Magistrado se deja 'consentir' por zar de los casinos
Casinos en México (Foto: Archivo/EL UNIVERSAL)
La grabación de una conversación telefónica con un juzgador de
Tamaulipas revela las presuntas gestiones del abogado del empresario
casinero con colaboradores del consejero Daniel Cabeza de Vaca
Francisco Salazar Arreozola, apoderado legal y encargado de relaciones públicas de Juan José Rojas Cardona, el Zar de los Casinos,
presume de tener contactos en el Consejo de la Judicatura Federal
(CJF), a quienes les pide apoyo y que “apapachen” a sus amigos
magistrados.
La grabación de una conversación telefónica con un juzgador de Tamaulipas —quien buscó que lo cambiaran de adscripción—, revela las presuntas gestiones del abogado del empresario casinero con colaboradores del consejero Daniel Cabeza de Vaca.
El audio con el que cuenta EL UNIVERSAL, registra una conversación entre quienes son identificados como Salazar Arreozola y el magistrado José Manuel Rodríguez Puerto, del Primer Tribunal Colegiado y en Materia Penal y del Trabajo del Décimo Noveno Circuito de Tamaulipas, quien incluso ha viajado a Monterrey, para jugar en los casinos de Entretenimiento de México (Emex), de acuerdo con las grabaciones telefónicas.
Al respecto, “en relación con los señalamientos de que se recibiera alguna llamada de una persona de nombre Francisco Salazar, así como realizar gestiones para la readscripción de algún funcionario del Poder Judicial de la Federación, la oficina del Consejero Cabeza de Vaca Hernández niega rotundamente haber recibido una llamada o solicitud de audiencia de la persona mencionada”.
Destacó que no existe ninguna relación o vínculo del personal de la misma con dicha persona, así como se niega también que el Consejero pudiese haber influido por medio de gestiones en favor del funcionario aludido, dado que las decisiones de esa especie se toman de manera colegiada y con absoluta transparencia”.
Por otra parte, existen mensajes de texto, que intercambiaron el magistrado Rodríguez Puerto y el abogado Salazar, entregados a esta casa editorial, que dan cuenta de que presuntamente los favores son mutuos, ya que Rodríguez Puerto al parecer participó del tráfico de influencias para gestionar con otros juzgadores los expedientes legales que tenían a su cargo y relacionados con las operaciones de las casas de juego y apuestas de Rojas Cardona, con el objetivo de incidir en sus resoluciones.
En su edición de ayer, este diario informó sobre la relación de amistad y de negocios entre Salazar Arreozola y Eduardo Ochoa Torres, magistrado de circuito del Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil del estado de Nuevo León, quien incluso habría facilitado a este grupo empresarial las gestiones para contactar a juzgadores federales encargados de los fallos judiciales de algunos de los amparos que ha promovido, aunque éste no es el único caso.
El magistrado Rodríguez Puerto era presidente del Primer Tribunal Colegiado de Circuito en Cancún, Quintana Roo, pero fue reasignado a Tamaulipas, por lo que habría buscado el apoyo de su amigo “Paco” Salazar para que con sus influencias en el CJF, este abogado pudiera lograr que lo comisionaran a otra entidad menos peligrosa.
La conversación telefónica entre el magistrado José Manuel Rodríguez Puerto y Salazar Arreozola, de noviembre de 2013, da cuenta de las gestiones, y de una supuesta reunión entre Rodríguez Puerto y el consejero Cabeza de Vaca, para tratar el tema de cambio de adscripción.
Aunque no existe evidencia de que el encuentro se verificó y el magistrado no ha sido reasignado a otro circuito judicial, en la grabación Rodríguez Puerto asegura que se dirige a la cita que a las 13:00 horas sostendrá con el consejero; mientras que el abogado del casinero (Francisco Salazar Arreozola, FSA), afirma que le llamará al “particular”, menciona a Mario Prado —secretario técnico coordinador de la ponencia del consejero Cabeza de Vaca—, para que “le eche una mano a como dé lugar”, y ofrece que hablará con “los amigos del Consejo (de la Judicatura Federal)” para que lo “apapachen”.
Aquí, algunos fragmentos del diálogo telefónico que sostuvieron:
Magistrado— Hice la cita hoy con el señor consejero a la una.
FSA— Perfecto.
Magistrado— De hecho estoy aquí en México.
FSA— Ah, muy bien.
Magistrado— Ahorita estoy en el Camino Real, ahorita ya voy a tomar el taxi para allá,
FSA— Perfecto.
Magistrado— (inaudible) amigo porque voy nervioso, no sé ni qué.
FSA— No pues ora sí que la verdad, digo ahora sí que hay que mentirle con la verdad, hay que decirle que pues está cabrón ¿verdad? Está de la chingada digo. Yo como quiera, ahorita les marco a los amigos para que ahí coadyuven, que hagan... que te cobijen ellos también.
Magistrado— Ajá.
FSA— Ahorita le hablo al particular, para que sepa y te apapache y que nos eche la mano a como dé lugar, verdad.
Magistrado— Ah, ok, pero ¿sí hay opción verdad?
FSA— Sí, “corre”, claro que sí, y ese señor es muy buena gente. Este señor nos va a ayudar mucho.
Magistrado— Ok.
FSA— Ahorita como quiera le marco a Mario, a Mario Prado para que también le diga que vas para allá, y que te eche la mano, y ahí te apapache y te apoye.
Magistrado— Si porque estaba hoy con mi esposa le digo, ‘qué le diré’, no sé, me presento ya (inaudible y risas), o nomás llegar y cámbienme rápido, entonces necesito un preámbulo, pero no sé en qué disposición estará, no sé, que me pueda decir él: cómo cambiamos a 92 pues no nomás vamos a regresar a uno”.
FSA— Lo importante es que vea que estás sensible y ahora sí que pues agachas la cabeza, que él sienta la preocupación, ya de lo demás nos encargamos nosotros.
La presunta relación entre el magistrado Rodríguez Puerto y el representante del empresario Rojas Cardona, tiene otras facetas.
En un mensaje de voz, que el juzgador dejó en el teléfono del abogado le informó: “Mi querido amigo Paco, tu amigo José Manuel Rodríguez Puerto. Estamos aquí en Monterrey, estamos hospedados en el hotel Crown Plaza, de avenida Constitución, está a un lado del hotel Sheraton, a ver sí luego puedo llamar, hoy es sábado tres de la tarde, adiós”.
Otro audio da cuenta de que al magistrado le gusta jugar máquinas en el casino, y que Salazar Arreozola le brindó la atención de recibirlo en una de las casas de juego de Rojas Cardona, según revela el material obtenido:
Magistrado— Querido Paco, ¿cómo estamos?
FSA— Mi estimado ¿qué tal el viaje, bien?
Magistrado— Sí, acabamos de llegar, y este... lo que quiere mi esposa es ir a brindar, ¿para dónde agarramos para el casino?
FSA— Mira, tengo varios, este, ¿te gustan las máquinas verdad, o quieres juego (inaudible).
Magistrado— No, no, máquinas.
FSA— Bueno, el más cercano que tenemos donde estás es el Palmas Miravalle. Si quieres, ¿traes el carro o andas en taxi?
Magistrado— Pero por dónde agarro. ¿Tomo un taxi mejor?
FSA— Mejor agarra un taxi pa’ que no batalles. Dile que te lleve al Palmas Miravalle, donde está el restaurante La Nacional, ellos ubican perfectamente los lugares. Yo ahorita marco, tú me dices más o menos cuando vayas llegando y le digo al gerente que te atienda como debe ser.
Magistrado— Ok, Gracias Paco, entonces voy a guardar mi carro, y mañana nos hablamos, gracias muy amable, hasta luego.
En uno de los mensajes fechado el 1 de abril de 2013 el magistrado y el abogado de casinos intercambiaron la siguiente información:
Magistrado— Invité a comer hoy al Ma Ocampo, porque escuché que pretende confirmar la suspensión porque no se acreditó haber cumplido con las medidas de seguridad en materia de proteccion civil.
FSA— Muy Bien! Convéncelo por que es importante para nosotros eso! Avísame qué se ocupa!
El 1 de mayo de 2013, hubo otro intercambio de mensajes de texto, sobre el mismo tema. (Se reproducen textual).
Magistrado— Me dice el Mgdo Ocampo que los permisos que exhibieron son d fecha posterior a la clausura.
FSA— Nos faltaron unos permisos y me los expidieron después de la negativa de la provisional, pero al fin y al cabo están todos ya en orden y cumplimos con interés jurídico para estar operando al 100 por ciento! Convéncelo, vale la pena el tirón!
Magistrado— No kiere el Mgdo. Aunque d todos modos dijo k lo va a pensar.
FSA—Te puedo mandar los docs con la misma persona! Nadamás Dime cuándo y dónde! MaÑana a las 12 en la curva, va?
Magistrado— Me salgo un rato de la sesión y llego a las 12 del día en punto, ok?
La grabación de una conversación telefónica con un juzgador de Tamaulipas —quien buscó que lo cambiaran de adscripción—, revela las presuntas gestiones del abogado del empresario casinero con colaboradores del consejero Daniel Cabeza de Vaca.
El audio con el que cuenta EL UNIVERSAL, registra una conversación entre quienes son identificados como Salazar Arreozola y el magistrado José Manuel Rodríguez Puerto, del Primer Tribunal Colegiado y en Materia Penal y del Trabajo del Décimo Noveno Circuito de Tamaulipas, quien incluso ha viajado a Monterrey, para jugar en los casinos de Entretenimiento de México (Emex), de acuerdo con las grabaciones telefónicas.
Al respecto, “en relación con los señalamientos de que se recibiera alguna llamada de una persona de nombre Francisco Salazar, así como realizar gestiones para la readscripción de algún funcionario del Poder Judicial de la Federación, la oficina del Consejero Cabeza de Vaca Hernández niega rotundamente haber recibido una llamada o solicitud de audiencia de la persona mencionada”.
Destacó que no existe ninguna relación o vínculo del personal de la misma con dicha persona, así como se niega también que el Consejero pudiese haber influido por medio de gestiones en favor del funcionario aludido, dado que las decisiones de esa especie se toman de manera colegiada y con absoluta transparencia”.
Por otra parte, existen mensajes de texto, que intercambiaron el magistrado Rodríguez Puerto y el abogado Salazar, entregados a esta casa editorial, que dan cuenta de que presuntamente los favores son mutuos, ya que Rodríguez Puerto al parecer participó del tráfico de influencias para gestionar con otros juzgadores los expedientes legales que tenían a su cargo y relacionados con las operaciones de las casas de juego y apuestas de Rojas Cardona, con el objetivo de incidir en sus resoluciones.
En su edición de ayer, este diario informó sobre la relación de amistad y de negocios entre Salazar Arreozola y Eduardo Ochoa Torres, magistrado de circuito del Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil del estado de Nuevo León, quien incluso habría facilitado a este grupo empresarial las gestiones para contactar a juzgadores federales encargados de los fallos judiciales de algunos de los amparos que ha promovido, aunque éste no es el único caso.
El magistrado Rodríguez Puerto era presidente del Primer Tribunal Colegiado de Circuito en Cancún, Quintana Roo, pero fue reasignado a Tamaulipas, por lo que habría buscado el apoyo de su amigo “Paco” Salazar para que con sus influencias en el CJF, este abogado pudiera lograr que lo comisionaran a otra entidad menos peligrosa.
La conversación telefónica entre el magistrado José Manuel Rodríguez Puerto y Salazar Arreozola, de noviembre de 2013, da cuenta de las gestiones, y de una supuesta reunión entre Rodríguez Puerto y el consejero Cabeza de Vaca, para tratar el tema de cambio de adscripción.
Aunque no existe evidencia de que el encuentro se verificó y el magistrado no ha sido reasignado a otro circuito judicial, en la grabación Rodríguez Puerto asegura que se dirige a la cita que a las 13:00 horas sostendrá con el consejero; mientras que el abogado del casinero (Francisco Salazar Arreozola, FSA), afirma que le llamará al “particular”, menciona a Mario Prado —secretario técnico coordinador de la ponencia del consejero Cabeza de Vaca—, para que “le eche una mano a como dé lugar”, y ofrece que hablará con “los amigos del Consejo (de la Judicatura Federal)” para que lo “apapachen”.
Aquí, algunos fragmentos del diálogo telefónico que sostuvieron:
Magistrado— Hice la cita hoy con el señor consejero a la una.
FSA— Perfecto.
Magistrado— De hecho estoy aquí en México.
FSA— Ah, muy bien.
Magistrado— Ahorita estoy en el Camino Real, ahorita ya voy a tomar el taxi para allá,
FSA— Perfecto.
Magistrado— (inaudible) amigo porque voy nervioso, no sé ni qué.
FSA— No pues ora sí que la verdad, digo ahora sí que hay que mentirle con la verdad, hay que decirle que pues está cabrón ¿verdad? Está de la chingada digo. Yo como quiera, ahorita les marco a los amigos para que ahí coadyuven, que hagan... que te cobijen ellos también.
Magistrado— Ajá.
FSA— Ahorita le hablo al particular, para que sepa y te apapache y que nos eche la mano a como dé lugar, verdad.
Magistrado— Ah, ok, pero ¿sí hay opción verdad?
FSA— Sí, “corre”, claro que sí, y ese señor es muy buena gente. Este señor nos va a ayudar mucho.
Magistrado— Ok.
FSA— Ahorita como quiera le marco a Mario, a Mario Prado para que también le diga que vas para allá, y que te eche la mano, y ahí te apapache y te apoye.
Magistrado— Si porque estaba hoy con mi esposa le digo, ‘qué le diré’, no sé, me presento ya (inaudible y risas), o nomás llegar y cámbienme rápido, entonces necesito un preámbulo, pero no sé en qué disposición estará, no sé, que me pueda decir él: cómo cambiamos a 92 pues no nomás vamos a regresar a uno”.
FSA— Lo importante es que vea que estás sensible y ahora sí que pues agachas la cabeza, que él sienta la preocupación, ya de lo demás nos encargamos nosotros.
La presunta relación entre el magistrado Rodríguez Puerto y el representante del empresario Rojas Cardona, tiene otras facetas.
En un mensaje de voz, que el juzgador dejó en el teléfono del abogado le informó: “Mi querido amigo Paco, tu amigo José Manuel Rodríguez Puerto. Estamos aquí en Monterrey, estamos hospedados en el hotel Crown Plaza, de avenida Constitución, está a un lado del hotel Sheraton, a ver sí luego puedo llamar, hoy es sábado tres de la tarde, adiós”.
Otro audio da cuenta de que al magistrado le gusta jugar máquinas en el casino, y que Salazar Arreozola le brindó la atención de recibirlo en una de las casas de juego de Rojas Cardona, según revela el material obtenido:
Magistrado— Querido Paco, ¿cómo estamos?
FSA— Mi estimado ¿qué tal el viaje, bien?
Magistrado— Sí, acabamos de llegar, y este... lo que quiere mi esposa es ir a brindar, ¿para dónde agarramos para el casino?
FSA— Mira, tengo varios, este, ¿te gustan las máquinas verdad, o quieres juego (inaudible).
Magistrado— No, no, máquinas.
FSA— Bueno, el más cercano que tenemos donde estás es el Palmas Miravalle. Si quieres, ¿traes el carro o andas en taxi?
Magistrado— Pero por dónde agarro. ¿Tomo un taxi mejor?
FSA— Mejor agarra un taxi pa’ que no batalles. Dile que te lleve al Palmas Miravalle, donde está el restaurante La Nacional, ellos ubican perfectamente los lugares. Yo ahorita marco, tú me dices más o menos cuando vayas llegando y le digo al gerente que te atienda como debe ser.
Magistrado— Ok, Gracias Paco, entonces voy a guardar mi carro, y mañana nos hablamos, gracias muy amable, hasta luego.
Los mensajes de texto
La relación al parecer implica que el magistrado Rodríguez Puerto
participaría en el tráfico de influencias del casinero con integrantes
del Poder Judicial, de acuerdo con mensajes de texto enviados por el
juzgador al teléfono de Salazar Arreozola, obtenidos por EL UNIVERSAL.En uno de los mensajes fechado el 1 de abril de 2013 el magistrado y el abogado de casinos intercambiaron la siguiente información:
Magistrado— Invité a comer hoy al Ma Ocampo, porque escuché que pretende confirmar la suspensión porque no se acreditó haber cumplido con las medidas de seguridad en materia de proteccion civil.
FSA— Muy Bien! Convéncelo por que es importante para nosotros eso! Avísame qué se ocupa!
El 1 de mayo de 2013, hubo otro intercambio de mensajes de texto, sobre el mismo tema. (Se reproducen textual).
Magistrado— Me dice el Mgdo Ocampo que los permisos que exhibieron son d fecha posterior a la clausura.
FSA— Nos faltaron unos permisos y me los expidieron después de la negativa de la provisional, pero al fin y al cabo están todos ya en orden y cumplimos con interés jurídico para estar operando al 100 por ciento! Convéncelo, vale la pena el tirón!
Magistrado— No kiere el Mgdo. Aunque d todos modos dijo k lo va a pensar.
FSA—Te puedo mandar los docs con la misma persona! Nadamás Dime cuándo y dónde! MaÑana a las 12 en la curva, va?
Magistrado— Me salgo un rato de la sesión y llego a las 12 del día en punto, ok?
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