Johann Heinrich von Bernstorff Conde - Wartime Embajador
Johann Heinrich von Bernstorff Conde, el embajador de Alemania a los
Estados Unidos desde 1908 hasta 1914 sigue siendo una figura histórica
controversial.
Ampliamente admirado antes de la guerra, recibió varios doctorados
honoris causa, apareció en la escena social de Washington y Nueva York,
con su encanto, inteligencia, perfecto dominio del idioma Inglés, y su
esposa americana.
Después de la Primera Guerra Mundial, el conde Bernstorff se convirtió
en una fuerza política en Alemania, co-fundador del Partido Democrático
Alemán, parlamentario 1921-1928, y una voz fuerte para la Democracia. Apoyó la Liga de las Naciones y el desarme mundial.
Él entró en conflicto con el gobierno nazi, como resultado de sus
convicciones y se exilió en Suiza, donde murió en 1939 en vísperas de la
Segunda Guerra Mundial.
Él es recordado y venerado como una voz moderada en Alemania, un hombre
de principios, que se atrevió a enfrentarse al dictador fascista.
La controversia acerca de Bernstorff Conde tiene que ver con su papel como embajador en los Estados Unidos en la Gran Guerra. Públicamente y como diplomático,
opuesto firmemente a la guerra submarina alemana y en vez perseguido
mediación entre Alemania y los Estados Unidos a un punto de frustración
total.
Él escribió en sus memorias en tiempo de guerra: "Cada vez que un éxito
diplomático estaba a la vista, se ha producido un [ataque submarino]
incidente, lo que obligó a iniciar uno de labores de nuevo." A pesar de
su postura moderada, o "derrotismo" como el Nazis más tarde lo acusaron,
él no tiene conocimiento de las operaciones clandestinas de Alemania en
los Estados Unidos. Él también tenía, al menos nominalmente, el mando y
el control de estas operaciones. ¿Cuál fue su participación en misiones
clandestinas alemanes, sobre todo la campaña de sabotaje mortal de 1915
y 1916?Cuente biógrafo principal de Bernstorff, Reinhard Doerries, documentó
meticulosamente la oposición del embajador en la estrategia alemana de
agresión contra los Estados Unidos.
En cuanto a su vida antes y después de la guerra, es difícil de
imaginar que este hombre en verdad conocía y aprobaba tales atentados
contra incendios, naufragios de buques, el contrabando, la
conflictividad laboral, y la desinformación que los agentes alemanes
realizaron entre 1914 y 1917 Un historiador puede fácilmente argumentan
que no sabía nada, no vio nada, y no hizo nada.
Como es el caso en cualquier operación de servicio secreto, por lo
menos un representante diplomático puede esperar es una negación
plausible.
El gobierno alemán destruyó las instrucciones del Bernstorff cuando
regresó de Alemania en el final de agosto de 1914 No hay documentos
incriminatorios han salido a la superficie que lleva su firma.Es decir, hasta ahora.
El embajador era un destacado miembro del comando y control de las
actividades clandestinas alemanes en los EE.UU. Él se reunió
periódicamente y mantuvo correspondencia con Heinrich Albert, el hombre a
cargo de la financiación de todas las actividades de los servicios
secretos de los EE.UU. Juntos, Albert y Bernstorff abrieron cuentas
bancarias en decenas de las ciudades a través del cual los fondos
fluyeron a los agentes alemanes. En particular, Félix Sommerfeld utiliza una de esas cuentas para financiar las municiones compradas para Pancho Villa.
Cuando Albert perdió su maletín y su contenido adornaba los titulares
de los periódicos estadounidenses, el embajador lo ascendió rápidamente
al agregado comercial. Se evita así que la acción legal contra el pagador de la misión secreta alemana.Bernstorff también asistió a las reuniones del equipo de propaganda
alemana en Nueva York, dio sugerencias, reprendido Franz von Papen y
Karl Boy-Ed cuando escribieron cartas a los editores y sonaban demasiado
beligerante.
El embajador sugirió la compra de un gran periódico estadounidense, que
ocurrió en la primavera de 1915 Eso en sí mismo podría no ser ilegal,
pero el mismo equipo de propaganda también sobornó a los editores de los
principales diarios, repartidos información deliberadamente engañosa, y
proporcionado listas de objetivos para el alemán agentes de sabotaje.
El embajador autorizó la construcción de una fábrica de municiones de
propiedad alemana en 1915 Esta artimaña encerrado el mercado americano
para prensas hidráulicas, pólvora sin humo, y el ácido pícrico.
Lo más significativo es que había una conexión clara entre los más
notorios agente de sabotaje alemán, Franz Rintelen, y el embajador
alemán. Rintelen reunió Bernstorff en la primavera de 1915, poco después de su llegada. Supuestamente, la reunión fue polémico. La fuente de esto es el propio relato de Bernstorff de ella en sus memorias.
Aquellos, por supuesto, fueron escritos después Rintelen fue
descubierto y sentado en una penitenciaría de Atlanta para el bombardeo
de fuego treinta y cinco naves. La principal misión de Rintelen era crear malestar laboral. Las huelgas en la industria de guerra estadounidense se beneficiaron enormemente Alemania. El líder sindical más importante en 1915 fue Samuel Gompers. Rintelen trató de conseguir su apoyo para un movimiento por la paz trabajador pero él no se movía. Bernstorff se documenta de iniciar varias reuniones con Gompers en ese momento. No podía cambiar la mente de Gomper trató bien, pero sin duda.
Los esfuerzos de Rintelen llevaron a la gran huelga de Bridgeport en el
verano de 1915, se instaló sólo cuando los empleadores extendieron la
semana laboral de ocho horas a sus trabajadores.
Conde Bernstorff sabía claramente lo que estaba pasando, mezclado en
partes de los esfuerzos clandestinos que consideró al menos en el límite
legal, y conocía a las personas involucradas.
La distribución de los fondos para las misiones clandestinas, con el
apoyo de agentes de sabotaje alemán, el conocimiento de quienes
participan en actividades ilegales definitivamente vincular el embajador
en actos de guerra. Él se había opuesto éticamente, podría haber renunciado.
Era la guerra, los Estados Unidos era el proveedor de facto de los
enemigos de Alemania, y desde luego gente como Franz von Papen, Karl
Boy-Ed, y Heinrich Albert justifica su participación en las acciones
para detener las armas americanas lleguen a los campos de batalla
europeos, sin importar las neutralidad oficial de los Estados Unidos.
¿Le una reevaluación de las acciones del embajador y una documentación
de la profundidad de su conocimiento en la guerra clandestina contra los
Estados Unidos entre 1914 y 1917, fundamentalmente, cambiar su estatura
en la República de Weimar y más allá? Este historiador no cree.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario