Vuelven tajo a Santa Ana tiradero de cadáveres
VERÓNICA ADONA / Publicada el 06/10/2014
Al menos 24 cuerpos han sido encontrados en los últimos cinco años, según registros de AM.
En
cinco años en las inmediaciones de la carretera a Santa Ana del Conde
se han cometido asesinatos y tirado cuerpos envueltos en mantas, con
balazos en la cabeza, estrangulados o desmembrados.
De 2010 a la fecha se han contabilizado al menos 24 en predios cercanos a esa comunidad.
2014 es el año con más víctimas, el caso más reciente fue el de los hermanos Abel y Alejandro González Hernández, de 35 y 33 años, ambos de oficio albañil.
Sus cuerpos fueron encontrados en un camino de terracería de la comunidad La Pedrera, en la carretera Santa Ana del Conde-Romita.
Semanas antes los cuerpos de cuatro mujeres fueron hallados dentro de un aljibe.
En lo que va de este año se registraron 10 casos, cuatro más que en 2013; en ese año, en un día fueron localizados los cuerpos de cuatro albañiles que habían sido asfixiados.
Los cuatro eran originarios de León y fueron identificados como: J. Luz Torres, de 43 años, Eleuterio Súchil, de 44; Óscar Lira, de 42, y Pedro Córtes Martínez, de 39 años.
El hallazgo ocurrió el 16 de octubre de 2013 en la comunidad El Pochote, en la carretera Santa Ana del Conde-Romita.
En 2010 hubo cinco crímenes en esa zona; en 2012 se registraron dos y el 2011 hubo uno.
De los 10 casos registrados en estos últimos nueve meses, al menos cinco fueron víctimas de secuestro; hasta la fecha todos los casos han quedado impunes.
La primera víctima de homicidio de 2014 que fue confirmada secuestrada por la Procuraduría General de Justicia, fue hallada el 10 de junio.
Víctima de secuestro
De 2010 a la fecha se han contabilizado al menos 24 en predios cercanos a esa comunidad.
2014 es el año con más víctimas, el caso más reciente fue el de los hermanos Abel y Alejandro González Hernández, de 35 y 33 años, ambos de oficio albañil.
Sus cuerpos fueron encontrados en un camino de terracería de la comunidad La Pedrera, en la carretera Santa Ana del Conde-Romita.
Semanas antes los cuerpos de cuatro mujeres fueron hallados dentro de un aljibe.
En lo que va de este año se registraron 10 casos, cuatro más que en 2013; en ese año, en un día fueron localizados los cuerpos de cuatro albañiles que habían sido asfixiados.
Los cuatro eran originarios de León y fueron identificados como: J. Luz Torres, de 43 años, Eleuterio Súchil, de 44; Óscar Lira, de 42, y Pedro Córtes Martínez, de 39 años.
El hallazgo ocurrió el 16 de octubre de 2013 en la comunidad El Pochote, en la carretera Santa Ana del Conde-Romita.
En 2010 hubo cinco crímenes en esa zona; en 2012 se registraron dos y el 2011 hubo uno.
De los 10 casos registrados en estos últimos nueve meses, al menos cinco fueron víctimas de secuestro; hasta la fecha todos los casos han quedado impunes.
La primera víctima de homicidio de 2014 que fue confirmada secuestrada por la Procuraduría General de Justicia, fue hallada el 10 de junio.
Víctima de secuestro
Una
llamada fue el comienzo del fin para Miguel Rodríguez Torres, un hombre
de 52 años dueño de un negocio de materiales para la construcción.
En esa llamada, en junio, un supuesto cliente le pidió que enviara material a su vivienda.
Miguel y un empleado cargaron una camioneta con el pedido y salieron para entregarlo, pero delincuentes los interceptaron y los privaron de su libertad.
Horas después el empleado fue liberado.
Fuentes extraoficiales señalaron entonces que los secuestradores pidieron a la familia cinco millones de pesos por la libertad del empresario, pero sólo pudo entregar un millón 800 mil.
Días después, el 10 de junio, el cuerpo de Rodríguez Torres fue localizado en el kilómetro 2+200 de la carretera León-Santa Ana del Conde, en un camino que conduce al municipio de Romita.
Tenía la cabeza cubierta y estaba atado de pies y manos; había sido asfixiado y su cuerpo abandonado a un lado de la carretera.
Cuando fue encontrado tenía entre 20 y 48 horas de haber sido asesinado, informaron autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado.
El caso fue atraído por la Subprocuraduría de Investigación Especializada (SIE), una vez que familiares denunciaron el secuestro.
Cuatro mujeres en aljibe
En esa llamada, en junio, un supuesto cliente le pidió que enviara material a su vivienda.
Miguel y un empleado cargaron una camioneta con el pedido y salieron para entregarlo, pero delincuentes los interceptaron y los privaron de su libertad.
Horas después el empleado fue liberado.
Fuentes extraoficiales señalaron entonces que los secuestradores pidieron a la familia cinco millones de pesos por la libertad del empresario, pero sólo pudo entregar un millón 800 mil.
Días después, el 10 de junio, el cuerpo de Rodríguez Torres fue localizado en el kilómetro 2+200 de la carretera León-Santa Ana del Conde, en un camino que conduce al municipio de Romita.
Tenía la cabeza cubierta y estaba atado de pies y manos; había sido asfixiado y su cuerpo abandonado a un lado de la carretera.
Cuando fue encontrado tenía entre 20 y 48 horas de haber sido asesinado, informaron autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado.
El caso fue atraído por la Subprocuraduría de Investigación Especializada (SIE), una vez que familiares denunciaron el secuestro.
Cuatro mujeres en aljibe
Los
restos de cuatro mujeres fueron encontrados dentro de un aljibe en una
casa en construcción localizada en la comunidad Rancho Nuevo la Luz.
Dos de ellas (las mujeres eran madre e hija) fueron secuestradas el 13 de mayo en su casa, y los delincuentes que se las llevaron pidieron a familiares una fuerte cantidad de dinero para que las liberaran, según las autoridades.
A los cuerpos se les aplicaron pruebas de genética y antropométricas, con las que se pudo identificar plenamente a las víctimas.
Las autoridades presentaron a dos responsables de los hechos.
Dos de ellas (las mujeres eran madre e hija) fueron secuestradas el 13 de mayo en su casa, y los delincuentes que se las llevaron pidieron a familiares una fuerte cantidad de dinero para que las liberaran, según las autoridades.
A los cuerpos se les aplicaron pruebas de genética y antropométricas, con las que se pudo identificar plenamente a las víctimas.
Las autoridades presentaron a dos responsables de los hechos.
Se imponen ‘toque de queda’
En el tajo a Santa Ana los vecinos se impusieron un “toque de queda”.
A partir de que anochece se resguardan en sus casas y quienes trabajan están a más tardar en ellas a las 10.
Aunque hay fraccionamientos con vigilancia privada, incluso casas con cámaras de seguridad, sus habitantes prefieren estar en casa para evitar un asalto, riña o hasta un homicidio.
Otros más se protegen con machetes, cuchillos y perros y están alerta en caso de descubrir la presencia de un sospechoso.
Escondido entre un pilar de tabiques y pequeñas hierbas don Serapio está sentado sobre una piedra, sopesando un machete de 60 centímetros.
A dos metros uno de sus dos perros, permanece alerta y agresivo para atacar a cualquier intruso.
“Más vale estar prevenidos, ya es una costumbre que muchos de aquí carguemos con un machete o cuidemos nuestras casas con perros y cuando estemos en casa nos protegemos con lo que hay adentro, cuchillos y más machetes.
“Hay mucha gente que no conocemos y nomás andan como vigilando la zona”, platicó don Serapio, de 74 años.
El resto de los habitantes se siente “a salvo” con los pandilleros armados que salen por las noches.
“Muchos estamos a la buena de Dios, pero aunque suene raro nos sentimos un poco seguros con la chavos que traen armas... se dedican a pelear entre pandillas, pero la zona la vigilan; al menos a los habitantes de aquí no nos hacen nada”, dijo una mujer que se reservó su identidad.
Los habitantes ubican a sus vecinos, trabajadores temporales y hasta los autos o camionetas que cada mañana pasan por el camino empedrado.
“Desde luego que ubicamos los autos o camionetas sospechosas, hay varios, pero qué podemos hacer, sólo mantener una barrera y callar”, dijo otro vecino.
A partir de que anochece se resguardan en sus casas y quienes trabajan están a más tardar en ellas a las 10.
Aunque hay fraccionamientos con vigilancia privada, incluso casas con cámaras de seguridad, sus habitantes prefieren estar en casa para evitar un asalto, riña o hasta un homicidio.
Otros más se protegen con machetes, cuchillos y perros y están alerta en caso de descubrir la presencia de un sospechoso.
Escondido entre un pilar de tabiques y pequeñas hierbas don Serapio está sentado sobre una piedra, sopesando un machete de 60 centímetros.
A dos metros uno de sus dos perros, permanece alerta y agresivo para atacar a cualquier intruso.
“Más vale estar prevenidos, ya es una costumbre que muchos de aquí carguemos con un machete o cuidemos nuestras casas con perros y cuando estemos en casa nos protegemos con lo que hay adentro, cuchillos y más machetes.
“Hay mucha gente que no conocemos y nomás andan como vigilando la zona”, platicó don Serapio, de 74 años.
El resto de los habitantes se siente “a salvo” con los pandilleros armados que salen por las noches.
“Muchos estamos a la buena de Dios, pero aunque suene raro nos sentimos un poco seguros con la chavos que traen armas... se dedican a pelear entre pandillas, pero la zona la vigilan; al menos a los habitantes de aquí no nos hacen nada”, dijo una mujer que se reservó su identidad.
Los habitantes ubican a sus vecinos, trabajadores temporales y hasta los autos o camionetas que cada mañana pasan por el camino empedrado.
“Desde luego que ubicamos los autos o camionetas sospechosas, hay varios, pero qué podemos hacer, sólo mantener una barrera y callar”, dijo otro vecino.
Sin luz y sin seguridad
Del
centro comercial Altacia a la entrada al Tajo a Santa Ana sur
(carretera León-Silao) hay una distancia de 4.3 kilómetros que en
automóvil se recorren en unos ocho minutos.
El camino es empedrado y mide alrededor de 300 metros; al final está la subestación del Bajío de la Comisión Federal de Electricidad.
A medio kilómetro de ese camino se encuentra el centro de rehabilitación “La Esperanza” y a 200 metros un lienzo charro.
A la redonda sólo hay hectáreas y hectáreas de pastizales y sembradíos.
El camino empedrado está dividido por un arroyo, conocido como el arroyo del Tajo, y no hay alumbrado público.
En el tajo dirección sur, a 100 metros de la entrada hay un pequeño camino (Villa de las Torres) en el que al menos cinco casas tienen luz exterior, alambrado y cámaras de vigilancia.
Del lado norte (hacia la carretera a Silao) la única zona que cuenta con luz es el fraccionamiento Villas de Barceló.
Según vecinos hay vigilancia de la Policía Municipal, pero patrullan hasta los primeros 300 metros de la entrada al tajo y luego mejor ya se regresan a la carretera.
“No los culpamos, la verdad es que hasta un policía ha de temer por su seguridad, con esa oscuridad y con lo común que es acá para tirar cuerpos, pues no se van a meter a la boca del lobo.
“Pero si no hacen algo van a seguir encontrando ejecutados y sin detenidos, nadie hace algo para que pongan alumbrado en todo Santa Ana del Conde y no hacen operativos”, expresó un habitante de la zona.
El camino es empedrado y mide alrededor de 300 metros; al final está la subestación del Bajío de la Comisión Federal de Electricidad.
A medio kilómetro de ese camino se encuentra el centro de rehabilitación “La Esperanza” y a 200 metros un lienzo charro.
A la redonda sólo hay hectáreas y hectáreas de pastizales y sembradíos.
El camino empedrado está dividido por un arroyo, conocido como el arroyo del Tajo, y no hay alumbrado público.
En el tajo dirección sur, a 100 metros de la entrada hay un pequeño camino (Villa de las Torres) en el que al menos cinco casas tienen luz exterior, alambrado y cámaras de vigilancia.
Del lado norte (hacia la carretera a Silao) la única zona que cuenta con luz es el fraccionamiento Villas de Barceló.
Según vecinos hay vigilancia de la Policía Municipal, pero patrullan hasta los primeros 300 metros de la entrada al tajo y luego mejor ya se regresan a la carretera.
“No los culpamos, la verdad es que hasta un policía ha de temer por su seguridad, con esa oscuridad y con lo común que es acá para tirar cuerpos, pues no se van a meter a la boca del lobo.
“Pero si no hacen algo van a seguir encontrando ejecutados y sin detenidos, nadie hace algo para que pongan alumbrado en todo Santa Ana del Conde y no hacen operativos”, expresó un habitante de la zona.
ALGUNOS DE LOS CASOS
2010
11 de marzo Luis Márquez Márquez, de oficio soldador, fue asesinado frente a una vulcanizadora en Santa Ana del Conde.
18 de marzo Tres cuerpos envueltos en lonas fueron arrojados a un arroyo en la comunidad Benito Juárez, en la carretera a Santa Ana del Conde.
18 de marzo Tres cuerpos envueltos en lonas fueron arrojados a un arroyo en la comunidad Benito Juárez, en la carretera a Santa Ana del Conde.
2011
Enero A 50 metros de las vías del ferrocarril en Santa Ana del Conde fue encontrado el cuerpo de un hombre baleado.
2012
10 de agosto El cuerpo de Frankie Sandoval Barragán, de 30 años, fue hallado en un tambo cubierto con cemento.
15 de diciembre En el camino entre Playa de Sotelo y Santa Ana del Conde fue hallado muerto a balazos Leonardo Badillo López.
15 de diciembre En el camino entre Playa de Sotelo y Santa Ana del Conde fue hallado muerto a balazos Leonardo Badillo López.
2013
Abril
Christian Andrade Falcón, de 27 años, fue asesinado en un intento de
robo afuera de un balneario, en la carretera León-Santa Ana del Conde.
15 de agosto El cuerpo de un hombre asesinado fue encontrado en la comunidad Guadalupe Victoria, a la altura de la carretera León-Santa Ana del Conde.
16 de octubre En la carretera Santa Ana del Conde-Romita, en El Pochote, fueron hallados los cuerpos de cuatro albañiles.
15 de agosto El cuerpo de un hombre asesinado fue encontrado en la comunidad Guadalupe Victoria, a la altura de la carretera León-Santa Ana del Conde.
16 de octubre En la carretera Santa Ana del Conde-Romita, en El Pochote, fueron hallados los cuerpos de cuatro albañiles.
2014
6
de abril Julio Ashemel Cruz Cardiel, de 18 años, fue estrangulado y su
cuerpo hallado en un tambo con cemento en el tajo a Santa Ana del
Conde.
16 de mayo El cuerpo de José Luis Jacuinde Rojas, de 26 años, originario de Michoacán, fue localizado en Santa Ana del Conde.
3 de julio Ricardo Saavedra Cervantes, de 37 años, fue encontrado asesinado en el tajo a Santa Ana del Conde.
10 de julio Miguel Rodríguez Torres, de 52 años, fue asesinado en la carretera León-Santa Ana del Conde.
2 de agosto Cuatro cuerpos de mujeres fueron encontradas en un aljibe de una finca.
14 de septiembre Los hermanos Abel y Alejandro González Hernández, fueron asesinados a balazos y encontrados en la carretera Santa Ana del Conde-Romita.
16 de mayo El cuerpo de José Luis Jacuinde Rojas, de 26 años, originario de Michoacán, fue localizado en Santa Ana del Conde.
3 de julio Ricardo Saavedra Cervantes, de 37 años, fue encontrado asesinado en el tajo a Santa Ana del Conde.
10 de julio Miguel Rodríguez Torres, de 52 años, fue asesinado en la carretera León-Santa Ana del Conde.
2 de agosto Cuatro cuerpos de mujeres fueron encontradas en un aljibe de una finca.
14 de septiembre Los hermanos Abel y Alejandro González Hernández, fueron asesinados a balazos y encontrados en la carretera Santa Ana del Conde-Romita.
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