Nuevo informe de la OPAC demuestra que el “ataque químico” de abril de 2018 en la ciudad siria de Duma fue un montaje de los terroristas para culpar al Gobierno.
El documento, filtrado la semana pasada por el Grupo de Trabajo sobre Siria, Propaganda y Medios, integrado por investigadores y académicos, revela que el reporte de los expertos de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) no deja lugar a dudas respecto a que “no se emplearon armas químicas en el ataque de abril de 2018 en Duma”, ubicada en la campiña de la provincia de Damasco.
En abril de 2018, los llamados cascos blancos entregaron a la OPAC dos cilindros que contenían gas cloro, acusando al Gobierno sirio de haberlos lanzado contra los residentes de Duma.
No obstante, el informe original de la OPAQ contenía revelaciones que fueron deliberadamente omitidas: la situación de los cilindros no era compatible con su lanzamiento desde el aire, ya que, según la publicación, los contenedores habían sido cuidadosamente colocados en el suelo por los extremistas y los cascos blancos para atribuirle al Gobierno de Damasco el ataque.
“Las dimensiones, características y apariencia de los cilindros, y la escena circundante de los incidentes, eran incompatibles con lo que se habría esperado en el caso de que cualquiera de los cilindros hubiera sido lanzado desde un avión (…) la colocación manual de los cilindros en los lugares donde los investigadores los hallaron es la única explicación plausible para las observaciones en la escena”, subrayó el informe de los expertos de la OPAC.
El ataque químico en Duma
Después de que el Ejército sirio arrebatara a los grupos extremistas, como el Frente Al-Nusra (autoproclamado Frente Fath Al-Sham), el dominio de la ciudad de Duma, los cascos blancos denunciaron más de 40 muertes a causa de un ataque químico con “gas tóxico”.
El Occidente responsabilizó del incidente al Gobierno sirio, presidido por Bashar al-Asad. La madrugada del 14 de abril, EE.UU., el Reino Unido y Francia realizaron un ataque múltiple con misiles de crucero contra el territorio de Siria, que no fue aprobado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU).
En su informe final sobre el ataque del 7 de abril en Duma, publicado en marzo de 2019, la OPAQ descartó el uso de gas sarín, pero sí estableció que hubo un ataque con gas tóxico, y sugirió que los cilindros fueron lanzados desde el aire.
La OPAC citó a “expertos” externos, sin especificar sus nombres ni las entidades con las que estaban vinculados, y tampoco incluyó datos de otro informe, que fue fruto de una investigación llevada a cabo por ingenieros de la propia OPAQ y que suscita más preguntas sobre las conclusiones oficiales.
Los cascos blancos son un grupo que se hace pasar por un organismo humanitario y que opera en distintas zonas en poder de las bandas vinculadas a Al-Qaeda, como la Junta de Liberación del Levante (Hayat Tahrir Al-Sham, en árabe).
Damasco los considera miembros de Al-Qaeda disfrazados de rescatistas voluntarios que, con apoyo occidental, buscan derrocar al Gobierno sirio.
Fuente:https://www.hispantv.com/noticias/siria/428832/ataque-quimico-duma-opac-cascos-blancos