“Queremos sumar a la política a los no políticos”: Wikipartido

Ayer el Wikipartido solicitó su registro ante el IFE. Hoy tiene 255 miembros activos y aún le faltan 219 mil 745 simpatizantes. Aquí la idea de cómo los conseguirán
febrero 1, 2013Dulce Ramos (@WikiRamos)

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El Wikipartido tiene 255 miembros activos y aún le faltan 219 mil 745 simpatizantes para convertirse ser reconocido ante el Instituto Federal Electoral. Aunque debe multiplicar su cifra de afiliados en más de 860 veces, los que ya lo conforman tienen claro dónde los buscarán: entre aquellos que no hacen política, e incluso, entre aquellos a los que no les gusta.
El Wikipartido, iniciativa que se define como una agrupación ciudadana que busca ser “el primer partido totalmente abierto, democrático y colectivo”, presentó ayer ante el IFE su solicitud de registro. En construcción desde marzo de 2012, aunque recién constituido como Asociación Civil, el ‘Wiki’ busca, más que abanderar una ideología, ser una plataforma para las personas interesadas en los asuntos públicos de su entorno.
Concebir de esa forma un partido político, aseguran, permitirá lanzar candidaturas de personas con liderazgo basado en competencia y conocimientos, no en carisma o capacidad de “acarreo”. En palabras de Armando Sobrino, estudiante de ciencia política y uno de sus miembros, “la idea es sumar a la política a los no políticos”.
Si bien sus miembros rechazan la idea de asociar el Wikipartido a un presidente, un secretario general y a otros cargos comunes en las estructuras de los partidos actuales, reconocen que deben hacerlo por los requerimientos del IFE. Por tanto, en su registro consta que el presidente de la AC es Alfonso Tamés Grijalva, ingeniero industrial de 38 años, profesor en el ITAM y ex militante del Partido Acción Nacional.
Según ha explicado Tamés en distintos foros, el Wikipartido pretende funcionar igual que la Wikipedia; es decir, como una plataforma construida por la “inteligencia colectiva”.
Para ello, explica, utilizarán herramientas digitales que permitan a los integrantes dar al partido la forma que ellos deseen. La única restricción es apegarse a cinco principios: democracia real y directa, apertura social, construcción colectiva, reasignación del dinero público (proponen que los fondos que reciban del IFE sean donados a universidades) y respeto a los derechos humanos.
¿Cómo se sirve el Wikipartido de internet?
Al haber presentado su solicitud de registro, el ‘Wiki’ debe cumplir con el requisito de hacer por lo menos 20 asambleas estatales con 3 mil personas mínimo, pero antes trabajarán en el diseño de los documentos básicos y su plan de acción. Para ello, en lugar de hacer asambleas, los miembros iniciarán la redacción en Google Docs, herramienta que permite que varios usuarios abran y modifiquen un documento al mismo tiempo.
“La idea es que esto funcione como funciona el software libre”, explica Armando Sobrino, de 23 años. El joven es parte del comité de lanzamiento de la iniciativa.
La comparación hecha por Sobrino implicaría que los miembros que así lo deseen puedan redactar y modificar los futuros estatutos hasta que haya un acuerdo.
Organizarse de manera digital también permite que los afiliados se “salven” de lo que Sobrino denomina “asambleitis”. Reunir a un grupo de personas a un lugar y a una hora para escuchar discursos, considera, ya no es necesario.
En su página web, cada miembro debe tener un perfil que especifique cuáles son sus intereses y su experiencia en torno a temas públicos como política fiscal, desarrollo social, educación, urbanismo, etcétera. Ese perfil servirá para echar a andar un sistema de delegación de votos.
“La delegación del voto es un poderoso mecanismo de representación que te permite designar a otros miembros del partido para representarte en votaciones de ciertos temas”, dice la página electrónica. “Elige a tus delegados en función de su capacidad técnica. Puedes cancelar la delegación en cualquier momento”.
Delegar el voto, asegura Alfonso Tamés, no sólo resolverá el problema de las convocatorias cuando deban tomar decisiones, sino que, también, hace que la participación política no exija demasiado tiempo y, con ello, más personas tengan opción para involucrarse en la vida pública. Incluso aquellas a quienes no les interesa la política, tal como hasta ahora la han definido y practicado los partidos.