Imperialismo: Banqueros, la droga más guerras y genocidio. Descenso de México al Infierno
Descenso de México en el Infierno
Si Washington ha sido la fuerza impulsora para la guerra del régimen, los bancos de Wall Street han sido los principales instrumentos que garanticen las ganancias de los cárteles de la droga. Cada gran banco de Estados Unidos ha estado profundamente involucrada en el lavado de cientos de miles de millones de dólares en ganancias del narcotráfico, durante la mayor parte de la década pasada.
México 's descenso en este infierno ha sido diseñado por las instituciones financieras y políticas principales de Estados Unidos, cada apoyo' un lado o del otro "en la sangrienta" guerra total "que no perdona a nadie, no hay lugar ni momento en el tiempo. Mientras que los brazos del gobierno mexicano Pentágono y la Agencia Antidrogas de Estados Unidos hace cumplir la "solución militar", los mayores bancos de Estados Unidos reciben, lavar y transferir cientos de miles de millones de dólares a las cuentas de los señores de la droga ', que luego compran armas modernas, pagar ejércitos privados de asesinos y un número incalculable de corrupción de funcionarios políticos y de aplicación de la ley en ambos lados de la frontera.
Descenso de México en el Infierno
Puntajes Todos los días, si no cientos, de cadáveres - aparecer en calles y o se encuentran en tumbas sin nombre; docenas son asesinadas en sus casas, automóviles, transporte público, oficinas e incluso los hospitales; conocidos y desconocidos víctimas en los cientos son secuestrados y desaparecen; la escuela los niños, padres, maestros, médicos y empresarios se incautaron en plena luz del día y se mantienen para pedir rescate o asesinados en represalia. Son secuestrados Miles de trabajadores migrantes, robaron, rescatados, asesinados y está surgiendo evidencia de que algunos se venden en el "comercio de órganos 'ilegal. La policía se atrincheraron en sus comisarios; los militares, siempre y cuando llega, lleva a cabo su frustración en ciudades enteras, disparando más civiles que soldados del cártel. La vida cotidiana gira en torno a sobrevivir a la cifra de muertos a diario; amenazas están por todas partes, las bandas armadas y las patrullas militares fuego y matan con impunidad. La gente vive en el miedo y la ira.
El Tratado de Libre Comercio: Las chispas que encendieron el Infierno
A finales de la década de 1980, México estaba en crisis, pero el pueblo eligió una forma legal a cabo: se eligió un presidente, Cuauhtémoc Cárdenas, sobre la base de su programa nacional para promover la revitalización económica de la agricultura y la industria. La élite mexicana, encabezada por Carlos Salinas, del Partido Revolucionario Institucional (PRI) eligió otra cosa y subvertido la elección: El electorado se le negó su victoria; se ignoraron las protestas masivas pacíficas. Salinas y los presidentes mexicanos posteriores perseguidos vigorosamente un acuerdo de libre comercio (TLC) con los EE.UU. y Canadá, lo que condujo rápidamente a millones de agricultores mexicanos, ganaderos y pequeños empresarios en quiebra. Devastación llevó a la huida de millones de trabajadores inmigrantes. Movimientos rurales de los deudores florecieron y reasentamiento se redujo, fueron cooptados o reprimidos. La miseria de la economía legal contrasta con la riqueza creciente de los traficantes de drogas y personas, lo que generó una creciente demanda de auxiliares armados bien remunerados como soldados para los cárteles. Los sindicatos regionales de drogas surgieron de la afluencia local.
En el nuevo milenio, movimientos populares y una nueva esperanza electoral surgieron: Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Para el año 2006 un vasto movimiento electoral pacífico prometió reformas sociales y económicas sustanciales para 'integrar a millones de jóvenes descontentos'. En la economía paralela, los carteles de la droga se expandían y se benefician de la miseria de millones de trabajadores y campesinos marginados por la élite mexicana, que había saqueado el tesoro público, especularon en el sector inmobiliario, robaron la industria del petróleo y crearon enormes monopolios privatizados en la sectores de la comunicación y la banca.
En 2006, millones de votantes mexicanos se les negó una vez más su victoria electoral: La última y mejor esperanza de una transformación pacífica se desvaneció. Con el respaldo de la Administración de los Estados Unidos, Felipe Calderón robó la elección y procedió a lanzar la "Guerra contra el narcotráfico" estrategia dictada por Washington.
