Las provocaciones de los rebeldes amenazan el plan de Lavrov y Kerry
Foto: EPA
El
primer grupo de inspectores que debe valorar los arsenales de armas
químicas en Siria debe llegar al país en los próximos días. Sobre esto
nos ha contado el ministro de relaciones exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, en una entrevista en el periódico Komersant.
Las
autoridades oficiales sirias están listas para cooperar plenamente con
los inspectores de la Organización para la prohibición de armas
químicas. Los colaboradores de la OPAQ tendrán acceso a cualquier lugar
que les interese. El principal obstáculo en el camino a la realización
del plan para la eliminación de las reservas de sustancias venenosas en
Siria puede ser las provocaciones por parte de los rebeldes. “Para que
el proceso de estudio del arsenal químico de Siria no se frustre, los
patrocinadores extranjeros de los insurgentes deberán convencerlos de
que no traten de reemplazar al gobierno de Bashar Asad,
provocando de esta manera un ataque desde el exterior”, declaró el
ministro de exteriores de Rusia, Serguei Lavrov. Diciendo esto señaló
también que parte de la oposición siria está compuesta por extremistas,
sobre los cuales no puede tener influencia nadie. Evitar las
provocaciones es prácticamente imposible, considera el presidente del
Instituto del Medio oriente, Evgueni Satanovski:
-¿Qué
no usaría con satisfacción la oposición siria en una situación tan
cómoda para continuar con los intentos de derrocar a Asad? Es
comprensible que la mayor parte de las organizaciones terroristas que
forman parte de esta oposición, ven a los países que toman parte en la
resolución para el desarme de Siria, a sus enemigos. Y entonces pueden
ocurir “tiroteos” contra los inspectores de la ONU, o a aquellos que se
dedicarán a las armas químicas, y también intentos de tomar estas armas
bajo control de estos grupos terroristas, esto será lo normal en la
situación de mañana y de pasado mañana en Siria.
Mientras
tanto, según informó Serguei Lavrov, el grupo de inspectores de la OPAQ
llegará a Siria en los próximos días. Ellos tendrán ante sí la tarea de
determinar donde se encuentrará su base y comenzar a trabajar. En el
terreno, establecerán contacto con el gobierno sirio, el cual ya ha
nombrado a la persona responsable de ayudar a los inspectores. En
consecuencia, los expertos determinarán el volumen real del arsenal
químico sirio y también, dónde y cómo podría ser destruido. Nos comenta
el director de proyectos informativos del Centro de investigaciones
políticas de Rusia, Andrei Baklitski:
-Las
reservas de armas químicas en Siria pueden ser más de mil toneladas.
Pero en lo fundamental, ellas están localizadas en almacenes centrales,
por eso no debe hacer falta comprobar cada tonelada por separado. Es
suficiente con comprobar que lo declarado coincide con lo que realmente
hay y cómo se ha acordado en Ginebra, ya en noviembre debe haberse
determinado la correspondencia de lo que ha presentado Siria y lo que
ella tiene almacenado.
Después
de esto, los inspectores llegarán sus conclusiones, cuáles sustancias
venenosas se pueden destruir en el lugar que se encuentran. Si en Siria
hay la infraeestructura y capacidad necesaria para esto. También podrían
actuar estaciones móviles para la eliminación de armas químicas que
tienen los EEUU y otros países. Parte del arsenal químico, muy
probablemente sea trasladado fuera del territorio sirio y destruido en
otros países. Tampoco se ha determinado quién y en qué por ciento
financiará esta operación. Una parte de la suma necesaria la aportará
Rusia, informó Serguei Lavrov. Dicho sea de paso, todavía en Ginebra,
después de las conversaciones con John Kerry,
el ministro ruso de exteriores recordó que algunos países habían
comprometido a financiar al ataque norteamericano a Siria. Si esto es
así, entonces ellos también deberán estar listos para aportar medios
financieros a la liquidación de los arsenales químicos de Siria, dijo
Lavrov en tono jocoso.
ovm/sk/er
Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción deLa Voz de Rusia.
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