viernes, 8 de agosto de 2014

Los republicanos critican la “falta de estrategia” de Obama ante el avance extremista en Irak

Los republicanos critican la “falta de estrategia” de Obama ante el avance extremista en Irak

La oposición apoya la autorización de ataques contra el Ejército Islámico pero acusa al presidente de haber subestimado la amenaza yihadista


El presidente de EE UU informa al rey de Jordania de la situación en Irak / AP


No parece que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, vaya a tener problemas en el Congreso por su decisión de autorizar ataques limitados para frenar el avance extremista en Irak. Pero más allá del apoyo de demócratas y republicanos a las acciones puntuales anunciadas la noche del jueves, la oposición conservadora no ha tardado en criticar lo que considera una “falta de estrategia” más amplia del mandatario ante una amenaza yihadista que según sostiene hacía tiempo se veía venir.
“La autorización del presidente a realizar ataques aéreos es apropiada, pero como muchos estadounidenses, me siento consternado por la continuada ausencia de una estrategia para contrarrestar la grave amenaza que el Ejército Islámico (EI) supone para la región”, dijo este viernes el líder republicano en el Congreso, John Boehner, poco después de que el Pentágono confirmara el inicio de los bombardeos aéreos contra posiciones yihadistas en Erbil.
Según el presidente de la Cámara de Representantes, la Casa Blanca “desoyó” las advertencias que de forma insistente le llegaron tanto de líderes iraquíes como del Congreso en Washington “y hasta de miembros de su propia administración”. Ya en junio, cuando Obama anunció el envío de los 300 primeros asesores militares en Irak, Boehner había acusado al presidente quedarse de brazos cruzados “pese a que llevamos un año viendo cómo se deteriora la situación" en el país.
“El presidente necesita una estrategia a largo plazo -una que defina el éxito como el cumplimiento de nuestra misión, no el de promesas políticas- y tiene que construir el apoyo necesario para mantenerla”, insistió este viernes Boehner, quien prometió su respaldo si Obama presenta un plan en este sentido.
Una postura compartida por los senadores republicanos John McCain y Lindsey Graham, dos de las voces más autorizadas sobre política exterior en la cámara alta estadounidense. Según dejaron claro en un comunicado conjunto emitido después del anuncio de Obama, las acciones ordenadas por el presidente “están lejos de ser suficientes para contrarrestar la creciente amenaza que supone el EI”.
“Necesitamos una visión estratégica, no sólo una humanitaria”, subrayaron los veteranos senadores, quienes urgieron a hacer más y de manera urgente.
“Una política de contención no funcionará contra el EI”, sostuvieron. El grupo yihadista suní “es inherentemente expansionista” y por eso “hay que pararlo”.
“Cuanto más esperemos, peor va a ser esta amenaza. Necesitamos ir más allá de una política de medias medidas”, urgieron.
Pero ahí radica el principal problema de Obama, un presidente que llegó a la Casa Blanca prometiendo, entre otros, que acabaría las guerras de Afganistán e Irak que tanto han cansado a la población estadounidense. “Soy consciente de cuántos [estadounidenses] se sienten preocupados por una acción militar en Irak, incluso ataques limitados como éstos”, reconoció el presidente durante su declaración desde la Casa Blanca la noche del jueves. Y reiteró su promesa de que no permitirá que el país se meta en una nueva guerra en la región.
“Como comandante en jefe, no permitiré que Estados Unidos se vea arrastrado a luchar otra guerra en Irak (…) las tropas de combate estadounidenses no van a volver a combatir en Irak, porque no hay una solución militar estadounidense en esta crisis”, recalcó.
La pregunta que ni la oposición se atreve por el momento a responder es hasta dónde exactamente debería llegar Obama en Irak, más allá de reclamar una “revisión” de la política hacia la región.
“Si ha habido un momento donde se necesita revisar nuestra desastrosa política en Oriente Medio es éste”, afirmaron los senadores. “Debido a la estrategia de mantenerse alejado del presidente, las amenazas en la región han crecido y ahora amenazan directamente a EE UU”, advirtieron.
En la mente de muchos republicanos está la confusa estrategia de Obama en Siria -punto de origen de los yihadistas que ahora amenazan Irak- y su falta de decisión para cumplir su amenaza de una intervención militar contra el régimen de Bachar al Assad.
En esta ocasión, Obama “tiene que mantener esta lucha”, reclamó este viernes la congresista republicana Ileana Ros-Lehtinen, presidenta del Subcomité de Relaciones Exteriores para Oriente Medio de la Cámara de Represnetantes. “Tenemos que concluir esto, EI es una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos”.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario