Como bien expone un artículo en la web Veterans Today, Larry
Silverstein, el que fuera propietario de las torres gemelas cuando se
produjeron los atentados, conocía perfectamente que éstas iban a ser
derribadas de antemano, junto con otros edificios del complejo del World
Trade Center, entre los que destacaba el rascacielos WTC-7.
Larry Silverstein
Recordemos que el WTC-7 no recibió ningún impacto directo por parte
de los aviones y sin embargo, colapsó durante el 11 de septiembre,
presuntamente por los daños causados por el hundimiento de las torres,
lo que levantó muchas suspicacias en los círculos conspirativos, que
vieron en ello evidencias de que los edificios habían sido demolidos de
forma premeditada.
En el siguiente video podemos ver como colapsó…
Según sostienen los defensores de las teorías de la conspiración, uno
de los indicios más evidentes de que esto fue así, lo encontramos en un
video en el que el propio Silverstein habló del WTC-7, y en el que
decía lo siguiente:
Según los defensores de las teorías de la conspiración, la traducción vendría a ser la siguiente:
“Recuerdo haber recibido una llamada del comandante del
cuerpo de bomberos, que me decía que no estaban seguros de que pudieran
ser capaces de contener el fuego, y le dije: ‘Hemos tenido tan terrible
pérdida de vidas, que quizás lo más inteligente sea derribarlo ‘. Y
tomaron la decisión de tirarlo y luego vimos el edificio derrumbarse”
Es decir, según esta interpretación, al decir
“pull it”, Silverstein confiesa de forma indirecta, que
“habían tomado la decisión de demoler el edificio”. Éste argumento ha sido ampliamente utilizado por los defensores de las teorías de la conspiración durante los últimos años.
Pero para ser honestos, creemos que esta interpretación es errónea o está distorsionada.
Edificio WTC-7 frente a las Torres Gemelas
Por lo visto, el término
“pull” (o
“pull down”), que vendría a ser traducido como
“derribar”,
no es utilizado jamás en el mundo de la demolición cuando se habla de
derribo con explosivos, sino que se utiliza como sinónimo de
“derribo con excavadoras” o
“tirando de cables”, siendo pues una expresión ilógica si se aplica al derribo de todo un rascacielos.
Sin embargo, el término
“pull”, sí es utilizado entre los bomberos, para los cuales significa
“retirar a los bomberos de una zona de peligro”,
una expresión que fue utilizada decenas de veces por los bomberos
durante la jornada del 11-s, como demuestran los registros de audio de
sus conversaciones de radio.
Las explicaciones para estas interpretaciones de Pull y por ende, de
las palabras de Silverstein en el video, se pueden consultar en las
siguientes páginas en inglés (pinchar en las imágenes)
Y de hecho, son expuestas por la prestigiosa organización
Architects & Engineers for 9/11 Truth,
una organización de arquitectos e ingenieros que discuten la veracidad
de los resultados de las investigaciones oficiales sobre los ataques del
11 de septiembre, incluido el Informe de la Comisión 9/11 y que de
hecho, defienden básicamente que el World Trade Center fue destruido por
demolición con explosivos (pinchar en la imagen para ir a su web)
Así pues, lo que Silverstein estaría diciendo en este video, cuando
relata su conversación con el jefe de bomberos, en realidad sería:
“Hemos
tenido tan terrible pérdida de vidas, que quizás lo más inteligente sea
retirarlos (a los bomberos)’. Y tomaron la decisión de retirarlos y
luego vimos el edificio derrumbarse”
Este argumento de la
“confesión inconsciente en video”
utilizado durante años por (malos) defensores de la teoría de la
conspiración, como presunto indicio de que el propio Silverstein fue el
que organizó el derribo del edificio WTC-7, no parece ser correcto y lo
mejor sería deshecharlo para no desacreditar otros argumentos mucho más
sólidos, que sí nos dan pistas claras sobre el auténtico papel de
Silverstein en los atentados del 11-s.
Sin ir más lejos, en otro video grabado durante una conferencia
realizada por Silverstein, el multimillonario habla del edificio que
acabó sustituyendo al derribado WTC-7 y de forma sorprendente, habla en
estos términos:
“Teníamos los diseños (del nuevo edificio). Y la primera
reunión de diseño fue en abril de 2000. Y la construcción comenzó poco
después, en 2002”
Es decir, tenemos al propietario del World Trade Center, planeando en
abril del año 2000, cómo sería el edificio que sustituiría al WTC-7 que
fue derribado en un
“atentado terrorista inesperado”, el 11 de septiembre de 2001.
¿Por qué se reunieron para diseñar un nuevo edificio en el lugar del WTC-7, más de un año antes de los atentados?
Nuevo World Trade Center 7
Es obvio que sabían que al año siguiente los edificios ya no estarían
ahí…¡y lo confiesa con toda tranquilidad durante una conferencia!
Éste sí es un indicio mucho más sospechoso.
Tengamos en cuenta que, tal y como expone la web Veterans Today, en
2001, Larry Silverstein, que antes solo era el propietario del WTC-7,
orquestó un acuerdo con Lewis Eisenberg (compañero ultrasionista suyo
según defiende la web Veterans Today), Presidente de la Autoridad
Portuaria de Nueva York y con otro multimillonario “sionista”, Frank
Lowy, que le vendieron todo el complejo del World Trade Center a
Silverstein, con un contrato de arrendamiento de 100 años, después de
que su principal competidor para hacerse con la compra y que había
ofrecido 30 millones de dólares más, se retirara a última hora de la
puja.
El acuerdo se concretó en julio de 2001, y Larry Silverstein tomó posesión de los edificios y de sus dispositivos de seguridad.
Tal y como expone Wikipedia:
“El acuerdo dio a Silverstein, el derecho como arrendatario de reconstruir el complejo en el caso de que fuera destruido”
Pero lo que hizo en primer lugar, fue presionar a las aseguradoras
para que dublicaran la cobertura de su seguro para casos de terrorismo y
cambió los términos del seguro, para
“recibir el pago en efectivo al instante”.
Y el 11 de septiembre de ese mismo año, a Silverstein
“le tocó la lotería”:
las obsoletas torres gemelas de las que era propietario y que habían
recibido multas y condenas por contener asbesto, que eran altamente
deficitarias como negocio y cuya infraestructura de comunicaciones
estaba anticuada, fueron demolidas “de forma gratuita” (con 3.000
personas en su interior).
Entre esas personas, sin embargo, no estaba su propietario.
A pesar de que Silverstein debería haber estado en el restaurante
Windows on the World, en la parte superior de la torre norte, al que
acudía CADA DÍA.
Según explicó el propio Silverstein, ese día en concreto, su mujer le recordó que tenía una cita con el dermatólogo.
Tal y como nos cuenta Wikipedia:
“Silverstein ha dicho en
varias entrevistas, que él normalmente pasaba las mañanas en desayunos
de trabajo en el restaurante Windows on the World en la planta 107 de la
torre norte del World Trade Center, acompañado de los nuevos inquilinos
del edificio. Sin embargo, la mañana del 11 de septiembre de 2001 su
esposa le insistió en que acudiera a una cita con el dermatólogo,
escapando de una muerte segura”
¡Vaya casualidad!
Y no acaba ahí: su propia hija, que siempre tomaba el desayuno con él
en ese mismo lugar, también encontró una excusa similar para explicar
su ausencia, en ese preciso día, violando sus tan arraigadas y
repetitivas costumbres.
Ambos sobrevivieron y prosperaron, mientras todo el mundo por encima
del piso 91, incluyendo a todos los que se presentaron a desayunar en el
Windows on the World, murieron.
La suerte de Larry Silvertein aumentó aún más cuando exigió una doble
indemnización, basándose en el argumento de que había sido “víctima” de
dos ataques terroristas completamente separados y no relacionados, es
decir, el ataque de dos aviones diferentes, uno contra cada edificio… y
consiguió su indemnización, por una suma de 4.500 millones de dólares.
Unas ganancias enormes si tenemos en cuenta que tan sólo había
invertido, de su propio dinero, unos 15 millones de dólares para comprar
el World Trade Center, mientras que sus socios habían añadido poco más
de 100 millones de dólares adicionales.
No contento con ello, Silverstein volvió a los juzgados para pedir
10.000 millones más de dólares de indemnización, esta vez no a sus
propias compañías de seguros, sino a las compañías aéreas a las que
culpó por la demolición de sus edificios.
Esta vez, sin embargo, ni un juez de su cuerda, Alvin Hellerstein
(calificado también como “sionista” pr Veterans Today), le siguió el
juego y su denuncia quedó desestimada.
Durante estos últimos 14 años, han proliferado en Internet las
teorías conspirativas alrededor del hundimiento de las Torres Gemelas,
que han expuesto a la luz pública que los edificios fueron demolidos.
No hace falta que hablemos de ello, pues quien quiera encontrar
información sobre ello, la encontrará en Internet en grandes cantidades,
así como también encontrará argumentos para desmentirlo en grandes
cantidades (estos últimos, muchas veces acompañados de un tono
insultante y rabioso).
Desgraciadamente, entre las teorías más razonables (como la caída de
los edificios a velocidad de caída libre), también se mezclan todo tipo
de inexactitudes que contribuyen a desacreditar las teorías y los
argumentos contrarios a las mentiras de la versión oficial.
Por su parte, las teorías sobre la autoría real de los atentados,
hablan de todo tipo de grupos que conspiraron para hundirlas: desde
grupos judíos sionistas con la colaboración del Mossad, hasta agentes
del Reino de Arabia Saudita; pero siempre con la aquiescencia y
colaboración del propio gobierno norteamericano, que obtenía así la
excusa perfecta para iniciar su sangrienta “lucha contra el terrorismo”.
Y más allá de esa gran maniobra geo-política que ocultaba el atentado
de falsa bandera, lo que se hace evidente es que también tenemos el
negocio puro y duro al nivel más vil, como demuestran personajes de la
catadura moral de Larry Silverstein, que se enriqueció enormemente con
el hundimiento (o más bien dicho, derribo) de las torres gemelas y el
WTC-7.
Sin embargo y a pesar de la enorme cantidad de pruebas e indicios,
aún hay gente que se niega a abrir los ojos a una realidad tan obvia, o
como mínimo a poner en duda la versión oficial de los hechos…
Fuente:
http://www.veteranstoday.com/2016/03/15/bombshell-larry/
http://www1.ae911truth.org/faqs/696-faq-10-did-wtc-7-owner-larry-silverstein-admit-to-ordering-the-controlled-demolition-of-the-building-.html
https://es.wikipedia.org/wiki/Larry_Silverstein