La Estrategia de Guerra intensifica la guerra contra las drogas: Las crisis bancarias profundiza los lazos con narcotraficantes
La escalada masiva de homicidios y la violencia en México se inició con la declaración de una guerra contra los cárteles de la droga por el electo de manera fraudulenta el presidente Calderón, una política empujó inicialmente por la Administración Bush y, posteriormente, fuertemente respaldado por el gobierno de Obama - régimen de Clinton. Más de 40.000 soldados mexicanos llenaron las calles, pueblos y barrios - agredir violentamente a los ciudadanos - especialmente los jóvenes. Los cárteles de represalias por la escalada de los ataques armados contra la policía. La guerra se extendió a todas las grandes ciudades ya lo largo de las principales carreteras y caminos rurales; asesinatos se multiplicaron y México descendieron aún más en un infierno dantesco. Mientras tanto, el régimen de Obama "reafirmó" su apoyo a una solución militarista en ambos lados de la frontera: Más de 500.000 inmigrantes mexicanos fueron capturados y expulsados de los EE.UU.; fuertemente armados patrullas fronterizas se multiplicaron. La venta de armas transfronterizos crecieron exponencialmente .El estadounidense "mercado" para los productos manufacturados mexicanos y los productos agrícolas se redujeron, ampliando aún más la piscina para los reclutas del cártel, mientras que el suministro de armas de alta potencia se incrementó. Armas y drogas políticas de la Casa Blanca fortalecieron ambos lados en este ciclo maníaco homicida: El gobierno de Estados Unidos armó el régimen de Calderón y los fabricantes de armas estadounidenses armas vendidas a los cárteles a través de la venta de armas legales e subterráneas. Se mantiene encendido o aumento de la demanda de drogas en los EE.UU. - y los beneficios derivados del tráfico grotescas y ventas- mantenido la principal fuerza impulsora detrás de la ola de violencia y desintegración social en México.
Beneficios de la droga, en el sentido más básico, están asegurados a
través de la capacidad de los cárteles de lavar y transferir miles de
millones de dólares a través del sistema bancario de Estados Unidos.
La escala y el alcance de la alianza Estados Unidos cartel bancario con
las drogas supera cualquier otra actividad económica del sistema
bancario privado estadounidense.
De acuerdo con registros del Departamento de Justicia de Estados
Unidos, uno de los bancos solo, Wachovia Bank (ahora propiedad de Wells
Fargo), lavada $ 378,3 mil millones de dólares entre el 1 de mayo de
2004 y 31 de mayo 2007 (The Guardian, 11 de mayo de 2011).
Cada banco importante en los EE.UU. ha servido como un socio activo
financiero de los cárteles de la droga asesina - incluyendo Bank of
America, Citibank y JP Morgan, así como los bancos extranjeros que
operan en Nueva York, Miami y Los Ángeles, así como en Londres . Mientras la Casa Blanca paga el estado y el ejército para matar a los mexicanos sospechosos de tráfico de drogas de México, el Departamento de Justicia de Estados Unidos da una bofetada tardíamente una relativamente pequeña multa en el principal cómplice financiero de Estados Unidos para el comercio de la droga asesina, Wachovia Bank, repuestos sus funcionarios bancarios de cualquier cárcel tiempo y permite que los casos más importantes que caen en el despido.
La principal agencia del Tesoro de Estados Unidos que participan en la investigación de lavado de dinero, el Subsecretario para Terrorismo e Inteligencia Financiera, deliberadamente ignoró la colaboración flagrante de los bancos de Estados Unidos con los terroristas de drogas, concentrando casi la totalidad de su personal y recursos en la aplicación de sanciones contra Irán. Durante siete años, el subsecretario del Tesoro Stuart Levey utilizó su poder como jefe del Departamento para Asuntos de Terrorismo e Inteligencia Financiera para perseguir falsa "guerra contra el terrorismo" Israel 's contra Irán, en lugar de cerrar las operaciones de lavado de dinero de Wachovia con los terroristas de la droga mexicanos. En este período de tiempo se calcula que 40.000 civiles mexicanos han sido asesinados por los cárteles y el ejército.
Sin armas y servicios financieros de apoyo tanto a los regímenes ilegítimos mexicanos y los carteles de la droga - no podía haber "guerra contra las drogas", no hay asesinatos en masa y sin terror estatal. Los simples actos de detener la avalancha de productos agrícolas estadounidenses subsidiados baratos a México y de-criminalizar el uso y compra de cocaína en los EE.UU. sería secar el charco de "soldados del cártel del campesinado mexicano a la bancarrota y los recortar los beneficios y la demanda de drogas ilegales en el mercado estadounidense.
