Analistas piden desaparecer subsidio a gasolinas

Analistas piden desaparecer subsidio a gasolinas A pesar de que la SHCP anunció que mantiene el beneficio, la OCDE y especialistas sugieren que desaparezca
Publicado por Atzayaelh Torres el Lunes 10-12-2012

Analistas piden desaparecer subsidio a gasolinas

CIUDAD DE MÉXICO, 10 de diciembre.- De acuerdo con el Compromiso número 73 del Pacto Por México, firmado por las principales fuerzas políticas del país, se llevará a cabo una revisión integral a la política de subsidios y a los regímenes especiales para que sean eficaces, transparentes y progresivos. Estos apoyos, se aclaró, no se entregarán más a la población de altos ingresos.
Sin embargo, el viernes pasado desde Hacienda se dijo que se mantendrá la política de subsidios a la gasolina, y se anunció que a partir del pasado sábado el incremento se mantiene en nueve centavos el litro, con lo cual el combustible tipo Magna tendrá un precio de 10.81 pesos, la Premium 11.37 y el diesel 11.17 pesos.
El subsecretario de Ingresos de Hacienda, Miguel Messmacher, descartó que esto vaya a tener un impacto sensible sobre la inflación. De hecho, dijo “con los incrementos en el combustible no hemos observado que la inflación se desboque y este aumento es consistente con el objetivo de 3% +/- un punto porcentual del Banco de México”.
“El aumento de nueve centavos mensuales tendrá un impacto en los precios de alrededor de 0.1%”, indicó.
Messmacher precisó que una política gradual en el precio de la gasolina y el diesel busca reducir el impacto de los mayores precios internacionales de los combustibles sobre las finanzas de las empresas y los hogares.
Por otro lado, agregó que es necesario que se observe un aumento para evitar un deterioro permanente en las finanzas públicas del país.
“Actualmente existen subsidios que tienen resultados regresivos, pues asignan mayores recursos a las personas que más tienen. Tan sólo 13% del gasto público en desarrollo humano llega a 20% de la población con menos ingreso, mientras que 32% beneficia a 20% de la población más rica”, se detalla en el compromiso.
De acuerdo con expertos, la eliminación de estos subsidios a gasolinas tiene que continuar siendo paulatino, cuidando el impacto que tenga en la inflación, pero siempre orientado a  llenar el hueco que existe en las finanzas públicas.
De acuerdo con el último informe de finanzas y deuda pública de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), en el periodo de enero a octubre el subsidio a las gasolinas automotrices fue de 183 mil 583 millones de pesos, más de 13 mil millones por arriba de los 172 mil millones de pesos autorizados en el presupuesto federal de este año.
Sólo en octubre el subsidio fue de 15 mil 382 millones de pesos, 10.3 por ciento arriba de lo que el gobierno destinó a este fin durante el mismo mes del año pasado.
Para la OCDE, quien también califica este subsidio como regresivo,  México mantiene un esquema de apoyo en combustibles a su población que debe irse eliminando, a través de disposiciones fiscales como el Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS).
“El IEPS utiliza un tipo de interés variable, que se basa en los precios internacionales de referencia de la gasolina y el diesel. Cuando el precio internacional es alto, la tasa se vuelve negativa para que los precios internos estén por debajo del costo de oportunidad. Por el contrario, un menor precio internacional provoca un aumento en la tasa del gravamen, lo que aumenta los ingresos fiscales”, explica la OCDE en su reporte Mexico: inventory of estimated budgetary support and tax expenditures for fossil-fuels-2013.
Paulatinamente, el cambio
Para Gregorio Vidal, investigador del Departamento de Economía de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), dentro de la propuesta del nuevo gobierno se debe incluir también mayor transparencia en la estructura de precios de la gasolina en el país.
“No estoy de acuerdo que se elimine de tajo el subsidio, pero en caso de que se haga que sea paulatino, hay que reconocer su impacto macro y cualquier cambio en el precio implica un aumento súbito de los productos que afectan al conjunto de la economía”, dijo.
Con base en cifras de Pemex, la importación de la gasolina ha bajado. En los primeros diez meses del año se mantuvo un ritmo de importación promedio de 385 mil 800 barriles de gasolina al día, contra 405 mil 200 que se reportaron durante todo 2011.
Sin embargo, el valor de esas importaciones, incluyendo también a otros petrolíferos, se ha incrementado en los últimos años: pasó de 15 mil 797 millones de dólares en 2007 a 29 mil 403 millones de dólares este 2012, es decir, casi se duplicó debido al incremento en el precio del petróleo en el mismo periodo.
Al respecto, Carlos Canfield, investigador de la Universidad Anáhuac, recuerda que sólo diez por ciento de la población tiene un vehículo propio, a los que les aplica el subsidio, en contraste con que el incremento en el precio de la gasolina, que es utilizada por esa pequeña proporción, impacta a toda la población de forma indistinta a su posición socioeconómica.
“El problema es que no existe transparencia en la formación de precios de Pemex, y es uno de los elementos que más condicionan esta desgravación, subsidio que beneficia a los que más tienen, pero que es insumo para otras industrias y necesariamente afecta a distribución de bienes que van a los más pobres. No hay claridad en este sentido”, dijo el académico.
México en el mundo
En Venezuela un litro de gasolina cuesta 0.34 pesos, es decir, llenar un tanque de 40 litros cuesta poco más de 13 pesos. Con estos niveles, la nación que gobierna Hugo Chávez tiene la gasolina más barata del mundo.
Otro de los países productores que tienen subsidiada su gasolina es Arabia Saudita, donde un litro de gasolina tiene un precio un poco más elevado que en Venezuela, pero aún así igual de bajo respecto al referente internacional, 2.4 pesos por litro.
Luego de que el gobierno decidiera eliminar de tajo los subsidios a los combustibles en Nigeria, donde un litro costaba, antes de enero de este año, poco menos de tres pesos mexicanos, hoy el precio se disparó a 17.75, trayendo además de problemas sociales, un efecto inflacionario difícil de asimilar para los habitantes de aquel país.
En México, a partir de 2009 la política de incremento en el precio de las gasolinas derivaron en que en sólo tres años la Magna, que es la de mayor consumo, pasara de un promedio de 7.77 pesos por litro en aquel año, a 10.72 pesos por litro actualmente.
En una consulta realizada por Excélsior, el precio de la gasolina en nuestro país se encuentra en niveles similares a los de países como Sudán (10.31 pesos por litro), también productor de petróleo, y un poco más barata que en Angola (10.82 pesos por litro).
México se encuentra en el lugar 14 de los países con la gasolina más barata en el mundo, muy lejos de otras naciones, principalmente europeas, como Noruega, donde cuesta 34.32 pesos por litro, Portugal, Italia y Holanda, donde el precio de un litro de gasolina también supera los 30 pesos.