Hoy asumió Claudia Sheinbaum la Jefatura de
Gobierno de la Ciudad de México y Andrés Manuel López Obrador, como
presidente de México, acudió a la ceremonia de investidura de quien ya
está comandando una de las urbes más grandes del mundo.
El jefe del Ejecutivo dijo que Sheinbaum lo superará en el trabajo que él hizo al frente del gobierno capitalino.
Por lo menos en lo que se refiere al turismo no será difícil, pues López Obrador canceló la promoción turística de la ciudad, no participó en los convenios cooperativos del Consejo de Promoción Turística y destinó la totalidad del impuesto al hospedaje a la policía turística y al programa De Fiesta en el DF.
Sheinbaum tampoco hizo alusión al turismo y uno de sus grandes anuncios fue la desaparición del cuerpo de granaderos, gesto que hace énfasis en el hecho de que las Fuerzas Armadas no actuarán de forma represiva contra la ciudadanía como sucedió en el detestable 2 de octubre de 1968.
También dijo que su gobierno será austero y que a partir del primero de enero se reducirán mil 712 plazas del gobierno central, lo que generará un ahorro de mil 800 millones de pesos.
Más allá de su discurso, sin duda fue una buena decisión que designara a Carlos Mackinlay como titular de la Secretaría de Turismo, pues se trata de un personaje que conoce a fondo los temas turísticos, quien realmente es una persona austera y de izquierda y, además, actúa de buena voluntad y tiene planes importantes para el desarrollo turístico de la capital.
Dicho lo anterior hay que señalar también que algunas de esas mil 712 plazas que se cancelarán, como anunció Sheinbaum, provendrán del regreso al modelo con el que funcionaban la Sectur de la CDMX y su Fondo Mixto.
En una situación muy desafortunada, el Fondo cobró vida propia cuando Miguel Mancera nombró a Miguel Torruco, actual titular de Turismo federal, como secretario de Turismo de la CDMX, pero puso en el fondo a Armando
López Cárdenas, un experto en administración pública, quien consiguió cambios para darle un presupuesto sin precedente a este organismo.
Ahora está llegando al Fondo Mixto Sara Paola Galico Félix Díaz, quien militó en el PRI-Partido Verde, se pasó a Morena y tiene una trayectoria en organizaciones vinculadas a temas del medio ambiente y de atención a personas vulnerables.
Estará sustituyendo a Irene Muñoz y, de hecho, ya inició el proceso de extinción de algunas plazas redundantes, como la dirección de Mercadotecnia y la de Relaciones Públicas, por lo que regresará el modelo en donde el Fondo era una institución alineada a las necesidades de la Secretaría de Turismo.
Mackinlay no sólo es un personaje honesto, sino que, además, tiene un interés real por impulsar el desarrollo de zonas deprimidas a través del turismo y de impulsar inversiones en nuevas latitudes de la capital, más allá del Centro Histórico y las colonias Roma, Condesa, Del Valle, San Ángel y Santa Fe.
El jefe del Ejecutivo dijo que Sheinbaum lo superará en el trabajo que él hizo al frente del gobierno capitalino.
Por lo menos en lo que se refiere al turismo no será difícil, pues López Obrador canceló la promoción turística de la ciudad, no participó en los convenios cooperativos del Consejo de Promoción Turística y destinó la totalidad del impuesto al hospedaje a la policía turística y al programa De Fiesta en el DF.
Sheinbaum tampoco hizo alusión al turismo y uno de sus grandes anuncios fue la desaparición del cuerpo de granaderos, gesto que hace énfasis en el hecho de que las Fuerzas Armadas no actuarán de forma represiva contra la ciudadanía como sucedió en el detestable 2 de octubre de 1968.
También dijo que su gobierno será austero y que a partir del primero de enero se reducirán mil 712 plazas del gobierno central, lo que generará un ahorro de mil 800 millones de pesos.
Más allá de su discurso, sin duda fue una buena decisión que designara a Carlos Mackinlay como titular de la Secretaría de Turismo, pues se trata de un personaje que conoce a fondo los temas turísticos, quien realmente es una persona austera y de izquierda y, además, actúa de buena voluntad y tiene planes importantes para el desarrollo turístico de la capital.
Dicho lo anterior hay que señalar también que algunas de esas mil 712 plazas que se cancelarán, como anunció Sheinbaum, provendrán del regreso al modelo con el que funcionaban la Sectur de la CDMX y su Fondo Mixto.
En una situación muy desafortunada, el Fondo cobró vida propia cuando Miguel Mancera nombró a Miguel Torruco, actual titular de Turismo federal, como secretario de Turismo de la CDMX, pero puso en el fondo a Armando
López Cárdenas, un experto en administración pública, quien consiguió cambios para darle un presupuesto sin precedente a este organismo.
Ahora está llegando al Fondo Mixto Sara Paola Galico Félix Díaz, quien militó en el PRI-Partido Verde, se pasó a Morena y tiene una trayectoria en organizaciones vinculadas a temas del medio ambiente y de atención a personas vulnerables.
Estará sustituyendo a Irene Muñoz y, de hecho, ya inició el proceso de extinción de algunas plazas redundantes, como la dirección de Mercadotecnia y la de Relaciones Públicas, por lo que regresará el modelo en donde el Fondo era una institución alineada a las necesidades de la Secretaría de Turismo.
Mackinlay no sólo es un personaje honesto, sino que, además, tiene un interés real por impulsar el desarrollo de zonas deprimidas a través del turismo y de impulsar inversiones en nuevas latitudes de la capital, más allá del Centro Histórico y las colonias Roma, Condesa, Del Valle, San Ángel y Santa Fe.
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