Los narcotraficantes, los Bancos y la Casa Blanca
Si los principales bancos de Estados Unidos son los motores económicos que permiten a los mil millones de dólares para los imperios de drogas operan, la Casa Blanca, el Congreso y las agencias de la ley son los protectores básicos de estos bancos. A pesar de la implicación profunda y generalizada de los principales bancos en el lavado de cientos de miles de millones de dólares en fondos ilícitos, las "transacciones judiciales" llevadas a cabo por los fiscales de Estados Unidos han llevado a ningún tiempo en la cárcel para los banqueros. Un asentamiento de la corte fue de una multa de 50 millones de dólares, menos del 0,5% de uno de los bancos (banco Wachovia / Wells Fargo) 12300000000 dólar ganancias para el 2009 (The Guardian, 11 de mayo de 2011). A pesar de la muerte de decenas de miles de civiles mexicanos, US Poder Ejecutivo dirigieron la DEA, los fiscales federales y los jueces para imponer un "castigo" como risible de Wachovia por sus servicios ilegales a los cárteles de la droga. Los más prominentes funcionarios económicos de los regímenes de Bush y Obama, incluyendo Summers, Paulson, Geithner, Greenspan, Bernacke y otros, son todos a largo plazo asociados, asesores y miembros de las principales casas financieras y los bancos implicados en el lavado de los miles de millones de beneficios de la droga.
Lavado de dinero de la droga es una de las fuentes más lucrativas de ganancias para Wall Street; los bancos cobran fuertes comisiones sobre la transferencia de las ganancias del narcotráfico, que luego prestan a las instituciones de préstamo a tasas de interés muy por encima de lo que - en su caso - que pagan a los depositantes traficantes de drogas. Bien dotada de las ganancias del narcotráfico desinfectados, estos titanes estadounidenses del mundo de las finanzas puede comprar fácilmente sus propios funcionarios electos para perpetuar el sistema.
Aún más importante y menos obvio es el papel del dinero de la droga en la reciente crisis financiera, especialmente durante sus más críticos primeras semanas.
Según el jefe de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, Antonio María Costa, "En muchos casos, el dinero del narcotráfico (era) ... actualmente el único capital de inversión líquido .... En el segundo semestre de 2008, la liquidez era el principal problema del sistema bancario y, por tanto, capital líquido se convirtió en un factor importante ... los préstamos interbancarios fueron financiados por el dinero que se originó en el comercio de drogas y otras actividades ilegales ... (había) señales de que algunos bancos fueron rescatados en de esa manera. "(edición de Reuters, Enero 25,2009. EE.UU.). Los flujos de capital de los multimillonarios de drogas fueron la clave para flotando Wachovia y otros bancos líderes. En una palabra: los multimillonarios de drogas guardan el sistema financiero capitalista del colapso!
Conclusión
A finales de la primera década del siglo 21, ha quedado claro que la acumulación de capital, por lo menos en América del Norte, está íntimamente ligada a la violencia generalizada y el narcotráfico. Debido a la acumulación de capital depende de capital financiero, y éste depende de las ganancias de la industria del comercio de las drogas del dólar del multi-cien millones de dólares, todo el conjunto está integrado en la "guerra total" sobre las ganancias del narcotráfico. En tiempos de crisis profundas la propia supervivencia del sistema financiero de Estados Unidos - ya través de ella, el sistema bancario mundial - está vinculado a la liquidez de la "industria" de drogas.
En el nivel más superficial de la destrucción de las sociedades de México y Centroamérica - que abarca más de 100 millones de personas - es el resultado de un conflicto entre cárteles de la droga y los regímenes políticos de la región. En un nivel más profundo hay un multiplicador o "efecto dominó" en relación con su colaboración: los cárteles se basan en el apoyo de los bancos de Estados Unidos para hacer realidad sus beneficios; que gastan cientos de millones en la industria de armas de Estados Unidos y otros para asegurar su alimentación, transporte y mercados; que emplean a decenas de miles de reclutas por sus vastos ejércitos privados y redes civiles y compran el cumplimiento de los funcionarios políticos y militares a ambos lados de las fronteras
Por su parte, el gobierno mexicano actúa como un conducto para el Pentágono de EE.UU. / La policía federal, Seguridad Nacional, lucha contra las drogas y aparatos políticos fiscalía la 'guerra', que ha puesto la vida mexicana, la propiedad y la seguridad en riesgo. La Casa Blanca se sitúa en el centro estratégico de operaciones - el régimen mexicano sirve como los verdugos de primera línea.
A un lado de la "guerra contra las drogas" son los principales bancos de Wall Street; en el otro lado, la Casa Blanca y sus estrategas militares imperiales y en el "medio" son 90 millones de mexicanos y 40 mil víctimas de asesinato y contando.
Basándose en fraude político para imponer la desregulación económica en la década de 1990 (neoliberalismo), las políticas de Estados Unidos condujeron directamente a la desintegración social, la criminalización y la militarización de la década actual. La economía narco-financiero sofisticado ahora se ha convertido en la etapa más avanzada del neoliberalismo. Cuando el respetable se convierten en criminales, los criminales se vuelven respetables.
La cuestión del genocidio en México ha sido determinado por el imperio y sus "saber" los banqueros y gobernantes cínicos.
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