Suicide Animal arroja luz sobre el comportamiento humano

  por Larry O'Hanlon

Un perro de Terranova. Un artículo de 1845 en un periódico de Londres describe el suicidio por ahogamiento de un perro similar.

La esencia

- Animales de todo tipo quitarse la vida.
- Suicidios animales pueden enseñarnos mucho acerca de los suicidios humanos.
- Durante siglos la gente les niega suicidios animales o los llevaron como prueba de apariencia humana intenciones.
Ya sea un perro que se aflige, un caballo deprimido o incluso una ballena varada misteriosamente en sí, hay una larga historia de animales que se comportan suicida, comportamiento que puede ayudar a explicar el suicidio humano, dice que la investigación recién publicada.
La idea de que los animales en realidad podría ser muy buenos modelos para el suicidio humana comenzó a echar raíces en el siglo 20, dijo Edmund Ramsden, uno de los autores del estudio publicado en el último número de la revista Endeavour, junto con Duncan Wilson, de la Universidad de Manchester.
"Se empieza a cuestionar la definición de suicidio. El cuerpo y la mente están tan dañados por el estrés y por lo tanto conduce a la autodestrucción. No es necesariamente ni siquiera una opción", dijo a Discovery News Ramsden.
"Llega a ser invertidos, en cierto sentido," dijo Ramsden. Animales y suicidios humano ya no se consideran como actos voluntarios, sino como respuesta a las condiciones.
Hay muchas historias de siglos atrás animales suicidas citas. En 1845, por ejemplo, el Illustrated London News informó de un "caso singular de suicidio" que implica un "perro fino, negro hermoso y valioso, de las especies de Terranova". El perro había estado actuando durante días menos animada que de costumbre, pero luego se vio "a lanzarse en el agua y tratar de hundir al preservar perfecta quietud de las piernas y los pies."
El perro fue rescatado y atado. Pero tan pronto como fue liberado entró en el agua otra vez y trató de hundir. Esto ocurrió varias veces hasta que por fin el perro pareció cansarse y "a fuerza de mantenimiento de la cabeza con determinación bajo el agua durante unos minutos, lograron por fin en la obtención de su objetivo, ya que cuando sacan esta vez él estaba muerto."
Estas anécdotas tienden a reflejar los valores de las sociedades a las que provienen, dijo Ramsden.
En el siglo 19, los suicidios animales fueron vistos a menudo como actos de abuso, la locura, el amor o la lealtad - Las mismas causas dadas para luego suicidios humanos. En épocas anteriores, estas cualidades no fueron asignados, pero los animales se han utilizado todavía para ayudar a definir el suicidio.
"Para (St.) San Agustín y Santo Tomás (Thomas) va en contra de la ley natural y por lo tanto va en contra de la ley de Dios", dijo a Discovery News Ramsden. Hicieron un llamamiento a la falta de suicidio en la naturaleza como prueba de que la gente no debe quitarse la vida.
Pero Tomás no podía estar más equivocado, dice el psicólogo Thomas Joiner de la Florida State University y autor de los recién publicado libro "Mitos del suicidio".
"Es increíble cómo en realidad es omnipresente en la naturaleza", dijo el carpintero. Los organismos de todo tipo, se sabe que la autodestrucción de un modo u otro, generalmente con el fin de proteger a sus parientes - y así salvar sus genes.
"Si se toma la declaración:" Mi muerte valdrá más que a mi vida ", que se desarrolla en todo tipo de organismos", dijo Joiner. "Ese cálculo es el mismo, ya que está escrito en los genes o en inglés."
Pulgón del guisante, por ejemplo, cuando se ven amenazados por una dama de error pueden explotar, la dispersión y la protección de sus hermanos e incluso a veces de matar al insecto de la señora. Son diminutos atacantes suicidas literalmente, Joiner dijo a Discovery News.
La gran diferencia es que en los humanos modernos que el cálculo puede salir mal. Hay algunos actos de suicidio que hacen salvar vidas. Pero la mayoría de los millones o suicidios tan humanos se benefician cada año en el mundo a nadie, Joiner explicó. Son actos que tal vez se utilizan para servir a un propósito en las primeras sociedades humanas, dijo, pero han perdido su función en el mundo moderno.
Lo que Terranova suicida nos decía, entonces, no es tanto que los animales y los seres humanos piensan igual, sino que es, como dijo Joiner "... una consecuencia fatal de la enfermedad de base biológica y de extrema gravedad".