Peña Nieto: es hora de investigar a Bours, a Horcasitas y a Gómez del Campo por la Guardería ABC

4/06/14. Que ni las autoridades pasadas o actuales -ni nadie- nos vengan con cuentos, mucho menos a los que sabemos de primera mano las dolorosas historias que sucedieron aquel lejano 5 de junio de 2009 en la Guardería ABC de Hermosillo, Sonora, estancia infantil bajo "supervisión" del IMSS.

Nadie olvidará aquella terrible fecha ocurrida hace 59 meses, ni aquel lugar donde hubo 49 muertos y más de 70 heridos –todos niños quemados vivos- en un incendio que vino de una bodega contigua, perteneciente al gobierno estatal.

Nadie ya nos va a quitar de la cabeza que el siniestro fue provocado por personas enviadas por el ex gobernador Eduardo Bours Castello y sus subordinados, para destruir documentos de un Fideicomiso. No se nos va a olvidar que dicha guardería no contaba con salidas de emergencia y que los dueños habrían mostrado fotografías de una “puerta” falsa pintada a una pared del inmueble. Con eso engañaron a la autoridad y pudieron conseguir -con complicidad- el funcionamiento de la misma, omitiendo que se encontraba a un costado de la referida bodega.

El informe oficial de la tragedia dice que "el predio donde funcionaba la guardería era compartido con una bodega de archivos del gobierno estatal, donde inició el fuego que se propagó a la estancia infantil en la que se encontraban 176 niños y 50 empleados. La falta de detectores de humo, extintores y salidas de emergencia, provocaron los fallecimientos de los infantes, la mayoría por asfixia...".

Es una TRAGEDIA con mayúsculas, que nadie debe olvidar y que no podríamos permitirnos repetir. Desde el principio todo estuvo mal. No hubo atención adecuada, ni pronta para las víctimas. Las autoridades en su momento responsables, se mantuvieron en sus cargos, sin ningún tipo de juicio penal o sanción administrativa.

Y aunque hubo graves violaciones a las garantías individuales de los menores y de sus padres, la Suprema Corte de "Justicia" de la Nación, impunemente exoneró a altos funcionarios. La justicia por parte del Estado Mexicano aún NO se ha impartido. La justicia social ya se logró: el repudio a esos hombres y mujeres que amparados en el tráfico de influencias y cobijados por el poder político en turno, se lograron escabullir -hasta este momento- de sus responsabilidades legales y morales.

Pero no basta. No es suficiente. Los funcionarios y políticos involucrados en su momento, siguen campantes, con todo su cinismo, gozando del poder que no sólo se mantuvo, si no que se incrementó desde la tragedia. Señores y señoras de la impunidad mexicana.

Dice uno de los que más sabe sobre el tema, Robles Maloof en su columna publicada en ‘Sin Embargo’, que Eduardo Bours, ex gobernador de Sonora, es ahora integrante del Consejo Político Nacional del PRI. Guillermo Padrés quien como candidato de oposición a la gubernatura, debe su victoria al enojo ciudadano contra el PRI por el incendio de 2009, sigue gobernando sin cumplir su palabra de encontrar a los culpables. El entonces director del IMSS Juan Molinar Horcasitas cuya firma consta en el contrato de la guardería, ascendió a la cúpula directiva de su partido y en el sexenio que corre condujo el finado Pacto por México. 

Daniel Karam, posterior director del IMSS, recibió el premio al “Mérito Nacional” que otorga una asociación relacionada con el ITAM. Abel Murrieta ex procurador estatal, es actualmente diputado local y se prepara para ocupar una de las generosas listas del PRI. Ernesto "El Borrego" Gándara, ex alcalde de Hermosillo y responsable de la protección civil en la capital sonorense en el tiempo del incendio, obtuvo un escaño en el Senado y al parecer disputará con Claudia Pavlovich, entonces diputada local,  ahora senadora. 

Carla Rochín, ex coordinadora nacional de las guarderías subrogadas del IMSS, es ahora presidenta del consejo directivo de Guanajuato Patrimonio de la Humanidad A.C. La lista la cierra, indica Robles Maloof, Eduardo Medina Mora procurador general en tiempos panistas, premiado por el priista Enrique Peña Nieto, con la embajada en el Reino Unido, la segunda más importante en el servicio exterior.

¿Qué carajo les importa? 19 funcionarios en total, exonerados, que se sienten absolutamente seguros de que nadie les hará nada. Pero a nosotros sí nos importa, pues todos los testimonios y evidencias existentes nos indican que la versión oficial sobre los hechos es difícil de sostener.

En 2009, la Procuraduría General de la República (PGR) concluyó que el incendio fue generado por el sobrecalentamiento de un "cooler" (enfriador de aire) de la bodega contigua a la guardería, que rentaba la Secretaría de Hacienda del Estado.

