Terrorismo doméstico está anidado en Estados Unidos

En los últimos seis meses las autoridades estadunidenses registraron 172 casos de artefactos explosivos “improvisados”

José Carreño Figueras

18/04/2013 07:33

CIUDAD DE MÉXICO, 18 de abril.- La inmensa mayoría de los atentados terroristas ocurridos en Estados Unidos los últimos 42 años son de origen doméstico.
De acuerdo con información oficial, el ataque más sangriento (casi tres mil muertos) fue el del 11 de septiembre de 2001 por 19 seguidores de Al-Qaeda, que se apoderaron de cuatro aviones de pasajeros y lanzaron dos contra las Torres Gemelas de Nueva York y uno contra el Pentágono.
Los muertos en ese ataque son 85% de los atribuidos a actos terroristas en EU. En segundo están los 168 registrados en Oklahoma, el 19 de abril de 1995, tras el ataque con un coche-bomba por Timothy McVeigh, un solitario terrorista antigubernamental.
En los últimos seis meses las autoridades estadunidenses registraron tantos como 172 casos de artefactos explosivos “improvisados”, del tipo de los que estallaron en Boston el lunes.
De acuerdo con el Consorcio Nacional por el Estudio del Terrorismo y Respuestas al Terrorismo, de la Universidad de Maryland, desde el 11 de septiembre de 2001 se han registrado 53 ataques terroristas públicamente reconocidos.
De ellos, 43 fueron clasificados como planes “domésticos”, es decir, desarrollados por personas o grupos en EU.
De los “incidentes explosivos” registrados en los últimos seis meses, la mayoría incluyó el uso de fuegos artificiales, pólvora empacada en tubos o “bromas” de otro tipo.
La información disponible indica que entre 2001 y 2011 la gran mayoría de los ataques de corte terrorista en EU fue de origen doméstico, tanto que los tres primeros lugares en número de atentados fueron Frente de Liberación de la Tierra con 50, el Frente de Liberación Animal con 34 y Al-Qaeda, con cuatro. En algunos casos los responsables o planificadores son estadunidenses con vínculos al exterior.
De acuerdo con la revista Foreign Policy, el uso de “Artefactos Explosivos Improvisados” (AEI, o IED, por sus siglas en inglés) se ha popularizado en EU, por las mismas razones que en Irak o Afganistán: “alto impacto con materiales baratos y fácilmente adquiribles”.