EE.UU.
ha enviado tropas adicionales y 250 camiones de armas al norte de
Siria, aun así, ha anunciado el retiro de sus militares del territorio
sirio.
El opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH) afirmó que pese a la promesa de evacuar Siria de los uniformados estadounidenses, Washington sigue enviando armas y tropas a este país árabe, devastado por un conflicto armado desde 2011.
El OSDH precisó que un contingente de tropas adicionales y 250 camiones llenos de armas y dispositivos logísticos, que pertenecían a la llamada coalición anti-EIIL (Daesh, en árabe), liderada por EE.UU., entraron la noche de ayer jueves a las provincias de Alepo (noroeste), Al-Raqa y Al-Hasaka (estas últimas en el noreste de Siria).
Las armas de los dispositivos logísticos fueron distribuidas en las bases que tiene la coalición en cuestión en la región norteña de Siria, como Ain-Isa en Al-Raqa, añadió el observatorio con sede en Londres, la capital del Reino Unido.
El OSDH había indicado en diciembre pasado que las fuerzas estadounidenses hicieron llegar grandes cantidades de armas, combustible y dispositivos de apoyo logístico a sus bases en el norte de Siria para reforzar su presencia, pese al anuncio de retirada.
Fuentes del Departamento de Defensa estadounidense (el Pentágono), por su parte, afirmaron la misma jornada del jueves el envío de tropas adicionales a Siria, sin precisar el número o su destino exacto. Su misión, según las fuentes, es contribuir a una retirada “segura” de las tropas y los dispositivos bélicos existentes.
Distintos analistas están convencidos de que pese al cumplimiento de la promesa de sacar todas las tropas de Siria, Washington no va a perder el país a favor de sus rivales.
La Administración del presidente estadounidense Donald Trump anunció el pasado 19 de diciembre la retirada total de sus tropas, decisión que, según algunos políticos sirios, tiene sus raíces en la firmeza del pueblo y el Gobierno de este país árabe.
Damasco ha denunciado en reiteradas ocasiones la matanza de civiles en los bombardeos estadounidenses y ha reclamado a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que ponga fin a la ilegal presencia en su territorio de los norteamericanos y sus aliados.
ask/ktg/fmd/hnb
El opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH) afirmó que pese a la promesa de evacuar Siria de los uniformados estadounidenses, Washington sigue enviando armas y tropas a este país árabe, devastado por un conflicto armado desde 2011.
El OSDH precisó que un contingente de tropas adicionales y 250 camiones llenos de armas y dispositivos logísticos, que pertenecían a la llamada coalición anti-EIIL (Daesh, en árabe), liderada por EE.UU., entraron la noche de ayer jueves a las provincias de Alepo (noroeste), Al-Raqa y Al-Hasaka (estas últimas en el noreste de Siria).
Las armas de los dispositivos logísticos fueron distribuidas en las bases que tiene la coalición en cuestión en la región norteña de Siria, como Ain-Isa en Al-Raqa, añadió el observatorio con sede en Londres, la capital del Reino Unido.
El OSDH había indicado en diciembre pasado que las fuerzas estadounidenses hicieron llegar grandes cantidades de armas, combustible y dispositivos de apoyo logístico a sus bases en el norte de Siria para reforzar su presencia, pese al anuncio de retirada.
Fuentes del Departamento de Defensa estadounidense (el Pentágono), por su parte, afirmaron la misma jornada del jueves el envío de tropas adicionales a Siria, sin precisar el número o su destino exacto. Su misión, según las fuentes, es contribuir a una retirada “segura” de las tropas y los dispositivos bélicos existentes.
Distintos analistas están convencidos de que pese al cumplimiento de la promesa de sacar todas las tropas de Siria, Washington no va a perder el país a favor de sus rivales.
La Administración del presidente estadounidense Donald Trump anunció el pasado 19 de diciembre la retirada total de sus tropas, decisión que, según algunos políticos sirios, tiene sus raíces en la firmeza del pueblo y el Gobierno de este país árabe.
Damasco ha denunciado en reiteradas ocasiones la matanza de civiles en los bombardeos estadounidenses y ha reclamado a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que ponga fin a la ilegal presencia en su territorio de los norteamericanos y sus aliados.
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