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• actualizado a las 11:46 AM
Asesino de Florida estaba quemando $10 mil antes de morir
El hombre que mató a seis vecinos antes de ser abatido el sábado a manos de la policía tras un tiroteo en un edificio residencial en Miami, era un ciudadano cubano de 42 años que estaba intentando quemar 10 mil dólares en su apartamento, confirmó la policía.
"Seguimos investigando los motivos de este
crimen, pero podemos confirmar que la identidad del agresor es Pedro
Vargas, de 42 años", dijo este domingo el portavoz de la policía de Hialeah, Carl Zogby.
"Él estaba quemando dinero en el apartamento, pero se desconocen las razones de esta situación irracional", agregó el oficial.
Otras fuentes de la policía citada por la prensa local, indicaron que "Vargas
estaba quemando dinero, no se sabe cuánto exactamente pero era parte de
unos 10.000 dólares que había retirado recientemente de una cuenta de
ahorros".
La policía de Hialeah,
ciudad latina al noroeste de Miami, divulgó las identidades de las seis
víctimas que murieron en la masacre ocurrida entre el viernes en la
tarde y el sábado de madrugada entre los que figuraron los
administradores del edficio: Italo Pisciotti, de 79 años y Samira
Pisciotti, de 69, una pareja colombiana.
También murió el ecuatoriano Carlos Gavilanes, de 33 años, alcanzado por un disparo de Vargas cuando llegaba a su apartamento en la calle de enfrente, junto a su hijo de nueve años, que resultó ileso.
En el edificio del complejo que alberga unas 90
familias, Vargas se metió a otro apartamento donde disparó contra
Patricio Simono, de 65 años, Merly Niebles, de 51 y a la hija de esta
pareja de 17 años que estaba escondida en la bañera.
De acuerdo al recuento de la policía, en el apartamento
de Vargas, que vivía con su madre de 83 años, se empezó a ver humo y los
Pisciotti acudieron a la unidad para ver qué pasaba.
Algunos vecinos escucharon que la madre les pidió a
gritos que sacaran a su hijo del apartamento. Vargas se negaba a abrir
la puerta y empezó a disparar cuando los administradores del edificio
insistieron en llamar a los bomberos y a la policía.
Vargas, que llegó a Estados Unidos en 1997 y obtuvo la ciudadanía en 2004, compró su arma de forma legal y contaba con una licencia en regla para portar armas.
Por el momento se desconoce el tipo de pistola que empleó en su tiroteo.
La policía de Hialeah intentó durante más de ocho horas
que Vargas se rindiera cuando se atrincheró en un apartamento donde
mantuvo como rehenes a otra pareja de vecinos que salieron ilesos cuando
los oficiales le dispararon mortalmente al agresor la madrugada del
sábado.
Florida cuenta con las leyes más permisivas para el
porte de armas en el país, y en 2012 se convirtió en el Estado con más
personas armadas en Estados Unidos.
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