La creatividad rusa en la “gran guerra mundial” en Siria
16.01.2017
En
primer lugar tenemos que aceptar que Rusia a día de hoy está
encabezando una alianza, que se compone de países y fuerzas que están
combatiendo al terrorismo en Siria. Adopté el nombre de “eje de valores”
para esta alianza en un artículo previo, porque el factor común en esta
alianza no es la religión, culto, o ideología común sino los valores.
Se ha vuelto claro para todos los países y fuerzas en este “eje de
valores” que, la actual batalla en Siria es una guerra global encabezada
por los EEUU, y muchos países europeos y regionales están participando
en ella, pero todos ellos se alejaron de los valores de libertad,
democracia, derechos humanos y soberanía estatal garantizada por el
Derecho Internacional. Todos esos valores se volvieron víctimas en la
“gran guerra mundial” de Siria como resultado del comportamiento de una
alianza que afirma que sostiene esos valores pero practica algo que no
tiene ninguna relación con dichos valores. Cuando hablamos sobre países
en la alianza encabezada por los EEUU, no nos referimos a la gente que
vive en esos países, sino a los gobiernos que representan las élites
gobernantes en esos países.
He usado el término “gran guerra mundial”,
“citando al escritor Michael Awad” para la precisión de este término en
la descripción de la guerra siria, que es una guerra global en todos los
significados y tendencias, más global que la primera y segunda guerras
mundiales, tanto en términos de periodo como en términos de
participación de grandes potencias en esta guerra, o en términos de
equipamiento usado y en términos de calidad y número de los
participantes en esta guerra, y finalmente en términos de afectación al
futuro de todo el mundo, el impacto de los efectos no puede ser ignorado
ni a nivel regional ni internacional.
Cuando hablamos sobre la creatividad rusa, no
olvidamos la inmensa creatividad mostrada por el presidente Bashar
al-Assad y su gran paciencia para que el mundo pueda ver realmente la
verdad en Siria, esto es, que el gobierno sirio está luchando contra
terroristas y no contra revolucionarios. Tampoco olvidamos la actitud
leal y creativa de Sayyed Hassan Nasrallah, líder de la resistencia
islámica en Líbano, e Irán por la velocidad de toma de decisiones y
comprensión de la realidad en la guerra siria mediante la posición
anunciada por Sayyed Hassan Nasrallah, el cual declaró que estos
terroristas son más peligrosos que el mismo Israel, y que son sus
herramientas en la región.
Cuando hablamos sobre creatividad rusa,
necesitamos recordar la situación internacional y la posición de la
opinión pública mundial a través del control de los medios de
comunicación occidentales, que puede resumirse en que Europa, los
Estados Unidos y sus aliados, estaban representando el bando
pro-democrático, de las libertades y derechos humanos, que se oponen a
las dictaduras y represiones en todas sus formas, y por tanto estaban
apoyando las revoluciones de color como una especie de revolución, que
apunta a conseguir libertad y deshacerse de regímenes autoritarios, por
supuesto, antes de que esta cosa se descubriera y las revoluciones de
color claramente fueran herramientas de los Estados Unidos y sus aliados
para alcanzar intereses geopolíticos.
La creatividad rusa empezó en estas dificultosas
circunstancias a través de la participación relativamente rápida en la
guerra contra el terrorismo en Siria. La situación de Rusia es diferente
respecto a la situación de otros aliados regionales de Siria, quienes
sabían que la guerra siria es una guerra contra la existencia y las
decisiones de sus países, que estaban previamente en la lista de
terroristas para EEUU. La visión rusa pudo ver el futuro correctamente y
supo que la guerra en Siria es un escenario de la gran guerra mundial
que acaece para controlar todo el mundo, porque este control del mundo
es lo único que está en medio del camino para que los EEUU y sus aliados
mantengan su superioridad, y quizá su existencia en la forma presente.
Tal visión rusa está representada por las reglas y fundamentos
geopolíticos del filósofo y pensador Alexander Dugin.
