CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Tres asociaciones de ingenieros civiles
recomendaron al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador,
continuar con la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de
México (NAIM) en el exlago de Texcoco, donde actualmente avanza el
proyecto impulsado en la administración peñanietista.
Oferta de campaña –que de mayo a la fecha evolucionó de la oposición definitiva a una consulta popular–, la cancelación de la obra parece alejarse cada vez más, en especial después de que el pasado 20 de agosto un primer estudio reflejó una opinión favorable al proyecto actual.
Ese día, tres asociaciones de ingenieros civiles recibieron el documento para su estudio, y esta tarde, durante un encuentro con el perfilado secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, la conclusión fue que, por “razones técnicas y económicas”, el NAIM debe seguir donde actualmente se construye.
También se dio a conocer que, a diferencia del 33% de avance de obra que anunció el gobierno de Peña Nieto, la construcción lleva en realidad un 20%.
En conferencia de prensa, los representantes del Colegio de Ingenieros Civiles, de la Academia de Ingeniería de México y de la Unión Mexicana de Asociaciones de Ingenieros, expusieron sus puntos de vista tras analizar “los pros y contras” de mantener el proyecto en ese lugar, o bien cambiarlo a la base aérea militar de Santa Lucía, como originalmente proponía López Obrador.
“La solución factible, viable y confiable es continuar la construcción del actual NAIM”, expuso Ascención Medina, quien preside el Colegio de Ingenieros.
En el caso de Salvador Landeros, de la Unión Mexicana, la descalificación de la propuesta de Santa Lucía fue contundente: consideró que se trata de un proyecto conceptual, mientras que el actual desarrollo presenta ya avances de obra.
El proyecto del NAIM ha sido causa de polémica para López Obrador, particularmente desde mayo, cuando el magnate Carlos Slim manifestó que anularlo sería perjudicial para el país.
Slim, uno de los principales contratistas del NAIM y cuyo yerno, Fernando Romero, tuvo a cargo el diseño arquitectónico, se reunió con López Obrador en un encuentro con las mencionadas academias y asociaciones de ingeniería, el pasado 6 de agosto. Ahí, el presidente electo les ofreció un dictamen para su análisis, cuyo resultado se entregó hoy.
En las próximas semanas se esperan otras opiniones, como la del IMCO, así como del Consejo Coordinador Empresarial y una asociación internacional de aeronáutica civil.
Javier Jiménez Espriú anunció este miércoles que la información se subirá a la página de Internet donde se han colocando todos los datos de las dos opciones para el NAIM.
Oferta de campaña –que de mayo a la fecha evolucionó de la oposición definitiva a una consulta popular–, la cancelación de la obra parece alejarse cada vez más, en especial después de que el pasado 20 de agosto un primer estudio reflejó una opinión favorable al proyecto actual.
Ese día, tres asociaciones de ingenieros civiles recibieron el documento para su estudio, y esta tarde, durante un encuentro con el perfilado secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, la conclusión fue que, por “razones técnicas y económicas”, el NAIM debe seguir donde actualmente se construye.
También se dio a conocer que, a diferencia del 33% de avance de obra que anunció el gobierno de Peña Nieto, la construcción lleva en realidad un 20%.
En conferencia de prensa, los representantes del Colegio de Ingenieros Civiles, de la Academia de Ingeniería de México y de la Unión Mexicana de Asociaciones de Ingenieros, expusieron sus puntos de vista tras analizar “los pros y contras” de mantener el proyecto en ese lugar, o bien cambiarlo a la base aérea militar de Santa Lucía, como originalmente proponía López Obrador.
“La solución factible, viable y confiable es continuar la construcción del actual NAIM”, expuso Ascención Medina, quien preside el Colegio de Ingenieros.
En el caso de Salvador Landeros, de la Unión Mexicana, la descalificación de la propuesta de Santa Lucía fue contundente: consideró que se trata de un proyecto conceptual, mientras que el actual desarrollo presenta ya avances de obra.
El proyecto del NAIM ha sido causa de polémica para López Obrador, particularmente desde mayo, cuando el magnate Carlos Slim manifestó que anularlo sería perjudicial para el país.
Slim, uno de los principales contratistas del NAIM y cuyo yerno, Fernando Romero, tuvo a cargo el diseño arquitectónico, se reunió con López Obrador en un encuentro con las mencionadas academias y asociaciones de ingeniería, el pasado 6 de agosto. Ahí, el presidente electo les ofreció un dictamen para su análisis, cuyo resultado se entregó hoy.
En las próximas semanas se esperan otras opiniones, como la del IMCO, así como del Consejo Coordinador Empresarial y una asociación internacional de aeronáutica civil.
Javier Jiménez Espriú anunció este miércoles que la información se subirá a la página de Internet donde se han colocando todos los datos de las dos opciones para el NAIM.
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