Xi Jinping realizó una serie de sugerencias para la construcción de un nuevo modelo de relación entre grandes potencias.
El
presidente de China, Xi Jinping, invitó al Gobierno de Estados Unidos a
impulsar acciones para mejorar sus relaciones y promover la cooperación
en beneficio recíproco, al tiempo que alertó sobre el “resultado
desastroso” que derivaría de un conflicto entre ambos países.
"Si entraran en un conflicto y confrontación, eso llevaría al desastre para ambos países y, por ende, para el mundo", sostuvo el mandatario.
Durante una visita oficial a la nación norteamericana, el mandatario chino realizó una serie de sugerencias para la construcción de un nuevo modelo de relación entre grandes potencias, entre las cuales destacó la necesidad de interpretar correctamente las intenciones estratégicas de cada uno de los dos países, y abordar sus diferencias de una manera adecuada y efectiva.
"Queremos ver un mejor entendimiento y confianza, y menos distanciamiento y sospechas", dijo Xi en un discurso ante empresarios.
El dignatario de la nación asiática arribó el martes a Seattle (noroeste), un importante centro de la industria tecnológica y la aviación de la costa oeste estadounidense, para realizar su primera visita de Estado al país norteamericano desde que asumió la presidencia en 2013.
Durante el banquete de bienvenida, el mandatario explicó que la prioridad de su política exterior es construir un nuevo modelo de relación entre grandes potencias, caracterizado por el no conflicto, la no confrontación, el respeto mutuo y la cooperación de beneficio mutuo.
Asimismo, agregó que las dos naciones deben impulsar firmemente la cooperación de beneficio recíproco y de amplio espectro, al tiempo que destacó que la cooperación requiere de la acomodación de los intereses y las preocupaciones de cada uno y la búsqueda del mayor terreno común para los interese convergentes.
En cuanto al crecimiento económico, Xi expuso sus políticas de Gobierno, que van desde reforma económica hasta mercado bursátil y tipos de cambio, además aseguró que la economía china se mantendrá en un curso estable con un crecimiento bastante rápido.
En relación a esto, resaltó que a pesar de que la economía creció un 7 por ciento en el primer semestre del año, esta tasa de crecimiento sigue siendo una de las más altas del mundo.
Seguidamente, prometió ante los presentes que China coordinará esfuerzos para promover el Estado de derecho en gobernanza y administración, fortalecerá la confianza en el sistema judicial y garantizará que los derechos humanos sean respetados y defendidos efectivamente.
En contexto
"Si entraran en un conflicto y confrontación, eso llevaría al desastre para ambos países y, por ende, para el mundo", sostuvo el mandatario.
Durante una visita oficial a la nación norteamericana, el mandatario chino realizó una serie de sugerencias para la construcción de un nuevo modelo de relación entre grandes potencias, entre las cuales destacó la necesidad de interpretar correctamente las intenciones estratégicas de cada uno de los dos países, y abordar sus diferencias de una manera adecuada y efectiva.
"Queremos ver un mejor entendimiento y confianza, y menos distanciamiento y sospechas", dijo Xi en un discurso ante empresarios.
El dignatario de la nación asiática arribó el martes a Seattle (noroeste), un importante centro de la industria tecnológica y la aviación de la costa oeste estadounidense, para realizar su primera visita de Estado al país norteamericano desde que asumió la presidencia en 2013.
Durante el banquete de bienvenida, el mandatario explicó que la prioridad de su política exterior es construir un nuevo modelo de relación entre grandes potencias, caracterizado por el no conflicto, la no confrontación, el respeto mutuo y la cooperación de beneficio mutuo.
Asimismo, agregó que las dos naciones deben impulsar firmemente la cooperación de beneficio recíproco y de amplio espectro, al tiempo que destacó que la cooperación requiere de la acomodación de los intereses y las preocupaciones de cada uno y la búsqueda del mayor terreno común para los interese convergentes.
En cuanto al crecimiento económico, Xi expuso sus políticas de Gobierno, que van desde reforma económica hasta mercado bursátil y tipos de cambio, además aseguró que la economía china se mantendrá en un curso estable con un crecimiento bastante rápido.
En relación a esto, resaltó que a pesar de que la economía creció un 7 por ciento en el primer semestre del año, esta tasa de crecimiento sigue siendo una de las más altas del mundo.
Seguidamente, prometió ante los presentes que China coordinará esfuerzos para promover el Estado de derecho en gobernanza y administración, fortalecerá la confianza en el sistema judicial y garantizará que los derechos humanos sean respetados y defendidos efectivamente.
En contexto
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