Megafraude en Michoacán

Megafraude en Michoacán Pablo Hiriart

Si les piden a ellos rendir cuentas, dicen que no, que es una venganza política. El gobierno de Leonel Godoy en Michoacán no resistió la auditoría que ordenó el Congreso del estado, que encontró anomalías por 39 mil 300 millones de pesos. Las irregularidades en el manejo de las finanzas durante el gobierno de Leonel Godoy son mayores que toda la deuda del estado de Coahuila. Y sin obra pública. Jorge Fernández Menéndez detalló ayer en “Razones”, que se publica en Excélsior, algunos datos relevantes sobre el resultado de la auditoría. Va una muestra: en la campaña presidencial el gobierno michoacano pidió un crédito por cinco mil millones de pesos, sin autorización del Congreso. ¿Dónde fue ese dinero? Una parte fue empleado para necesidades “temporales” de la Tesorería estatal. Mil millones de pesos se fueron a “pago de nómina”, gastos por comprobar, transferencia a escuelas, inversiones bancarias, fondos revolventes y gastos de operación. Y, del total, hay mil 347 millones de pesos que no se sabe en qué fueron empleados. Relata Jorge Fernández que, de acuerdo con la auditoría, el gobierno de Godoy contrató (enero del año pasado) créditos por cuatro mil 800 millones de pesos para refinanciar la deuda estatal de corto plazo. Ese dinero, sin embargo, no se fue a ese objetivo. De lo que hay registro (pues todo lo que se contrató con Banobras, mil 514 millones de pesos, no tiene destino documentado), los créditos se usaron para pago de nómina, inversiones bancarias, fondos revolventes, gastos por comprobar, servicios personales. Cero peso fue a inversión. Y miles de millones están sin documentar hacia dónde se fueron. Hay mucho más, de acuerdo con la auditoría del Congreso que publicó Jorge Fernández. Se trata de miles de millones de pesos que están en el limbo. Descuentos del ISR a los trabajadores del estado (998 millones de pesos en el último año de gobierno de Godoy) que no habrían sido entregados al fisco. Estamos, pues, ante un megafraude. El ex gobernador Godoy dijo, ante los resultados de la auditoría, que se trataba de una venganza política. Seguramente lo que menos quiere el nuevo gobernador, Vallejo, es jugar a las venganzas con su antecesor, dada la crisis política que han fabricado los normalistas y la CNTE de la entidad. Pero supongamos que la auditoría es revancha por algo. ¿Dónde está el dinero? ¿Dónde están las obras públicas en Michoacán que amparen la deuda del estado? ¿Pidieron dinero a la banca —miles de millones de pesos— para pagar la nómina? ¿Dónde están los miles de millones que no aparecen? ¿En qué se los gastaron? Qué vengativos son algunos.