los que
diversos grupos involucrados exponen sus puntos de vista con respecto al
proyecto, en México el proceso de concesión es cerrado y centralizado,
con la competencia del Gobierno Federal, y se puede resolver en un plazo
de 8 meses.
Y aunque la devastación ambiental y las violaciones de las empresas
mineras canadienses han sido ampliamente documentadas en Guatemala,
Perú, Rumania, Filipinas, Honduras, Ecuador, Bolivia, Ghana, Surinam, la
República Democrática del Congo, Papua Nueva Guinea, Tanzania, India,
Indonesia, Zambia y Sudán, en México no existe ningún documento
gubernamental que exponga los riesgos y daños a la salud y al medio
ambiente.
Según cifras de GoldCorp, en Guerrero, en 2009 la empresa obtuvo
ganancias de 73 millones de dólares, en 2010 ganó 198 y en el 2011, 302
millones de dólares, triplicándose año con año sus ganancias. A
contraposición, dicho estado tiene el municipio más pobre del país,
Metlatonoc, en donde, empresas mineras de capital extranjero como
GoldCorp, Hochschild, Camsim y Zalamera, descubrieron yacimientos de
oro, plata, zinc y otros metales en un área de 500 kilómetros cuadrados,
quienes explotan las tierras en donde persisten altos niveles de
pobreza, analfabetismo, insalubridad, desempleo y migración.
El abogado Valentín Hernández, asesor jurídico de dicha comunidad
afirma “las empresas inglesas y canadienses exploraron la región sin
permiso de indígenas mixtecos y tlapanecos. El gobernador ya autorizó 17
puntos de exploración y explotación de minerales. Esto también sucede
en los municipios de San Luis Acatlán, Metlatónoc, Tlacoapa,
Atlamajalcingo del Monte, Malinaltepec, Acatepec y Zapotitlán Tablas, en
las zonas de la Montaña y de la Costa Chica de Guerrero, donde la
pobreza persiste desde hace años.
Asegurando que comunidades como Carrizalillo “ha padecido
discriminación y aislamiento, GoldCorp ha desaparecido ya 7 manantiales;
su fuente de agua principal “El triángulo”, ha sido expuesta a la
contaminación de metales pesados, la cual utilizan por lo menos el 45%
de las familias. La empresa utiliza cada día millones de litros de agua
que bombea y conduce por una tubería de entre 8 a 9 kilómetros de
longitud desde el río Mezcala hasta La Cima, que se ubica a por lo menos
unos 1,000 metros de diferencia en altitud, de donde empieza su
descenso hacia los patios de lixiviados, donde es mezclada con cianuro
de sodio para ponerla a punto para la lixiviación del oro, el pueblo
también mantiene contacto con esos fluidos.
La ecónoma e internacionalista, Ana Esther Ceceña, afirma “la
distribución de la riqueza ha concentrado los ingresos en empresas
extranjeras y gobierno federal (que modificó a modo la constitución),
siendo la población indígena, quienes sufren además de marginación y
racismo, la pobreza extrema y la explotación.