La creatividad rusa para arreglárselas con la
guerra siria fue clara en el comportamiento diplomático del liderazgo
ruso a través de la adopción, paso por paso, de la estrategia para
cambiar los conceptos que eran prevalecientes a principios de la guerra
siria, mediante la política de arrastrar a las partes internacionales y
regionales a nuevas localizaciones, así como a la adopción de nuevos
conceptos consagrados en Derecho internacional, y al mismo nivel, a
través, a través de la explotación del tiempo para enfocarse en la
manipulación occidental sobre el concepto de terrorismo. Además de eso,
la política rusa fue capaz de demostrar el hecho de que los milicianos
en Siria son terroristas extremistas que transmiten el wahabismo, y que
no sostienen ningún valor humano o alguna regla fundamental del Derecho
internacional.
Los observadores pueden ver fácilmente los cambios
en la terminología sobre la crisis siria. Los rusos se enfocan en la
separación de la “oposición moderada” respecto a los terroristas.
Confío en que los rusos saben muy bien que no hay
oposición moderada entre los milicianos que asesinan inocentes en Siria.
Ellos llevaron a la comunidad internacional al hecho de que los Estados
Unidos y sus aliados no tienen influencia en esa “oposición moderada”, o
que no están dispuestos a separarlos del Frente Al-Nusra, por supuesto,
para la implementación de estos en el proyecto de Siria y en la región.
En cualquier caso, los conceptos empezaron a cambiar, y se volvió claro
que la guerra dirigida por EEUU contra el terrorismo, no es real, y que
Rusia está detrás de la batalla global real contra el terrorismo. Por
tanto, Rusia triunfó con sus aliados en la mayor y más compleja batalla
en la historia moderna en Alepo. Uno de los resultados de esta batalla
en Alepo es la separación de la denominada “facción moderada” de los
terroristas, la situación ahora en Siria muestra que la mayor parte de
las áreas inutilizadas en Siria están bajo grupos terroristas (Al-Raqqa y
Palmira con daesh, e Idlib con el frente Al-Nusra), y nadie puede
reivindicar y defender a la oposición moderada o los rebeldes cuando el
ejército sirio y sus aliados terminen con la presencia terrorista en
aquellas áreas.
Mediante la paciencia y creatividad rusa en la
política del paso a paso, y por supuesto, mediante la paciencia de los
aliados sobre el terreno, tras derramar tanta sangre, cambió mucha de la
terminología. Nos movimos del concepto de gobierno transicional
(primera conferencia de Ginebra) a la elección por el pueblo sirio de
sus líderes (en la resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU), y
como vemos ahora, en la reciente conferencia de ministros de exteriores
y de defensa de Rusia, Irán y Turquía, nos movemos hacia un nuevo
concepto que no solamente preserva la unidad de la tierra siria bajo el
liderazgo de Al-Assad, sino que también marca el inicio de una alianza
para combatir al daesh y al frente Al-Nusra, que hasta el final de la
batalla de Alepo, estuvo respaldada por los Estados Unidos y todos los
aliados regionales.
La vez siguiente estará llena de sorpresas
agradables para Rusia y para la alianza de la resistencia. El “eje de
valores” traza en Siria un nuevo mapa para todo el mundo. Rusia está
encabezando la guerra global contra el terrorismo y se sacrifica por los
valores, encontraremos un eco entre los pueblos de todo el mundo que
sostienen la posición rusa y buscan aproximarse a Rusia. Vemos algunos
efectos de ello: Pueblos occidentales que empezaron a saber cuán mala
situación les han creado sus gobiernos. Junto a esto, comenzaron los
vientos de cambio en los Estados Unidos y en Francia, y veremos efectos
similares en otros países europeos que fueron los principales
responsables del comienzo de la guerra en Siria.
La victoria en la batalla de Alepo significa una
victoria en la “gran guerra mundial” en Siria, y esta gran victoria
tendrá efectos importantes en la situación geopolítica internacional.
Rusia inevitablemente será el jugador internacional más grande que
dibuje las líneas de esta nueva situación. La Siria victoriosa estará
bajo el liderazgo del presidente Bashar al-Assad, un importante jugador
regional que practica el papel que se merece, por la historia y por la
grandeza de los sacrificios hechos por el pueblo sirio y sus aliados, y
por la grandeza de la sangre de los mártires.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario