¿Está Modi en la nómina de los mafiosos Kosher Nostra liderados por Netanyahu?
Por Robert Fisk para Press TVRobert Fisk es el corresponsal de The Independent en Oriente Medio, galardonado con múltiples premios, con sede en Beirut. Ha vivido en el mundo árabe por más de 40 años. cubriendo la guerra en Siria y Líbano, cinco invasiones israelíes, la guerra Irán-Iraq, la invasión soviética de Afganistán, la guerra civil argelina, la invasión de Saddam Hussein en Kuwait, las guerras bosnia y de Kosovo, la invasión y ocupación estadounidense de Irak y la Revoluciones árabes de 2011. En este artículo escrito el jueves 28 de febrero de 2019, reflexiona sobre la escalada de tensiones entre la vecina India y Pakistán, destacando el papel desempeñado por las municiones y aviones suministrados por Israel para avivar las llamas del conflicto entre estos dos países.
Cuando escuché el primer informe de noticias, supuse que se trataba de un ataque aéreo israelí en Gaza. O siria. Los ataques aéreos en un “campo terrorista” fueron las primeras palabras. Un “centro de comando y control” destruido, muchos “terroristas” asesinados. Nos dijeron que los militares estaban tomando represalias por un “ataque terrorista” contra sus tropas.
Se había eliminado una base islamista “yihadista”. Entonces escuché el nombre de Balakot y me di cuenta de que no estaba en Gaza ni en Siria. – Ni siquiera en el Líbano – Pero en Pakistán. Cosa extraña, eso. ¿Cómo podría alguien mezclar Israel e India?
Bueno, no dejes que la idea se desvanezca. Dos mil quinientas millas separan el ministerio de defensa israelí en Tel Aviv del ministerio de defensa indio en Nueva Delhi, pero hay una razón por la cual los despachos habituales afectados por clichés suenan tan similares.
Durante meses, Israel se ha alineado asiduamente junto con el gobierno nacionalista BJP de la India en una forma tácita. – y políticamente peligroso – coalición “anti-islamista”, una alianza no oficial, no reconocida, mientras que la India misma se ha convertido en el mayor mercado de armas para el comercio de armas israelí.
No por casualidad, por lo tanto, la prensa india acaba de anunciar el hecho de que las “bombas inteligentes” Rafael Spice-2000 de fabricación israelí fueron utilizados por la fuerza aérea india en su ataque contra los “terroristas” de Jaish-e-Mohammed (JeM) dentro de Pakistán.
Pero no había nada irreal en la salvaje emboscada de las tropas indias en Cachemira el 14 de febrero, que el JeM afirmó: y que dejó 40 soldados indios muertos. Tampoco el derribo de al menos un avión indio esta semana.
India fue el mayor cliente de armas de Israel en 2017, pagando 530 millones de libras por la defensa aérea israelí, sistemas de radar y municiones, incluyendo misiles aire-tierra – la mayoría de ellos fueron probados durante las ofensivas militares de Israel contra palestinos y objetivos en Siria.
Israel mismo está tratando de explicar sus continuas ventas de tanques, armas y barcos a la dictadura militar de Myanmar – mientras que las naciones occidentales imponen sanciones al gobierno que ha intentado destruir a su minoría y en gran parte a los musulmanes rohingya. Pero el comercio de armas de Israel con India es legal, arriba del tablero y muy publicitado por ambos lados.
Al menos 16 comandos indios “Garud” – parte de una delegación militar india de 45 miembros – estuvieron durante un tiempo en las bases aéreas de Nevatim y Palmachim en Israel. En su primera visita a la India el año pasado – precedido por un viaje a Israel del primer ministro nacionalista indio Narendra Modi, El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, recordó los ataques islamistas de 2008 en Mumbai en los que murieron casi 170 civiles. “Los indios e israelíes conocen muy bien el dolor de los ataques terroristas”, dijo a Modi. “Recordamos el horrible salvajismo de Mumbai. Apretamos los dientes, nos defendemos, nunca nos rendimos”. Esto también fue hablar BJP.
Varios comentaristas indios, sin embargo, he advertido que el sionismo de derecha y el nacionalismo de derecha bajo Modi no deberían convertirse en la piedra angular de la relación entre los dos países, los cuales – de maneras bastante diferentes – Luchó contra el imperio británico.
Los nacionalistas hindúes habían construido “Una narrativa de los hindúes como históricamente víctimas a manos de los musulmanes”, Una idea atractiva para aquellos hindúes que recuerdan la partición y la relación turbulenta continua con Pakistán.
De hecho, como Malhotra señaló en Haaretz, “Los mayores admiradores de Israel en la India parecen ser los” hindúes de internet “que aman principalmente a Israel por cómo trata con Palestina y lucha contra los musulmanes”.
Malhotra ha condenado al profesor de la Universidad de Carleton, Vivek Dehejia, por exigir una alianza “tripartita” entre India, Israel y Estados Unidos. – ya que todos han sufrido “el flagelo del terrorismo islámico”.
De hecho, a fines de 2016, solo 23 hombres de la India se habían ido a luchar por Isis en el mundo árabe, aunque Bélgica, Con una población de solo medio millón de musulmanes, produjo casi 500 combatientes.
El argumento de Malhotra es que la relación indio-israelí debería ser pragmática más que ideológica.
Registrarse en la “guerra contra el terror” – especialmente “terror islamista” – Puede parecer natural para dos estados construidos sobre una partición colonial cuya seguridad está amenazada por vecinos musulmanes.
En ambos casos, su lucha es por el derecho a poseer u ocupar territorio. Israel, India y Pakistán poseen armas nucleares. Otra buena razón para no dejar que Palestina y Cachemira se enreden. Y dejar en paz a los 180 millones de musulmanes de la India.
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