Caracas.- Extender el período constitucional y ratificar automáticamente al tren ministerial, si el presidente Hugo Chávez es incapaz de asumir la Presidencia el 10 de enero, sería una aberración afirmó el politólogo José Vicente Carrasquero.
"La decisión de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) pueda decretar la prolongación del mandato presidencial, es sencillamente absurda", precisó a Notimex el catedrático de la Universidad Central de Venezuela (UCV).
Carrasquero destacó que la continuidad administrativa que argumentan sectores del oficialismo no tiene sentido porque no se puede romper con el conducto del período constitucional, que empieza este 10 de enero y termina la misma fecha seis años después.
"Suceda lo que suceda con la salud del jefe de Estado, es el presidente de la Asamblea Nacional (Congreso Unicameral) y no el vicepresidente ejecutivo el que debe tomar el cargo si Hugo Chávez no se presenta a la cita constitucional", aseveró el politólogo.
Enfatizó que si el 10 de enero Hugo Chávez no se presenta, se debe dar cumplimiento a lo establecido en el artículo 231 de la Constitución Nacional, que establece los mecanismos que deben activarse en caso de esta ausencia.
Consideró que la situación del presidente Chávez no se puede seguir disfrazando con un ropaje de normalidad, pues se encuentra delicado de salud y lo que sucede es que se desconoce si puede regresar de Cuba para el 10 de enero.
De acuerdo con la visión del analista, una vez que el máximo representante de la Asamblea Nacional asuma el papel que le otorga la Carta Magna, entonces es cuando se tiene que designar una junta médica.
"Esta junta debe determinar si el presidente electo estará en condiciones de asumir eventualmente su cargo, y bajo estas condiciones es como está prevista la posibilidad de que pueda hacerlo posterior al 10 de enero", resaltó Carrasquero.
"Ahora bien, bajo esta medida se le daría al presidente 90 días como si fuese una falta temporal. Eso es lo que debería analizar el TSJ y no elucubrar sobre la fecha del 10 de enero, ya que ese no es el problema."
Advirtió que lo que no debe pasar es que se empiece a jugar con la enfermedad del presidente para ir estirando una situación "que probablemente traería inestabilidad política en el país con consecuencias económicas graves".