Libia:
refrescando la memoria al hilo de un artículo de García Montero. Cuando
la "izquierda" (?) se convierte en cómplice de la agresión
imperialista.
Hoy he leído un curioso artículo de García Montero en InfoLibre,
un medio digital bastante en la órbita del PSOE. Aunque pudiese
coincidir en alguna crítica parcial que realiza al PCE, partido en el
cual milito (PCG), y lo mismo en relación con el affaire IUCM, en
términos generales me parece un artículo políticamente muy desleal,
intencionadamente hiperbólico y con una estimable dosis de mentira
política y de manipulación. Al margen, por supuesto, del claro insulto
que supone a las bases militantes y simpatizantes del PCE, a quienes
Luis García Montero trata poco menos como si fuesen descerebrados.
No es la primera vez, ni será la última, que los llamazaristas dan
rienda suelta a su anticomunismo epidérmico, aunque traten de
camuflarlo bajo la máscara de la crítica a una organización concreta,
como es el PCE. Porque, aunque los más ingenuos puedan pensar lo
contrario, esto no va de crítica al PCE (quien me conozca sabe que me ubico en el espacio crítico del Partido), sino sencillamente es un problema de alergia política al movimiento comunista.
En su artículo, García Montero, además de reivindicar el apoyo que Llamazares prestó al PSOE en su época de coordinador de IU, tirando de argumentario sofista, enarbola la bandera de la "honestidad política".
Si se trata de honestidad política en la izquierda, le recordaría a Luis García Montero que estuvo entre quienes apoyaron el ataque imperialista de la OTAN contra Libia, que supuso una sangría de vidas humanas, la destrucción del país y... un suculento negocio para las petroleas occidentales.
Me pregunto si alguien que apoyó el imperialismo atlantista en aquella
ocasión, está capacitado para dar lecciones de honestidad política a IU
y al PCE, fuerzas políticas que, con el BNG gallego, se opusieron a la
intervención imperialista en Libia, mientras PSOE, ERC, ICV y Equo la
apoyaban.
Porque si hay algo poco honesto es declararse de izquierdas y a la vez apoyar un acto del imperialismo y de su barbarie militar.
No resulta extraña que el general Julio Rodríguez, ahora en el partido Podemos, se haya apresurado a felicitar con entusiasmo a García Montero por su artículo
(ver imagen de cabecera). Por el saludo de este último, parece que son
bastante amigos. Julio Rodríguez, ex jefe de Estado Mayor de la Defensa
(Jemad) con el gobierno de Zapatero, fue Jefe la Misión Militar
española que con la OTAN diseñó en el año 2011 los bombardeos contra
Libia. Su nombre apareció en los documentos de Wikileaks: la CIA, en un
informe de 2008, otorgaba su aval al considerarlo un militar fiel a la
OTAN que garantizaba los intereses de EE.UU.
A
lo largo del día, el artículo de García Montero ha generado loas y
alabanzas entre personas de la órbita del PSOE. ¿Por qué será que no me
extraña? Pero esa fervorosa felicitación del milico otanista Julio Rodríguez, en sí misma es muy significativa y se lleva la palma.
Y ya que hablamos de Libia, permitid que refresque la memoria con fragmentos de un par de artículos publicados en 2011: quién
apoyó la agresión imperialista y quién se desmarcó rechazándola. A
menudo mostramos memoria de pez y de vez en cuando es bueno hacer
memoria.
1
Los nombres de los cómplices españoles del genocidio libio
Por Arturo Inglott
[Publicado el 12 de junio de 2011 en lahaine.org, que a su vez lo tomó de Canarias Semanal]
ERC,
Inicitativa per Catalunya Verds, EQUO, CC.OO., UGT, artistas próximos
al PSOE o Santiago Carrillo avalaron la operación militar.
Aunque
con escaso eco en los grandes medios de comunicación, este martes 7 de
junio las agencias de prensa recogían la noticia de que los bombardeos
de la OTAN sobre la capital de Libia habían provocado otros 29 muertos.
Estas cifras fueron el resultado de uno de los días más intensos de
ataques aéreos sobre Trípoli desde que la Coalición agresora comenzó sus
operaciones en el mes de marzo. El pasado uno de junio, se conocía
que estas operaciones habían causado la muerte de 778 civiles y 4.067
heridos entre el 19 marzo y el 26 mayo. Desde entonces, de nada han
servido los ofrecimientos reiterados del presidente libio Muamar Gadafi
para pactar un alto el fuego o la mediación efectuada por la Unión
Africana con esta misma finalidad. Sin que prácticamente nadie
parezca recordar ya que la excusa oficial para iniciar la guerra contra
Libia se refería tan sólo al “establecimiento de una zona de exclusión
aérea”, los bombardeos contra la población civil han continuado
inmisericordemente. Según el portavoz del gobierno libio, Musa
Ibrahim, la Coalición ha realizado ya más 60 ataques sobre el país
africano. El miércoles 8, la ministra de de Defensa Carme Chacón
confirmaba que el Gobierno socialdemócrata ha decidido continuar
implicado en esta masacre y aprobará en su Consejo de Ministros “la
prórroga indefinida” de la misión española en Libia. Casi de
manera simultánea de la anuncia de la ministra, a OTAN anunciaba que
ampliará la duración de su “campaña” en otros 90 días. En el Estado
español quienes ofrecieron su apoyo a esta agresión militar - haciendo
suya la coartada “humanitaria” fabricada para ocultar los intereses
espurios de la intervención - mantienen ahora un silencio cómplice -y
revelador- ante estos crímenes de guerra.
[Nota del editor del blog:
las cifras de civiles muertos mencionadas apenas es una pequeña
cantidad de la cifra final, ya que los ataques de la OTAN continuaron
después de la fecha en que fue publicado el artículo]
Entre
las organizaciones políticas que otorgaron este apoyo al Ejecutivo
Zapatero para la implicación española en la guerra contra Libia es
preciso destacar a aquellas que se autorreclaman pertenecientes al
ámbito de la izquierda: Ezquerra Republicana de Catalunya (ERC), Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) y la recientemente constituida formación Verde EQUO. (...) Dado
que el prometido “desmarque” jamás tuvo lugar, es lógico deducir que
para los miembros del extinto tripartito catalán los cientos de
asesinados y miles de heridos provocados por los bombardeos de la OTAN
no constituyen un precio “excesivo”, cuando de lo que se trata es de
asegurar el control de un país productor de petróleo. (...)
(...)
Por su parte, los dos sindicatos mayoritarios del Estado español –
CC.OO. y UGT – defendieron también “la posición del Gobierno de España
(su implicación en la guerra)” y “las medidas contenidas en la
resolución 1973 de la ONU sobre la intervención en Libia”. (...)
(...)
Se sumaron igualmente al coro mayoritario de defensores de la guerra
contra Libia los escritores, actores y cantantes más vinculados al
Partido Socialista Obrero Español y a sus holdings mediáticos, como el
Grupo PRISA o MEDIAPRO. La escritora Almudena Grandes calificó la
intervención como “un mal menor que se justifica – dijo – ante la
necesidad de evitar una masacre de civiles inocentes”. Su colega Rosa Montero consideró que el "ataque de la OTAN a Libia había sido muy tardío".
En el mismo sentido se pronunció el actor Juan Diego,
para quien la operación estaba justificada “porque se trata de un
pueblo que se ha levantado contra un tirano en defensa de la libertad”.
El cantante Miguel Ríos afirmó: “veo bien la intervención en
Libia, porque el sátrapa de Gadafi está masacrando a su propio pueblo y
todo el mundo, con independencia de su ideología, ha coincidido en la
necesidad de parar el problema libio con el mínimo daño posible”. El
poeta Luis García Montero aseguró que “establecer
un espacio aéreo como hace la resolución de la ONU es una decisión
"incómoda" pero "necesaria" para evitar la masacre y supone una
respuesta "mejor que dejar que un dictador como Gadafi machaque" a su
pueblo”.
El
miércoles 28 de marzo, Santiago Carrillo (...) se congratulaba en la
Cadena Ser porque “la operación militar en Libia ya estaba dando
resultados” y se permitía criticar a las potencias que participan en la
intervención contra Libia por sus iniciales “vacilaciones y
resistencias”.
Canarias Semanal
2
EQUO, ICV y ERC apoyan la intervención militar en Libia
En Tercera Información, 22-03-2011
El
Proyecto Equo, Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) y Esquerra
Republicana de Catalunya (ERC) han decidido apostar por la intervención
militar en Libia.
Hoy
el Congreso de los diputados vota sobre si apoyará la intervención
militar española en el ataque para crear una zona de exclusión aérea en
Libia. Se conocían las intenciones de la derecha con representantes en
el legisltivo de apoyar al PSOE en su propuesta de unirse al ataque, sin
embargo han sorprendido las posiciones de algunos partidos de izquierda
que se han decidido a apoyar la intervención.
(...)
la portavoz de ICV, Laia Ortiz ha confirmado que su organización
política apoyará en el Congreso de los Diputados a favor de que el
Estado Español tome parte en la invasión.
Para
ICV tener una postura contra el ataque es profesar un "pacifismo mal
entendido", ya que, aunque no hay pruebas de que el régimen libio haya
atacado a civiles desarmados, la organización política catalana
considera que Gadafi está masacrando a su población.
Los
paisanos de ICV Esquerra Republicana de catalunya (ERC) también han
apoyado esta intervención militar y criticando que haya llegado tan
tarde.
Mientras
tanto el Proyecto Equo liderado por Juan López de Uralde ha mostrado
también su apoyo a la creación de la zona de exclusión aérea propuesta
por EEUU, que ya ha acabado con la vida de varias decenas de personas y
ha atacado edificios civiles sin interés militar como hospitales.
Sin
embargo, Equo no sólo ha apoyado la intervención militar sino que apoya
el Tratado de Libre Comercio Unión Por el Mediterráneo (UPM) que es una
profundización de las políticas del FMI aplicadas por los dictadores
derrocados que llevaron a las situaciones económicas y sociales por los
que algunos pueblos del Magreb se han levantado, como Túnez y Egipto.
Unión
Por el Mediterráneo fue una iniciativa de libre mercado impulsada por
el presidente conservador de Francia, Nicolás Sarkozy. Y por el cual las
empresas privadas transnacionales europeas controlarán los recursos
naturales libios y sus servicios básicos.
Estas posiciones de ICV y Proyecto Equo contrastan, por un lado con la posición del socio de los catalanes en el congreso, IU que votará en contra de la intervención militar, y por el otro con la de Ecologistas en Acción, una de las principales organizaciones verdes del estado español, que también rechaza la intervención extranjera en Libia.
Para IU esta intervención debe ser totalmente rechazada
ya que está motivada por los intereses petrolíferos y supone la
confirmación total de la "metamorfosis" a la derecha del Gobierno de
zapatero. Además criticaron la hipocresía de quienes atacan ahora Libia,
ya que son los mismos mandatarios europeos que se reunían con Gadafi y
les vendían armas hasta hace unas semanas.
En
el legislativo sólo el Bloque Nacionalista Galego (BNG) se ha
posicionado junto con IU contra la intervención militar en Libia. (...)
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