¿QUIÉN ES REALMENTE EL RESPONSABLE DEL ASESINATO DEL EMBAJADOR RUSO?
En las últimas horas hemos vivido un nuevo episodio de confusión alrededor del asesinato del embajador ruso en Turquía, Andréi Kárlov.
Tal y como expusimos en el artículo anterior, hay demasiados elementos extraños alrededor de la baja protección que tenía el embajador en una zona de conflicto armado y alta actividad terrorista, como es Turquía.
Todo ello, nos impulsaba a valorar la posibilidad de que incluso, detrás del asesinato del embajador, se ocultara una operación de bandera falsa capitaneada por Turquía y Rusia, para obtener un pretexto de cara a algun tipo de maniobra futura.
La respuesta coordinada y al unísono, con un mensaje unitario, tanto de Putin como de Erdogan pocas horas después del atentado, serían indicios que podrían apuntar a ello.
Recordemos que tan solo dos horas después del atentado, el gobierno turco ya estaba acusando formalmente al movimiento F.E.T.O. (Organización de Terror Gulenista), como responsable del atentado, en lo que parecería ser, una acusación ya preparada de antemano, para ser lanzada desde antes del propio atentado, con el objetivo de echar las culpas al movimiento del opositor Fetulah Gülen, protegido por EEUU y presionando con ello, a la vez, a los propios EEUU para garantizar su extradición, bajo la amenaza de una posible salida futura de la OTAN por parte de Turquía, cuyas consecuencias tendrían efectos sísmicos en la geopolítica global.
Fetulah Gülen, ¿inductor o chivo expiatorio (poner "cabeza de turco" hubiera sido demasiado obvio)? |
Y las sospechas se multiplican si hacemos caso de esta información, que encontramos en Hispan TV:
‘Asesino de diplomático ruso protegió en ocho ocasiones a Erdogan’
Mevlüt Mert Altıntaş, miembro de la policía antidisturbios turca durante dos años y medio, había trabajado desde julio en ocho actos en los que participó el presidente Recep Tayyip Erdogan, ha informado hoy miércoles el diario local Hurriyet.
En esos actos, Altıntaş formaba parte del segundo grupo de seguridad del presidente turco después de sus guardaespaldas personales, ha escrito el periodista Abdulkadir Selvi, conocido por sus contactos en los círculos de poder.
Es decir, tenemos que el policía había formado parte de los grupos de seguridad del presidente turco, al que supuestamente odiaría por ser partidario de Gülen … y a pesar del control férreo y de la represión que Erdogan y los suyos han emprendido en todo el país, este policía que protegía a Erdogan, se les había pasado por alto. Un tipo lo suficientemente radical, como para matar al embajador ruso, aunque ello le costara la vida … curioso, ¿no?
Pues bien, todo ello ha dado un nuevo y extraño giro, cuando hace pocas horas, el movimiento terrorista Fatah Al-Sham, ha proclamado la autoría del atentado, afirmando que el policia Mert Altintas, que asesinó al embajador, formaba parte de la organización.
Esto entra, evidentemente, en contradicción con las tesis impulsadas por el gobierno turco y que el propio ministro de Asuntos Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglu, ha trasladado al secretario de Estado norteamericano, John Kerry, en conversación telefónica, en lo que parece haber sido, la primera medida de presión de Turquía a EEUU.
¿Y qué se oculta detrás de Fatah Al-Sham?
Bien, Fatah Al-Sahm es la nueva denominación del Frente Al-Nusra, la filial de Al-Qaeda en el conflicto sirio y tras la cual, se ocultan intereses de Arabia Saudí, Qatar, EEUU e Israel.
Esta reivindicación, se produce 24 horas después, de que la web israelí DEBKAfile (dedicada a filtrar informaciones en interés de Israel), ya anunciara, muy poco tiempo después del asesinato del embajador Kárlov, que Fatah Al-Sham era la responsable del ataque.
Si leemos entre líneas, pues, lo que estamos viendo es una batalla propagandística entre ambos bandos. El eje turco-ruso y el bando occidental, capitaneado por la actual administración de EEUU, Israel y las monarquías del Golfo Pérsico.
Las opciones que se presentan ante nuestros ojos, son múltiples y cada una obedecería a diferentes intereses.
Básicamente, puede estar sucediendo alguna de estas posibilidades …
PRIMERA POSIBILIDAD
El atentado, efectivamente lo ha perpetrado F.E.T.O., el movimiento de Gülen, y detrás de todo se ocultarían los intereses de EEUU, Israel y las monarquías del golfo, que intentarían dinamitar la alianza entre Turquía y Rusia.
Esta posibilidad explicaría que este propio eje occidental, esté intentando culpar del asunto a su subrogado, Fatah Al-Sham, para que cargue con las culpas (al fin y al cabo es Al-Qaeda y se les creó para eso, para ocultar maniobras de falsa bandera), alejando toda responsabilidad del golpista Gülen y por lo tanto, de los propios EEUU.
Esta maniobra, tendría el objetivo de evitar tener que enfrentarse con la petición de extradición del clérigo y con la posible acusación indirecta contra los propios EEUU por protegerlo y financiarlo a través de la CIA.
