Graco Ramírez, un imbécil (en los sentidos original y actual de la palabra) frente a AMLO

Federico Arreola @FedericoArreola dom 5 may 2013 08:35 // Fuente SDPnoticias

En Milenio, el gobernador de Morelos, Graco Ramírez, ha dicho que Andrés Manuel López Obrador ha ido “involucionando”. O sea, que Andrés Manuel no ha avanzado, sino retrocedido. ¿Ustedes le creen a Graco? Yo tampoco. Y no le creo porque, en términos de ética política, Graco Ramírez es un verdadero imbécil. ¿Imbécil? Según la Real Academia Española, alguien “alelado, escaso de razón, débil”. Eso significa la palabra “imbécil” en la actualidad y eso es el gobernador de Morelos.
Graco también es un imbécil en el sentido original del término. Aunque hay distintas explicaciones, la más difundida es la de que “imbécil” viene de baculum (bastón). Leo por ahí que tal expresión llegó “del latín bacillus, diminutivo de baculum, que junto al prefijo im, vendría a significar sin bastón. Se puede entender el bastón como símbolo de la autoridad reconocida a alguien por su experiencia (hay quien habla literalmente y hace referencia al apoyo que proporciona el bastón en sí mismo). Así que un imbacillus o imbecillus sería alguien que carecería de esta. Progresivamente la palabra se ha hecho extensiva a aquellos que por su juventud o falta de sensatez, parecían carecer del apoyo de ese bastón (real o imaginario), símbolo de sabiduría”.
Graco Ramírez es un imbécil porque le falta sabiduría, de plano. La causa de esto no es su juventud (está bastante viejo), sino su insensatez. En la mencionada nota de Milenio, Graco se presenta a sí mismo como aspirante a la Presidencia de México. De risa loca. Dice también que en Morelos ya no hay “grandes capos”. Si no supiera que Graco Ramírez es un mentiroso descarado, pensaría que ha perdido la razón por completo. Es que, carajo, todo el mundo sabe que en Morelos manda el crimen organizado. Dirían en Twitter, que no mame Graco con falsedades tan obvias.
Graco llegó a la gubernatura gracias a la popularidad de López Obrador. Sí, exactamente como el resto de los perredistas que hoy ocupan cargos políticos de importancia. Dado que Andrés Manuel ya los abandonó, los líderes del PRD saben que no volverán a alcanzar los resultados electorales de 2006 y 2012. Desesperados, entonces, buscan la forma de hacerse notar. Graco Ramírez piensa que crecerá su popularidad si se compara con AMLO (es su intención al decir que Andrés Manuel ha “involucionado”). Pero bueno, solo un imbécil, y Graco Ramírez lo es, puede pensar que le beneficia ponerse al tú por tú con alguien infinitamente superior, en sabiduría política y en autoridad moral, como Andrés Manuel López Obrador.