Policía de Iguala opera para cártel
AGENCIA REFORMA/JESÚS GUERRERO / CHILPANCINGO, GUERRERO / Publicada el 06/10/2014
Durante el bloqueo intermitente que realizaron durante tres horas en el kilómetro 272, tuvieron un conato de violencia con militares que viajaban en dos camionetas. Foto: Especial
El cártel Guerreros Unidos infiltró a la Policía Municipal de Iguala.
El Procurador de Guerrero, Iñaky Blanco, dijo ayer que 30 policías municipales y algunos de los mandos policiacos fueron señalados como integrantes del grupo delictivo.
Quien daba órdenes a los agentes policiacos de hacer labores de “halcones” y de asesinar a personas, indicó, es un individuo al que le apodan el “Chucky”, uno de los líderes de la banda.
En conferencia de prensa, Blanco expuso que derivado de las investigaciones se logró establecer la participación de policías municipales y un grupo de sicarios en los ataques a estudiantes de la Normal de Ayotzinapa y del equipo de futbol Avispones de Chilpancingo, en los que murieron seis personas.
“De actuaciones se advierte que en los homicidios de los estudiantes de la normal rural ‘Raúl Isidro Burgos’ de Ayotzinapa, de las dos personas que viajaban en el autobús del equipo de futbol ‘Avispones de Chilpancingo’ y de una civil que transitaba por el lugar a bordo de un taxi, participaron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de Iguala vinculados a la delincuencia organizada y sicarios a su servicio, particularmente del grupo conocido como los ‘Guerreros Unidos’, externó en conferencia de prensa.
Relató que como parte de la investigación se detuvo al policía Honorio Antúnez, “El Patachín”, quien tenía vínculos con los delincuentes Martín Alejandro Macedo y Marco Antonio Díaz Velver, ambos integrantes del cártel.
Los dos presuntos criminales, añadió el funcionario, confesaron haber “levantado” a 17 normalistas a quienes se los llevaron a un cerro del ejido de Pueblo Viejo, en las afueras de Iguala, para asesinarlos.
“Los detenidos fueron constantes en manifestar que la instrucción de acudir al sitio en que se encontraban los normalistas la dio a quien ubican como el que da las órdenes en la Dirección de Seguridad Pública Municipal, Francisco Salgado Valladares (policía tercero).
“En tanto la instrucción de llevárselos y ultimarlos la recibieron de un sujeto apodado el ‘Chucky’, integrante y líder de los ‘Guerreros Unidos’, precisó.
El Procurador de Guerrero indicó que ya se libró órdenes de aprehensión contra Felipe Flores Velázquez, secretario de Seguridad Pública y Protección Civil; el subsecretario Alejandro Tenescalco Mejía y el supervisor en turno Luis Francisco Díaz, por su probable responsabilidad de los delitos de homicidio calificado en agravio de las seis personas.
Recordó que otros 22 policías municipales que fueron detenidos el sábado 27 de septiembre, horas después de los hechos de violencia, ya están formalmente presos en el penal de Acapulco.
La Fiscalía promoverá un juicio para desaforar al Alcalde José Luis Abarca y pueda dar cuentas de su participación en los ataques.
Objetan versión
El Procurador de Guerrero, Iñaky Blanco, dijo ayer que 30 policías municipales y algunos de los mandos policiacos fueron señalados como integrantes del grupo delictivo.
Quien daba órdenes a los agentes policiacos de hacer labores de “halcones” y de asesinar a personas, indicó, es un individuo al que le apodan el “Chucky”, uno de los líderes de la banda.
En conferencia de prensa, Blanco expuso que derivado de las investigaciones se logró establecer la participación de policías municipales y un grupo de sicarios en los ataques a estudiantes de la Normal de Ayotzinapa y del equipo de futbol Avispones de Chilpancingo, en los que murieron seis personas.
“De actuaciones se advierte que en los homicidios de los estudiantes de la normal rural ‘Raúl Isidro Burgos’ de Ayotzinapa, de las dos personas que viajaban en el autobús del equipo de futbol ‘Avispones de Chilpancingo’ y de una civil que transitaba por el lugar a bordo de un taxi, participaron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de Iguala vinculados a la delincuencia organizada y sicarios a su servicio, particularmente del grupo conocido como los ‘Guerreros Unidos’, externó en conferencia de prensa.
Relató que como parte de la investigación se detuvo al policía Honorio Antúnez, “El Patachín”, quien tenía vínculos con los delincuentes Martín Alejandro Macedo y Marco Antonio Díaz Velver, ambos integrantes del cártel.
Los dos presuntos criminales, añadió el funcionario, confesaron haber “levantado” a 17 normalistas a quienes se los llevaron a un cerro del ejido de Pueblo Viejo, en las afueras de Iguala, para asesinarlos.
“Los detenidos fueron constantes en manifestar que la instrucción de acudir al sitio en que se encontraban los normalistas la dio a quien ubican como el que da las órdenes en la Dirección de Seguridad Pública Municipal, Francisco Salgado Valladares (policía tercero).