Sin embargo, esto no explicaría el sospechoso bajo nivel de protección que tanto Rusia como Turquía ofrecieron al embajador, si es que consideramos anormal que dicha protección fuera tan escasa.
SEGUNDA POSIBILIDAD
El atentado lo ha perpetrado efectivamente Fatah Al-Sham, pero Turquía está tratando de aprovechar el propio atentado para acusar falsamente a F.E.T.O. y exigir la extradición de Gülen, como medida de presión hacia EEUU.
De nuevo, esto no explicaría el sospechoso bajo nivel de protección que tanto Rusia como Turquía ofrecieron al embajador, si es que consideramos como algo anormal que dicha protección fuera tan escasa.
TERCERA POSIBILIDAD
El atentado lo han perpetrado servicios secretos extranjeros, sean israelíes, norteamericanos, saudíes, qataríes u otros, con el objetivo de dinamitar las relaciones turco-rusas, tal y como han denunciado al unísono los mandatarios ruso y turco, Putin y Erdogan.
Para encubrir sus actos, dichos servicios secretos, habrían intentado usar el paraguas de Fatah Al-Sham, a pesar de que Turquía se habría adelantado públicamente, acusando a F.E.T.O. de los hechos, para obtener las ventajas anteriormente mencionadas.
Otra vez, esto no explicaría el sospechoso bajo nivel de protección que tanto Rusia como Turquía ofrecieron al embajador, etc …
El atentado, sería una operación de falsa bandera perpetrada por Rusia y Turquía, para culpar a EEUU de todo ello, acusándolo de querer romper la alianza turco-rusa.
El objetivo final, sería acusar a F.E.T.O., es decir, a Gülen del ataque, con el objetivo de forzar a EEUU a extraditarlo a Turquía. Cualquier negativa, sería interpretada como un pretexto de EEUU para encubrir al criminal que ha matado al embajador ruso.
Además, con independencia de si lo extraditaran o no, EEUU quedaría como el responsable encubierto del atentado por su apoyo a Gülen y su acción hostil matando a un alto diplomático ruso en territorio turco para dividir la alianza turco-rusa, sería la excusa perfecta para afianzarla aún más e iniciar los primeros pasos para separar a Turquía de la OTAN y provocar un movimiento sísmico a nivel geoestratégico, que afectaría, no solamente a Oriente Medio y el norte de África, sino a toda Europa.
Por lo tanto, sería una jugada estratégica para forzar este movimiento.
Esto permitiría a Rusia afianzarse como un líder en la lucha contra el terrorismo en toda la región y en el mundo, dando un salto de influencia a nivel internacional, a la vez que permitiría a Turquía erigirse en el socio fundamental de los rusos en la zona para completar dicha estrategia, ofreciéndoles la excusa perfecta para justificar sus intervenciones militares en los países circundantes.
Esto explicaría que algunas fuentes occidentales se movieran rápidamente para “demostrar” la culpabilidad de Fatah Al-Sham, con el objetivo de cortocircuitar lo más rápidamente posible la maniobra turco-rusa centrada en culpar a F.E.T.O., con las consecuencias que ello tendría en el plano de la diplomacia internacional y en el futuro geoestratégico de ambas potencias.
Sin embargo, los medios de propaganda rusos, podrían contratacar aduciendo que Fatah Al-Sham es una tapadera occidental, usada para encubrir a los responsables de la acción, que podrían ser los propios norteamericanos, o Gülen. Y puesto que ya se han demostrado los vínculos de apoyo de EEUU e Israel a Al-Nusra en la guerra de Siria con anterioridad, esta guerra de propaganda la ganaría rusia de calle, que tendría de nuevo, todas las cartas para salirse con la suya y arrancar a Turquía de los brazos de la OTAN.
Y en todo caso, si se culpara a Fatah al-Sham finalmente, también podrían acusar de todo a EEUU e Israel…en todo caso, Rusia llevaría la ventaja, básicamente, porque llevaría la iniciativa desde el primer momento, al haber organizado el ataque.
Además ¿quién se creería que la madre Rusia ha matado a su propio embajador?
Y esto sí que explicaría la baja protección del embajador ruso …
Evidentemente, hay más opciones, como pensar que nacionalistas turcos han atentado contra el embajador ruso para dañar las relaciones turco-rusas (con o sin apoyo de occidente para ello) y probablemente, habrá más opciones que los lectores serán capaces de desarrollar por sí mismos o incluso compartir en el valioso espacio de comentarios, que tanta información aporta. Súmenle a ello, el atentado en Berlin, que podría estar relacionado o no con este atentado en Ankara.
Si estuviera relacionado, entonces podría ejercer una función de distracción; si aceptáramos esta posibilidad, todo apuntaría más claramente a la autoría del eje occidental en ambos atentados. Entonces, el eje occidental, estaría usando el atentado de Berlin para ocultar su intervención en el asesinato del embajador.
Deberemos pues, seguir con atención la evolución de los acontecimientos, para intentar deducir qué se oculta tras esta sucesión de hechos tan extraños y tan cargados de contradicciones e incoherencias …
(Fuente: https://elrobotpescador.com/)
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