El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, dijo este sábado que el agravamiento de la desigualdad económica reinante está a punto de llevar a la sociedad mundial a "un punto de ruptura" ahora en medio de la Covid-19.
Al señalar la influencia del nuevo coronavirus en el panorama destacó que "se ha convertido en una radiografía que revela las fracturas del frágil esqueleto en las sociedades que hemos construido".
La crisis, a su entender, "está exponiendo falacias y falsedades en todas partes: la mentira de que los mercados libres pueden brindar atención médica para todos; la ficción de que el trabajo de cuidado no remunerado no es trabajo; la ilusión de que vivimos en un mundo postracista; el mito de que todos estamos en el mismo barco".
Por otra parte, Guterres señaló los principales impulsores de la desigualdad. Entre ellos, el racismo sistémico, el legado del colonialismo, el patriarcado, las brechas en el acceso a la tecnología y las desigualdades en la gobernanza global. Agregó que "las naciones que alcanzaron la cima hace 70 años se han negado a contemplar las reformas necesarias para cambiar las relaciones de poder en las instituciones internacionales".
Asimismo, el secretario general de la ONU ha pedido la creación de "un nuevo contrato social y un nuevo acuerdo global destinado a la igualdad de oportunidades para todos y respete los derechos y libertades de todo el mundo".
Esta nueva manera de trabajar, de acuerdo con Guterres, garantizaría una participación inclusiva e igualitaria en las instituciones globales, una globalización justa, "una voz más fuerte para los países en desarrollo en la toma de decisiones globales y un sistema de comercio multilateral más inclusivo y equilibrado".
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