Sin embargo, declaraciones ministeriales levantadas el 12 de junio de ese año, contradicen esta versión. Cuatro funcionarios de la Secretaría de Hacienda estatal que acudieron a la bodega el día de la tragedia y el guardia de seguridad privada coincidieron en que los switch de la energía eléctrica se bajaron cuando los funcionarios abandonaron el lugar, alrededor de las 14:40 horas, por tanto, los "coolers" no podrían haberse sobrecalentado, pues no eran alimentados por la corriente eléctrica. Sin embargo, el incendio comenzó alrededor de las 15:00 horas.

En 2013, la PGR, a través del entonces subprocurador Renato Sales Heredía, informó que reabriría la investigación para indagar si el incendio de la bodega fue provocado para destruir documentos sobre el fideicomiso Sonora Proyecta que contenían cifras que rondan los 10 mil millones de pesos, como asegura el Movimiento Manos Unidas por Nuestros Niños. ¡Ese fue el verdadero motivo del incendio!

¿Pero sabe usted por qué no se investigó? Le voy a contar. Se afirma, y así lo pienso yo también, que esta cínica impunidad a favor de Bours, Molinar y otros, se debió a que dentro de los muchos involucrados en la tragedia, se encuentra Marcia Matilde Altagracia Gómez del Campo, tía de la ex primera dama Margarita Zavala y también pariente de la ex dirigente del PAN en el DF, y actual Senadora, Mariana Gómez del Campo.

La impunidad inició desde la primera declaración oficial sobre la tragedia, que se dio 25 días después de los hechos y fuera del país (en Panamá), Felipe Calderón mintió: “habrá justicia, caiga quién caiga y tope donde tope”. Calderón es un cínico y un cobarde que encubrió a la prima de su mujer, y no lo digo yo, lo dice una de las madres de la Guardería ABC (VERVIDEO).

El 24 de Octubre de 2011, un sonriente Felipe Calderón Hinojosa, firmó la llamada "Ley 5 de Junio", cuyo verdadero nombre es Ley General de Prestación de Servicios para la Atención, Cuidado y Desarrollo Integral e Infantil. No la firmó por que quiso, o por que tuviera la suficiente voluntad de hacerlo. La firmó por que no le quedaba de otra, ante la fuerte presión de un pequeño grupo de ciudadanos, afectados por la tragedia y por un puñado de activistas que lucharon hombro con hombro con los padres y familiares de los niños fallecidos.

Calderón, cínicamente dijo: "hace poco más de 2 años, los mexicanos vivimos una de las más terribles tragedias con los lamentables sucesos ocurridos en la Guardería ABC de Hermosillo, Sonora, todo México se unió a la pena de los padres y las madres de familia que vivieron el dolor más profundo que se puede tener, como es el de perder a un hijo".

Hizo un breve reconocimiento a los que "desde la sociedad" impulsaron esta ley. Pero le faltó agregar el elemento de justicia, para que el cuadro estuviera completo. No habló de culpables, entre ellos, una prima de su esposa, quién era dueña de la Guardería ABC. Se colgó pues, una “medallita” que no le correspondía.

Pero lo importante de esta acción es el trabajo que con mucho empeño y sacrificio llevaron adelante Daniel Gershenson, Jesús Robles Maloof y otros cuantos, de la mano de Julio César Márquez, padre de "Yeye", uno de los niños fallecidos aquel fatídico suceso.

Sin embargo, otra vez regresamos al duro suelo de la realidad, cuando nos damos cuenta que ya llevamos 4 años con una ley de guarderías que todavía no opera, que sólo está impresa en papel. La mayoría de los estados no han armonizado su legislación y los que avanzaron no han creado el reglamento ni el Consejo para el funcionamiento de los centros de atención infantil.

Hoy es momento de que el actual presidente Enrique Peña Nieto, en un acto de verdadera justicia, ordene el cierre de las casi mil 400 guarderías subrogadas del IMSS que fueron adjudicadas sin ningún concurso público. Hoy es tiempo de que al mandatario nacional mexicano no le tiemble la mano y encarcele a todos los involucrados, comenzando por Bours, siguiendo por Horcasitas y finalizando con Gómez del Campo. Los “peces gordos” pues.

Si a los dos primeros, la Suprema Corte ya los exoneró de su responsabilidad en la tragedia de la Guardería ABC, es tiempo de acusarlos por la destrucción de documentos públicos (a Bours), y por las irregularidades cuando estuvo al frente del IMSS (a Horcasitas).

Peña Nieto no le debe nada a Felipe Calderón. El calderonismo hoy está derrotado y debe pagar sus culpas y las consecuencias de sus actos. Los calderonistas están tan mermados, que ya no le sirven al presidente ni para pasar sus reformas en el Congreso de la Unión. Presidente, es momento de hacer justicia. 

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