Jóvenes desaparecidos en Puebla fueron descuartizados y calcinados; empresario poblano autor intelectual
Por: Emma Martínez / 20 febrero, 2016
(20 de febrero, 2016. Revolución TRESPUNTOCERO).- Esta semana, Revolución TRESPUNTOCERO dio
a conocer el caso de seis jóvenes que comenzaron a desaparecer, a
partir de octubre pasado, en Lomas de San Miguel, Puebla. Cuya conexión
entre sí, es que las víctimas vivían en la misma cuadra o trabajaban en
la zona y se conocían entre sí. Ellos eran Marco Antonio Cuautle,
Rogelio Rivera Osorio, Luis Ángel Flores, Román Limón Gómez, Pedro
Negrete Orea y Brayan Gerardo Torres Sandoval.
Este
fin de semana la Fiscalía General del Estado de Puebla informó que en
relación con diversas averiguaciones previas en las que se denunció la
desaparición de estas seis personas, se logró el esclarecimiento de los
hechos en los que se determinó que fueron privadas de su libertad,
dentro de un inmueble ubicado en la ciudad de Puebla.
“Se
les avisó a los familiares de los desaparecidos que ya tenían detenidos
a los presuntos responsables, las autoridades también les informaron
que los cuerpos de los seis jóvenes habían sido incinerados. Los cuerpos
fueron encontrados en Tlaxcala y el autor intelectual fue el promotor
de la feria de Puebla, el empresario Jorge Aduna y están involucrados
dos policías ministeriales de la Fiscalía de Secuestros y Delitos de
Alto Impacto (Fisdai)”, da a conocer a Revolución TRESPUNTOCERO el
abogado Jorge Sosa Pérez, quien dio acompañamiento al caso y a los
familiares de los desaparecidos.
La
Fiscalía solamente determinó que algunos de los
desaparecidos participaron en un robo a casa habitación con violencia,
el cual no fue denunciado, por los familiares de Jorge Aduna
Villavicencio. Quien prefirió, a través de personal a su servicio
(escoltas), entre ellos un ex policía ministerial, y con el apoyo de
otras personas más, localizar a los jóvenes.
Los
ahora detenidos son, Antonio Cantú García, de 60 años, originario de
Matamoros, Tamaulipas, quien engañó a las víctimas para privarlas de la
libertad; Yosafhat Berlanga Flores, de 33 años, quien dijo ser ex
elemento de la Agencia Federal de Investigación, AFI; Ricardo López
Meza, de 46 años, quien en 2014 fue dado de baja de la Policía
Ministerial por no aprobar el examen de Control de Confianza; Alejandro
Páez Valenzuela y José Emanuel Limón Meneses, de 20 años.
Ellos
ubicaron a los seis desaparecidos, además de participar en su
secuestro. Luego de trasladar a las víctimas al inmueble mencionado,
ubicado en la colonia San José El Conde, Puebla, fueron asesinados, para
después calcinar los cuerpos, con el objeto que no pudieran ser
localizados. Las autoridades llevaron al lugar de los hechos a las
familias, a quienes les presentaron prendas y objetos, que ellos
reconocieron pertenecían a las víctimas.
Según la información de la Fiscalía, otorgada a la prensa, las desapariciones sucedieron de la siguiente manera:
El
19 de octubre de 2015, Marco Antonio Cuautle Cuautle, de ocupación
lechero, quien iba a bordo de su camioneta Chevrolet Silverado con
placas del Estado de Puebla, fue levantadoy
no se volvió a saber de su paradero; el 28 de octubre, Román Limón
Gómez, viajaba en un vehículo, en compañía de su esposa y su menor hija,
cuando fue interceptado por unos sujetos que iban en dos camionetas,
con vidrios polarizados, en este caso se exigió a las autoridades
analizaran los videos de las cámaras de seguridad de la vía pública.
El
12 de noviembre, Pedro Negrete Orea y Luis Ángel Flores Gutiérrez, de
manera simultánea, ellos fueron privados de la libertad, con base en
engañados de ofertas de trabajo; varios días después, el 26 de
noviembre, Rogelio Rivera Osorio, fue engañado por un hombre que portaba
en ese momento un sombrero, él le ofreció trabajo, y hoy es uno de los
detenidos. El último de los desaparecidos fue Bryan Gerardo Torres
Sandoval, el 27 de noviembre, a quien bajo la mentira que querían
comprarle cocaína, una persona se acercó a él y lo privó de la libertad.
Según
información otorgada a Revolución TRESPUNTOCERO, por parte de un
funcionario de la Fiscalía, quien prefiere mantenerse en el anonimato,
los jóvenes fueron descuartizados antes de ser calcinados.
En
tanto que al realizar un cateo en la casa de Jorge Aduna, se encontró
la camioneta Silverado, que pertenecía a Marco Antonio, además de botes
lecheros. “Se encontraron los tambos metálicos utilizados para la
incineración de los cuerpos con fragmentos óseos en su interior,
fragmentos óseos carbonizados y de hebillas calcinadas en una coladera
en la que vertieron el contenido de los tambos.
Estaban
buscando difuminar todas las cenizas a manera que no hubiera indicio o
relación de las muertes con este empresario y sus trabajadores,
posiblemente también fueron torturados, antes de asesinarlos, o los
mataron con base en tortura. Ya que encontraron un hacha, machete,
cuchillos todos éstos con rastros de sangre”.
Ahí
mismo también se localizó una bitácora de actividades, donde se
registró y detalló la vigilancia de las víctimas, así como armas y
cartuchos. Por el momento también permanecen detenidos, el empresario
Jorge Aduna Villavicencio y los agentes ministeriales Javier Cruz
Ventura y José Felipe Riveros Hernández, ya que se asegura que éstos dos
últimos filtraron información durante las investigaciones, una de las
principales preocupaciones que en su momento expuso el abogado Jorge
Sosa a la Fiscalía.
“Para
llegar a estos resultados, debo decir que fue muy importante el que se
haya publicado la información, porque se ejerció una presión importante
hacía la Fiscalía, que finalmente se movilizó para resolver el caso.
Porque hasta el 26 de enero no habían avanzado, lo que cambió cuando se
ventiló la problemática.
Aunque
es un caso lamentable, afortunadamente las familias pudieron obtener
respuesta, saben qué pasó con los jóvenes y tienen a los responsables
para que paguen su castigo. Debo reiterar que la Fiscalía se sintió
molesta con mi participación, derivado de las declaraciones donde doy a
conocer la lentitud y obstaculización de la investigación. Es por ello
que guardaré mi distancia con la dependencia, finalmente lo que se buscó
ya está logrado y era conocer qué pasó con los jóvenes y hacer pagar a
los culpables”, afirma el abogado Jorge Sosa.
Quien
a su vez comenta, “nosotros apoyamos a los familiares de los
desaparecidos como una labor social, por medio de nuestro Consejo
Ciudadano de Agua Santa, aquí en la ciudad de Puebla, tomamos el caso
para darle acompañamiento después que nos enteramos que a los
denunciantes las autoridades no les daban respuestas y dado que nadie
los acompañaba en su lucha, nosotros nos ofrecimos para apoyarlos,
viendo por fin los resultados”.
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