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Buque de EEUU ataca al EIIL desde el Mediterráneo

 

 

 

HispanTV

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Un buque de guerra de Estados Unidos ataca supuestos objetivos del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) desde el mar Mediterráneo.

En un comunicado, la Marina de EE.UU. ha anunciado este martes que el ataque se ha realizado desde el portaaviones George H.W. Bush en la parte oriental del Mediterráneo.
“Estamos retomando una búsqueda implacable de los objetivos del EIIL, al tiempo que reforzamos nuestro compromiso con los socios y aliados en el área de operaciones de la Sexta Flota de EE.UU.”, asegura el comandante del grupo de ataque, el contraalmirante Kenneth Whitesell.
Según la nota de la Marina estadounidense, el grupo de ataque, que entró el lunes en el Mediterráneo, ha reanudado misiones en apoyo a la operación Inherent Resolve de la llamada coalición anti-EIIL, liderada por EE.UU., en Siria e Irak.
Además del portaaviones USS George H.W. Bush (CVN-77), el grupo de ataque está compuesto por la Octava Ala Aérea Embarcada de EE.UU. (CVW-8), el destructor Squadron 22, los cruceros de misiles guiados Philippine Sea y Hue City, y los destructores de misiles guiados Laboon y Truxtun, se lee en el texto.

Estamos retomando una búsqueda implacable de los objetivos del EIIL, al tiempo que reforzamos nuestro compromiso con los socios y aliados en el área de operaciones de la Sexta Flota de EE.UU.”, asegura el comandante del grupo de ataque de EE.UU., el contraalmirante Kenneth Whitesell.

EE.UU., a la cabeza de la llamada coalición anti-EIIL, inició en agosto de 2014 el bombardeo de varias regiones de Irak, y amplió el 23 de septiembre de ese mismo año su campaña a Siria —sin el permiso de Damasco— en el marco de una alianza en la que participan varios de sus aliados regionales y occidentales.
Tanto el Gobierno de Irak como el de Siria cuestionan la efectividad de dichos bombardeos y critican a esa coalición por los daños estructurales y las muchas víctimas civiles que ha dejado.
En abril la coalición comunicó que, en los dos años de su campaña aérea, había matado a un total de 396 civiles en Siria e Irak, aunque en el mismo mes informes independientes de otros organismos, como el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), cifraron en 1256 el número de víctimas colaterales provocadas por EE.UU. y sus aliados.
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