El Dios-Emperador de Estados Unidos con cara anaranjada y pelo de patito no tiene buena prensa. De hecho, incluso su buena prensa tiende a ser mala, excepto cuando viene de lugares como Breitbart y Fox. Pero a veces incluso las fuentes más "eminentes" y "respetables" no pueden evitar hacerle un cumplido involuntario a Trump. La organización no gubernamental Freedom House, infestada de neoconservadores y respaldada por el gobierno de Estados Unidos, publicó hoy un informe con conclusiones llamativas que harían morir a Chicken Little en un ataque de histeria acrobática.
Trump thumbup
© CNN
Según
Freedom House
, la democracia está "bajo asalto y en retroceso" en todo el mundo. Estados Unidos está "abdicando" de su "papel tradicional" de actuar como defensor galáctico de los "ideales democráticos". Las naciones demoníacas de Rusia y China están "aumentando la represión" y exportando su "influencia maligna" al extranjero. De hecho, ésta es la "crisis más grave de la democracia en décadas". Los principios democráticos básicos están "bajo asedio" en todo el mundo, según el presidente de
Freedom House
, Michael Abramowitz. Las puertas del infierno han sido abiertas, Satanás ha aparecido y se parece mucho a Xi, Putin y Trump.
El gran bastión de las fuentes de la CIA para la libertad y la democracia, RFE/RL, informa:
"Un acontecimiento importante del 2017 fue la retirada de Estados Unidos como campeón y ejemplo de democracia", dice el informe. Freedom House [...] dice que "se ha seguido un lento declive de los derechos políticos y las libertades civiles en Estados Unidos durante los últimos siete años". Pero dice que "el declive se aceleró en 2017, debido a la evidencia de interferencias rusas en las elecciones de 2016, violaciones a los estándares éticos básicos" por parte de la administración del presidente Donald Trump, y "una disminución de la transparencia gubernamental". El informe dice que "la prensa y el poder judicial han resistido los ataques sin precedentes del presidente Trump". Pero advierte que esas instituciones podrían verse debilitadas por los ataques de Trump, "lo que tendría serias implicaciones para la salud de la democracia estadounidense y la posición de Estados Unidos en el mundo".
Abramowitz dijo que "las instituciones centrales de la democracia estadounidense están siendo golpeadas por una administración que ha tratado con desdén los controles y contrapesos tradicionales del país".
No puedo decir que estén completamente equivocados. Pero abrigo una fuerte sospecha de que si Hillary Clinton fuera presidenta, ellos habrían sido suaves en sus críticas a la democracia estadounidense. El hecho es que Estados Unidos abandonó sus así llamados ideales democráticos hace muchos años, por lo menos hace más que los "7 años" citados en el informe. El juez Napolitano, en su último episodio de "Freedom Watch" en Fox Business, no estaba tan equivocado:
Eso fue a principios de 2012, hace seis años, presumiblemente sólo un año después de que las libertades políticas y civiles estadounidenses empezaran a decaer. ¿A alguien más le parece bastante notable que una nación pueda pasar de ser "campeona y modelo de democracia" a un espectáculo de mierda total en sólo un año? Pero Freedom House no quiere que usted se concentre en Obama (o en Bush y Clinton, si vamos al caso). No, el declive tomó un giro marcado sólo el año pasado, aparentemente. Teniendo en cuenta las cosas que dijo Napolitano en 2012, que sólo rayaron la superficie de cuán profundo ha caído Estados Unidos, uno pensaría que las cosas se han puesto bastante mal, tan mal como los bebés de campos de exterminio de la Gestapo muertos en incubadoras. ¿Qué horrores ha causado Trump en el cuerpo político estadounidense? Su administración no es ética, carece de transparencia y... ¡Rusia!
¡Deme un respiro! Dos de esos elementos son procedimientos operativos estándar, y lo han sido durante generaciones. Y el tercero es una fantasía delirante ideada por perdedores dementes. En realidad, el hecho mismo de que ese tercer punto esté en la lista me hace cuestionar los dos primeros. Dado que no hay absolutamente ninguna maldita evidencia de la intromisión rusa, el listón no puede haber sido demasiado alto para los incumplimientos de la ética y la transparencia. Pero volviendo al informe, echemos un vistazo a lo que Rusia y su malvado vecino comunista han estado haciendo:
Mientras tanto, dice Freedom House, "los "regímenes autocráticos" en Rusia y China han "aprovechado la retirada de las democracias líderes" y están "actuando más allá de sus fronteras para sofocar el debate abierto, perseguir a los disidentes y comprometer las instituciones basadas en las reglas". Abramowitz dice que la "ruptura brusca del gobierno de Trump con el consenso político de los últimos 70 años" ha dejado a un lado a la democracia como la "fuerza animadora detrás de la política exterior estadounidense".
Afirmó que la "pronta renuncia" de Trump al compromiso histórico de Estados Unidos de apoyar las democracias en el extranjero ha hecho que "el reto planteado por los regímenes autoritarios sea aún más poderoso y amenazador".
El informe dice que el gobierno del presidente ruso Vladimir Putin ha "demostrado la creciente sofisticación y el alcance de los regímenes autoritarios modernos" al "organizar campañas de desinformación durante las elecciones en las democracias europeas" y cultivar lazos con "partidos políticos xenófobos en todo el continente", amenazando a sus vecinos más cercanos y sirviendo como "una fuente alternativa de ayuda militar para las dictaduras de Oriente Medio".
"El objetivo central de estos esfuerzos era desbaratar los estados democráticos y fracturar las instituciones que los unen".
Tanta estupidez, duele. Rusia y China son sólo "autocráticos" porque no son autocracias respaldadas por Estados Unidos. Estados Unidos ama a algunos dictadores, mientras sean "nuestros" dictadores. Y en comparación con algunas de las mejores exportaciones democráticas de Estados Unidos, Rusia y China son verdaderas utopías democráticas. Estados Unidos tiene el récord más largo y exitoso de "sofocar el debate abierto", "perseguir a los disidentes" y "comprometer las instituciones basadas en las reglas" en países de todo el mundo. Rusia y China no se han aprovechado de la "retirada democrática", se han aprovechado del hecho de que Estados Unidos está en proceso de perder prácticamente todos los vestigios de credibilidad internacional. Todos los países que han tenido el privilegio de haber sido bendecidos con la libertad y la democracia estadounidenses en los últimos 17 años son agujeros de mierda, que han sido bombardeados, saqueados, empapados de sangre y saturados con escuadrones sádicos de la muerte. Puede ser frustrante leer tales tonterías de parte de Freedom House, hasta que te das cuenta de que lo que quieren decir con democracia no es lo que la gente como tú y como yo pensamos que es la democracia. El "consenso político" de los últimos 70 años es simplemente este: "Estados Unidos arriba, y que se joda el resto de ustedes". ¿El líder electo democráticamente no le gusta a Estados Unidos? Mátenlo. ¿Una amenaza de que un país rico en recursos se convierta en comunista? Armen algunos escuadrones de la muerte y mátenlos. ¿Un país que defiende su propia soberanía y rechaza las reivindicaciones de Estados Unidos? Digan que tienen armas de destrucción masiva, carguen los bombarderos y mátenlos. O simplemente sanciónenlos y (ojalá) observen cómo mueren lentamente.
La posición de Rusia y China a favor de la soberanía nacional (que es de lo que se están quejando Freedom House et al.) ha estado promoviendo el debate abierto y dando poder a los disidentes en todo el mundo al proporcionar una vía de expresión para aquellas voces alternativas que los medios occidentales ignoran y censuran. Mientras tanto, Rusia y China han estado trabajando desesperadamente a favor de un sistema real basado en normas, también conocido como derecho internacional. La única razón por la que Rusia es acusada de "manipulación electoral" es porque la gente común está harta y cansada del status quo del "consenso político". Puesto que ese statu quo no dejará que las opiniones disidentes salgan al aire (y los medios de comunicación rusos sí lo hacen en cierta medida) debe ser culpa de Rusia que sientan lo mismo que ellos. Pero no lo es. Es culpa del sistema occidental por arruinar tanto las cosas que su propia gente está harta de ello.
Durante 70 años, Estados Unidos ha exportado su propia marca de "influencia maligna" por todo el mundo. Su "fuerza motivadora" ha sido el cañón de un arma, o una cuchilla afilada en la garganta. Pero naciones como Rusia y China, que ya saben un par de cosas sobre la realidad de este tipo de libertad y democracia (sólo miren a Rusia en los años 90), se han vuelto astutas. En efecto, están demostrando una "creciente sofisticación y alcance", simplemente diciendo la verdad. Rusia no se ha metido en las elecciones europeas. No han "cultivado lazos con xenófobos" ni amenazado a sus vecinos. Ese es el modus operandi de Estados Unidos, así como el de sus aliados. Basta con mirar a Ucrania, un país invadido por neonazis que torturan y matan a personas que "simpatizan" con Rusia.
Para hacer frente a la amenaza del totalitarismo soviético real (que amenaza más a Estados Unidos que a Rusia), la mejor solución no es la intromisión y la invasión militar tradicionales de Estados Unidos, sino lo que Trump propuso en su discurso de investidura presidencial:
No pretendemos imponer nuestra forma de vida a nadie, sino dejar que ésta brille como un ejemplo a seguir.
Y si Estados Unidos no puede estar a la altura de su propio ejemplo, ciertamente no tiene nada que ver con los asuntos de otros países. Punto y aparte. Si Rusia y China quieren ampliar su influencia haciendo acuerdos con otras naciones en los que todos salgan ganando, eso es infinitamente mejor que la democracia estadounidense al estilo del juego de suma cero. Mientras tanto, a pesar de que Trump tiene la idea correcta, los "bombarderos de la libertad" todavía se niegan a renunciar a su aspiración por la dominación-democracia mundial. Vea el artículo de Joe Quinn: Estados Unidos es detestable, arrogante e imperialista en Siria. Esta gente está decidida a ver arder al mundo. Sin embargo, de acuerdo con Freedom House, la administración de Trump ha hecho una "ruptura brusca" de este "consenso político" de bombardear las naciones en racimos para llevarlas a un estado terminal de libertad y democracia, impidiendo que la propia voluntad democrática de dichas naciones tome forma, y asegurando que cualquier supuesta democracia tome la forma de vasallaje estadounidense. Y éste es el mejor de los cumplidos. Freedom House puede sentirse libre de llorar hasta desvanecerse. Si Trump pudiera poner fin al rol que Estados Unidos se atribuyó a sí mismo como promotor de la democracia en todo el mundo, el mundo podría respirar aliviado.