El presidente ruso, Vladímir Putin, se reunirá el lunes 23 en Teherán con el líder iraní, Hasán Rohaní, y podría verse con sus colegas de Venezuela, Nicolás Maduro, y Bolivia, Evo Morales, durante una cumbre de exportadores de gas.
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Según informó Yuri Ushakov, asesor diplomático de la Presidencia rusa, Putin hablará con Rohaní sobre "la lucha contra el terrorismo, en particular contra el Estado Islámico (EI)", y los actuales esfuerzos diplomáticos para solucionar el conflicto en Siria.

Rusia e Irán han insistido desde un principio en que el principal enemigo son los grupos yihadistas que operan en todo Oriente Medio y no el líder sirio, Bachar al Asad.

Teherán fue invitado a las consultas de Viena para el arreglo del conflicto sirio a petición de Moscú, pese a la oposición frontal de Turquía y Arabia Saudí.

Putin, que se verá con Rohaní por tercera vez en lo que va de año, también se entrevistará con el líder espiritual iraní, el ayatolá Ali Jamanei.

El jefe del Kremlin abordará con ambos dirigentes asuntos de la agenda bilateral, como el programa de intercambio de petróleo por alimentos, y el cumplimiento del plan de acción sobre el programa nuclear iraní acordada entre Teherán y las grandes potencias.

La breve visita de trabajo del jefe del Kremlin a Irán se enmarca en su participación en la III cumbre del Foro de Países Exportadores de Gas (FPEG), a la que también acudirán Maduro y Morales.

Ushakov explicó que tanto Venezuela como Bolivia han solicitado reuniones con Putin durante su estancia en la capital iraní.

"Intentaremos encontrar un hueco para estos y posiblemente otros contactos, incluidos breves encuentros informales", dijo.

Rusia no está dispuesta a reducir la producción de petróleo, como le piden venezolanos y bolivianos, para revertir la tendencia a la baja de los precios del crudo, ya que considera que esa medida sería contraproducente.

La caída de los precios del petróleo también está afectando a las tarifas del gas, lo que preocupa también a Rusia, máximo exportador mundial.