“En tanto la instrucción de llevárselos y ultimarlos la recibieron de un sujeto apodado el ‘Chucky’, integrante y líder de los ‘Guerreros Unidos’, precisó.
El Procurador de Guerrero indicó que ya se libró órdenes de aprehensión contra Felipe Flores Velázquez, secretario de Seguridad Pública y Protección Civil; el subsecretario Alejandro Tenescalco Mejía y el supervisor en turno Luis Francisco Díaz, por su probable responsabilidad de los delitos de homicidio calificado en agravio de las seis personas.
Recordó que otros 22 policías municipales que fueron detenidos el sábado 27 de septiembre, horas después de los hechos de violencia, ya están formalmente presos en el penal de Acapulco.
La Fiscalía promoverá un juicio para desaforar al Alcalde José Luis Abarca y pueda dar cuentas de su participación en los ataques.
Objetan versión
Estudiantes
de la Escuela Normal de Ayotzinapa rechazan la versión del Gobierno de
Guerrero, quien asegura que sicarios del grupo criminal Guerreros Unidos
participó en ataque a normalistas.
“Nosotros vimos que los policías se los llevaron. No puede ser posible que fueron los del crimen organizado. Nosotros no le hemos hecho nada al crimen organizado.
“Se están queriendo lavar las manos diciendo que fue el crimen organizado. Que no se hagan güeyes. Ellos perfectamente saben quiénes fueron”, aseguró Uriel Alonso, vocero del comité estudiantil.
“Nosotros vimos que los policías se los llevaron. No puede ser posible que fueron los del crimen organizado. Nosotros no le hemos hecho nada al crimen organizado.
“Se están queriendo lavar las manos diciendo que fue el crimen organizado. Que no se hagan güeyes. Ellos perfectamente saben quiénes fueron”, aseguró Uriel Alonso, vocero del comité estudiantil.
Con información de Arcelia Maya
Entre las drogas y la extorsión
Presentes
en entidades como Guerrero, Morelos, y Estado de México, los Guerreros
Unidos son un cártel dedicado al trasiego de drogas a Estados Unidos por
vía terrestre,.
No obstante, según reportes oficiales, la actividades delictivas de la organización se han diversificado: Además de buscar mantener el control de la producción y venta de drogas, se dedica a prácticas como el secuestro, la extorsión, y la piratería, con el fin de obtener ganancias.
El grupo delictivo se formó a raíz de una escisión al interior de la Familia Michoacana, que lideraban Rodolfo Paredes Cárdenas, “El Bofo”, y Mario Casarrubias Salgado, “El Sapo Guapo”, un ex escolta de varios operadores del cártel de los Beltrán Leyva antes de formar su propia organización.
Tras la captura de Casarrubias, se presume que el nuevo líder es Federico Figueroa, a quien se vincula familiarmente con el cantautor Joan Sebastian.
En Guerrero, el cártel sostiene una disputa con la organización delictiva Los Rojos, cuyos enfrentamientos han incidido en el incremento a la violencia en la entidad, sobre todo en los municipios de Arcelia, Ciudad Altamirano, Taxco, Iguala, Chilpancingo y Tixtla.
Desde 2012 se observó su presencia en Morelos y el Estado de México, entidades colindantes con Guerrero, donde mantienen disputas además con otras organizaciones delictivas como La Familia Michoacana, el cártel de los Beltrán Leyva y Los Zetas.
En Morelos ocupan los municipios de Jiutepec y Cuautla, mientras que en el Estado de México se ubican en la zona poniente, cercana a Michoacán, donde, de acuerdo con reportes oficiales, sostienen una alianza con los Caballeros Templarios.
No obstante, según reportes oficiales, la actividades delictivas de la organización se han diversificado: Además de buscar mantener el control de la producción y venta de drogas, se dedica a prácticas como el secuestro, la extorsión, y la piratería, con el fin de obtener ganancias.
El grupo delictivo se formó a raíz de una escisión al interior de la Familia Michoacana, que lideraban Rodolfo Paredes Cárdenas, “El Bofo”, y Mario Casarrubias Salgado, “El Sapo Guapo”, un ex escolta de varios operadores del cártel de los Beltrán Leyva antes de formar su propia organización.
Tras la captura de Casarrubias, se presume que el nuevo líder es Federico Figueroa, a quien se vincula familiarmente con el cantautor Joan Sebastian.
En Guerrero, el cártel sostiene una disputa con la organización delictiva Los Rojos, cuyos enfrentamientos han incidido en el incremento a la violencia en la entidad, sobre todo en los municipios de Arcelia, Ciudad Altamirano, Taxco, Iguala, Chilpancingo y Tixtla.
Desde 2012 se observó su presencia en Morelos y el Estado de México, entidades colindantes con Guerrero, donde mantienen disputas además con otras organizaciones delictivas como La Familia Michoacana, el cártel de los Beltrán Leyva y Los Zetas.
En Morelos ocupan los municipios de Jiutepec y Cuautla, mientras que en el Estado de México se ubican en la zona poniente, cercana a Michoacán, donde, de acuerdo con reportes oficiales, sostienen una alianza con los Caballeros Templarios.
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