Grupo: Refugiados abusados ​​por las fuerzas fronterizas en los Balcanes

por Patrick Strickland

Rigardu ha lanzado un sitio web que documenta los retrocesos y la violencia contra los refugiados por parte de los países de la UE, principalmente en la frontera de Serbia con Hungría y Eslovenia [Archivo: Bernadett Szabo / Reuters]

Los refugiados y migrantes que intentan cruzar desde Serbia hacia los países vecinos de la Unión Europea han sufrido deportaciones ilegales y violencia policial generalizada, incluyendo palizas y descargas eléctricas, según un informe de un grupo de vigilancia.

Los hallazgos del monitor alemán, Rigardu, pintan una sombría imagen de abuso sistemático en las fronteras de Serbia, que no es un país de la UE, y Hungría y Croacia , que son ambos miembros del bloque.

El grupo dijo el domingo que había documentado al menos 857 casos de personas sometidas a violencia, incluyendo patadas y mordeduras de perro, en lo que va de año.

De ese total, 52 incidentes involucraron a menores.
Rigardu también registró al menos 110 casos de autoridades húngaras y croatas que realizaban deportaciones ilegales a Serbia. También hubo denuncias de contraataques de oficiales eslovenos en la frontera del país con Croacia.
Usando evidencia fotográfica y testimonios en primera persona, Rigardu ha lanzado una base de datos en línea para documentar casos individuales de violencia y retrocesos por parte de las fuerzas de los países de la UE a lo largo de la llamada ruta de los Balcanes.
El grupo dijo que es probable que el número real de tales incidentes sea mucho mayor ya que muchos casos de reincidencia y violencia policial a menudo no se denuncian.
Lazara Marinkovic, una periodista serbia que ha cubierto la crisis de los refugiados durante varios años, dijo que informes como el publicado por Rigardu "son muy comunes y los testimonios son consistentes con las lesiones" que había observado en varias ocasiones.
"La mayoría de las expulsiones violentas provienen de la policía fronteriza croata y húngara", dijo a Al Jazeera desde la capital de Serbia, Belgrado.
"Conocí a mucha gente que me mostró que sus teléfonos se habían roto y sus lesiones".

"La próxima vez, te mataremos"

En un incidente registrado por Rigardu, el 4 de noviembre, seis hombres afganos fueron supuestamente atacados y golpeados por guardias fronterizos croatas.
Cuando uno de los hombres, cuyo nombre ha sido retenido, solicitó la solicitud de asilo, un oficial le dijo: "No necesitamos que la gente venga aquí", según el testimonio brindado al grupo.

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El 19 de octubre, agentes de la policía croata arrestaron a cuatro hombres afganos que se cruzaban desde la calle Sid de Serbia. Después de golpearlos y robarles su dinero, de acuerdo con la cuenta dada a Rigardu, uno de los oficiales presuntamente empujó una rama de árbol en la boca de uno de los hombres.
"Gritaron: 'No hablen, vuelvan a Serbia'", dijo el informe del grupo.
En otro incidente, el 7 de octubre, cuatro tunecinos y un marroquí fueron golpeados y amenazados de muerte por la policía fronteriza croata, dijo Rigardu.
Los oficiales los golpearon con el mango de una porra y luego los golpearon nuevamente después de que ya habían cruzado la frontera de vuelta a Serbia, dijeron los hombres en su testimonio.
"F * ck, ve a Serbia, la próxima vez te [vamos a] matar", dijeron que los oficiales les dijeron mientras los golpeaban.
Contactado por Al Jazeera, un portavoz de la policía croata dijo en un correo electrónico que en los casos que han investigado, las autoridades "no han encontrado una conducta no profesional o ilegal de los agentes de policía hacia los migrantes".
El portavoz de la policía agregó: "Se está analizando el uso de ... la fuerza o la fuerza física para cada caso en particular, y el ministerio [del interior] se ocupa de que los policías actúen de acuerdo con el uso legal de los poderes policiales".
En declaraciones a Al Jazeera por correo electrónico, la oficina de comunicaciones internacionales del gobierno húngaro dijo que "rechaza por completo" las acusaciones, afirmando que están "una vez más buscando desacreditar al personal de turno en la frontera".
"La policía está cumpliendo con sus deberes de manera legal, profesional y proporcional, y hacen especial hincapié en tratar a los migrantes de forma humana y con respeto por su dignidad humana", dijo la oficina.
"Los inmigrantes en las fronteras de Hungría no están siendo hostigados, y el número significativo de menores no acompañados que han llegado reciben protección, atención médica y educación", agregó.
"Hungría trata a los que realmente lo necesitan con humanidad, y aquellos que esperan en sus fronteras o en su territorio reciben un trato justo. Sin embargo, se espera que los migrantes acaten las leyes de la UE y Hungría".
En declaraciones a Al Jazeera por correo electrónico, un portavoz de la policía eslovena dijo que los reclamos son "una gran sorpresa" y agregó que "están comprometidos con mantener altos estándares de profesionalismo" y defender los derechos humanos.
"No tenemos conocimiento de ningún caso de empujones y violencia [por] la policía eslovena".

'Prácticas horribles'

Lydia Gall, investigadora de la región de los Balcanes para Human Rights Watch (HRW), explicó que las expulsiones a través de las fronteras hacia Serbia son "ilegales" y a menudo "van acompañadas de diversos niveles de abuso y violencia".

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Las prácticas han estado sucediendo durante años, le dijo a Al Jazeera. "Esto se ha marcado una y otra vez en la Unión Europea desde hace varios años ... y sin embargo, la Comisión Europea ha decidido no actuar sobre este tema específicamente", dijo Gall.
El mes pasado, una niña afgana de seis años fue fatalmente golpeada por un tren después de que agentes de la policía croata supuestamente obligaron a su familia a caminar por las vías del tren en dirección a Serbia.
En una declaración publicada posteriormente en línea, el Ministerio del Interior de Croacia desestimó los reclamos de responsabilidad. "Hacemos hincapié en que la conducta de la policía fronteriza croata no causó de ninguna manera el accidente y la muerte de la niña", dijo.
HR de HRW describió el incidente como una "triste consecuencia de las prácticas ilegales ya menudo inhumanas" llevadas a cabo en las fronteras de la UE con Serbia.
"Esta pobre niña y su pobre familia fueron víctimas de estas prácticas horripilantes a medida que avanzan", dijo.

FUENTE: Al Jazeera News