martes, 12 de septiembre de 2017

¿Cómplice de genocidio? Reino Unido envía ayuda militar a Myanmar

¿Cómplice de genocidio? Reino Unido envía ayuda militar a Myanmar

Londres suministra ayuda militar directa a Myanmar, mientras los activistas británicos piden fin del ‘genocidio silencioso’ de los musulmanes rohingyas.
El Gobierno británico ha aportado una ayuda militar directa de 300.000 libras esterlinas (396.000 dólares) a Myanmar (Birmania) y recibe a los soldados birmanos para participar gratuitamente en los cursos de entrenamiento que ha organizado el país europeo, según informa este lunes la cadena catarí Al Jazeera.
La información se divulga en medio del genocidio de los rohingyas a manos del Ejército y los extremistas budistas. Esta cadena catarí ha tratado de acercarse al Foreign Office (el Ministerio de Exteriores británico) para conocer su postura respecto a la precaria situación de los musulmanes en el estado occidental de Rajine, uno de los más pobres.
El Foreign Office, según afirma Al Jazeera, se limitó a dirigirle a un comunicado desarrollado por la secretaria de Estado para el Desarrollo Internacional del Reino Unido, Priti Patel. El informe, no obstante, no trata directamente los actos de violencia del Ejército birmano contra esta minoría musulmana.
Mientras no haya ninguna una medida que pueda persuadir al Ejército (birmano) frenar sus ataques, cualquier influencia que puede ser usada debe ser usada”, se lee en la carta enviada al canciller británico, Boris Johnson.

En su informe, Patel ha apuntado que el Reino Unido urge a las fuerzas de seguridad a que calmen la situación en Rajine y pide al Gobierno birmano que abra “inmediatamente” un paso para el envío de ayuda humanitaria a las comunidades afectadas por la violencia.
Si bien, los activistas musulmanes del Reino Unido no creen que el Gobierno haya condenado rotundamente la violencia que se ejerce contra sus correligionarios y piden a Londres que tome una postura más firme ante Myanmar por la excesiva violencia contra los rohingyas.
En un intento por poner fin al sufrimiento de esta minoría musulmana, los activistas han organizado un evento bautizado como “Silencioso Genocidio",  en el que han recordado a los genocidios acaecidos en Ruanda (1994) y Bosnia (1995). Asimismo, han enviado una carta al canciller británico, Boris Johnson.
“Mientras no haya ninguna medida que pueda persuadir al Ejército (birmano) frenar sus ataques, cualquier influencia que puede ser usada debe ser usada”, se lee en la misiva, que además llama a poner fin a la cooperación militar entre el Reino Unido y Myanmar.
En los últimos días, las autoridades birmanas han lanzado una fuerte política de represión contra los musulmanes rohingyas, masacrándolos y quemando sus casas. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) estima que la violencia contra los rohingyas ha dejado1000 muertos, mientras que el Gobierno bangladesí eleva la cifra a 3000.
ask/ctl/tqi/rba

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