Cuesta un funeral mínimo $4 mil 200
Un
servicio medio se encuentra compuesto por un ataúd metálico, todos los
servicios anteriores y velación en domicilio, en unos 9 mil pesos, sin
contemplar el terreno en el panteón. Foto: Archivo.
MEXICALI, Baja California(PH)Aunque
se pueda decir que “morir no tiene precio”, en la vida cotidiana y
real, fallecer puede costar mínimo 4 mil 200 pesos, en velatorios del
DIF, y llegar hasta los 19 mil pesos, aunque todo depende cuál funeraria
realice el servicio.
El costo incluye levantamiento de cuerpo, embalsamado, servicio de cafetería, ataúd de no muy buena calidad, servicio de carroza y terreno en un panteón económico, comentó Fernando Durón, encargado de una empresa que presta servicios funerarios desde hace 21 años.
“Todos los paquetes y costos están hechos para la necesidad o carencia de cada familia, así que para eso hemos hecho varios paquetes o incluso la misma gente puede armarlos, pero es importante decir que sea el costo que sea, el ataúd es lo que va a diferenciar el costo”.
En el mercado funerario existe un gran número de proveedores, explicó, quienes ofrecen precios distintos cada uno en sus ataúdes.
Por ejemplo, dijo, los ataúdes de madera son y han sido siempre los más económicos, llegando a tener un costo mínimo de 900 pesos y un máximo de mil 900 pesos.
Después continúan los ataúdes metálicos, mismos que dependiendo de su calidad el costo puede oscilar entre los 5 mil y 7 mil por pieza.
“Sin embargo, hay que tener en cuenta que hay ataúdes que andan entre los 30 mil, 40 mil, e incluso los 100 mil pesos, ésos ya tienen esquinas bañadas en oro, mismas que se retiran cuando se va a sepultar al difunto y se le entregan a la familia”.
Los servicios que ofrece una funeraria no presenta precios o costos fijos, ya que todo dependerá, afirma Durón, de lo que el familiar deseé y la calidad de ataúd que prefiera.
El ataúd se convierte en el elemento más importante durante el ritual funeral, toda vez que es el lugar donde descansarán los restos del ser querido.
Comentó que lo que ofrece la calidad de cada ataúd es la conservación del cuerpo durante más tiempo.
El servicio
Aunque el ataúd será quien defina el costo que tendrá “el último adiós”, para llevar a cabo el ritual fúnebre éste lo integran otros servicios, como el levantamiento del cuerpo en el lugar donde falleció, así como el embalsamado.
“En un servicio para salir del apuro se puede dejar mínimo en 3 mil 500, que incluye levantamiento de cuerpo, preparación de embalsamado, servicio de cafetería y servicio de carroza, un ataúd de no muy buena calidad, esto en un servicio de domicilio”, dijo.
Aunque cada vez es menos común el servicio de velación en domicilio, comentó, todavía continúa practicándose.
Independientemente del estrato socioeconómico al que se pertenezca, sino que esta decisión dependerá muchas veces de la última voluntad del difunto.
Lo que en el negocio funerario se denomina un “servicio económico” tiene un costo de 5 mil pesos, el cual contiene los servicios antes mencionados, velación en domicilio, sin incluir el terreno donde será sepultado el ser querido.
“El panteón no se incluye, ya la familia decide, si quiere algo económico está el panteón Centinela, donde el terreno y los trámites cuestan mil 900 pesos aproximadamente”.
En números redondos, un servicio funerario económico e improvisado tiene un costo total de aproximadamente 7 mil pesos.
Un servicio medio se encuentra compuesto por un ataúd metálico, todos los servicios anteriores y velación en domicilio, en unos 9 mil pesos, sin contemplar el terreno en el panteón.
Velar en la capilla
Cuando los familiares deciden velar el cuerpo en una capilla de la funeraria, lo cual Durón refiere que es lo más común, el paquete económico puede tener un costo de 6 mil pesos sin panteón y con un ataúd metálico, lo que se traduciría en una cortesía la capilla.
“Tenemos capillas con capacidad de 40, 70 y hasta 80 personas, la renta de la capilla solamente, es decir sin ningún otro servicio, tiene un costo de 6 mil pesos la más pequeña y la grande en 10 mil, sólo la capilla”.
Hay más cremaciones
Durón refiere que, aunque el servicio funerario tradicional continúa, cada vez es más frecuente realizar el proceso de cremación.
“Realmente ha aumentado bastante, pero obviamente por el tipo de proceso es mas costoso, aquí dependerá, no tanto del ataúd, sino del lugar donde lo quieras colocar”.
Menciona que la compra de una urna, que es donde se depositarán las cenizas; oscila entre los mil pesos mínimo y 6 mil como máximo; al igual que los ataúdes, todo dependerá del material.
El proceso de cremación tiene un costo de 10 mil pesos, en este caso, si se hablara de un servicio económico, sólo contemplaría la cremación, trámites y permisos de posesión el familiar llevaría las cenizas de su difunto en una urna o donde quisiese.
Una segunda opción es depositar las cenizas en un camposanto, lo que implicaría pagar diez mil pesos de la cremación más el terreno; en el panteón Centinela el terreno cuesta 2 mil pesos y con el que tienen alianza alrededor de 6 mil pesos.
El costo incluye levantamiento de cuerpo, embalsamado, servicio de cafetería, ataúd de no muy buena calidad, servicio de carroza y terreno en un panteón económico, comentó Fernando Durón, encargado de una empresa que presta servicios funerarios desde hace 21 años.
“Todos los paquetes y costos están hechos para la necesidad o carencia de cada familia, así que para eso hemos hecho varios paquetes o incluso la misma gente puede armarlos, pero es importante decir que sea el costo que sea, el ataúd es lo que va a diferenciar el costo”.
En el mercado funerario existe un gran número de proveedores, explicó, quienes ofrecen precios distintos cada uno en sus ataúdes.
Por ejemplo, dijo, los ataúdes de madera son y han sido siempre los más económicos, llegando a tener un costo mínimo de 900 pesos y un máximo de mil 900 pesos.
Después continúan los ataúdes metálicos, mismos que dependiendo de su calidad el costo puede oscilar entre los 5 mil y 7 mil por pieza.
“Sin embargo, hay que tener en cuenta que hay ataúdes que andan entre los 30 mil, 40 mil, e incluso los 100 mil pesos, ésos ya tienen esquinas bañadas en oro, mismas que se retiran cuando se va a sepultar al difunto y se le entregan a la familia”.
Los servicios que ofrece una funeraria no presenta precios o costos fijos, ya que todo dependerá, afirma Durón, de lo que el familiar deseé y la calidad de ataúd que prefiera.
El ataúd se convierte en el elemento más importante durante el ritual funeral, toda vez que es el lugar donde descansarán los restos del ser querido.
Comentó que lo que ofrece la calidad de cada ataúd es la conservación del cuerpo durante más tiempo.
El servicio
Aunque el ataúd será quien defina el costo que tendrá “el último adiós”, para llevar a cabo el ritual fúnebre éste lo integran otros servicios, como el levantamiento del cuerpo en el lugar donde falleció, así como el embalsamado.
“En un servicio para salir del apuro se puede dejar mínimo en 3 mil 500, que incluye levantamiento de cuerpo, preparación de embalsamado, servicio de cafetería y servicio de carroza, un ataúd de no muy buena calidad, esto en un servicio de domicilio”, dijo.
Aunque cada vez es menos común el servicio de velación en domicilio, comentó, todavía continúa practicándose.
Independientemente del estrato socioeconómico al que se pertenezca, sino que esta decisión dependerá muchas veces de la última voluntad del difunto.
Lo que en el negocio funerario se denomina un “servicio económico” tiene un costo de 5 mil pesos, el cual contiene los servicios antes mencionados, velación en domicilio, sin incluir el terreno donde será sepultado el ser querido.
“El panteón no se incluye, ya la familia decide, si quiere algo económico está el panteón Centinela, donde el terreno y los trámites cuestan mil 900 pesos aproximadamente”.
En números redondos, un servicio funerario económico e improvisado tiene un costo total de aproximadamente 7 mil pesos.
Un servicio medio se encuentra compuesto por un ataúd metálico, todos los servicios anteriores y velación en domicilio, en unos 9 mil pesos, sin contemplar el terreno en el panteón.
Velar en la capilla
Cuando los familiares deciden velar el cuerpo en una capilla de la funeraria, lo cual Durón refiere que es lo más común, el paquete económico puede tener un costo de 6 mil pesos sin panteón y con un ataúd metálico, lo que se traduciría en una cortesía la capilla.
“Tenemos capillas con capacidad de 40, 70 y hasta 80 personas, la renta de la capilla solamente, es decir sin ningún otro servicio, tiene un costo de 6 mil pesos la más pequeña y la grande en 10 mil, sólo la capilla”.
Hay más cremaciones
Durón refiere que, aunque el servicio funerario tradicional continúa, cada vez es más frecuente realizar el proceso de cremación.
“Realmente ha aumentado bastante, pero obviamente por el tipo de proceso es mas costoso, aquí dependerá, no tanto del ataúd, sino del lugar donde lo quieras colocar”.
Menciona que la compra de una urna, que es donde se depositarán las cenizas; oscila entre los mil pesos mínimo y 6 mil como máximo; al igual que los ataúdes, todo dependerá del material.
El proceso de cremación tiene un costo de 10 mil pesos, en este caso, si se hablara de un servicio económico, sólo contemplaría la cremación, trámites y permisos de posesión el familiar llevaría las cenizas de su difunto en una urna o donde quisiese.
Una segunda opción es depositar las cenizas en un camposanto, lo que implicaría pagar diez mil pesos de la cremación más el terreno; en el panteón Centinela el terreno cuesta 2 mil pesos y con el que tienen alianza alrededor de 6 mil pesos.
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