Rebeldes sirios para empezar a recibir armas de EE.UU. en medio de la ansiedad del Congreso
CIA podría comenzar el envío de armas en las próximas semanas después
de la liquidación de los comités de Inteligencia de la Cámara y el
Senado
Un luchador libre Ejército sirio apunta con su arma mientras se toma una posición defensiva en Aleppo para el Martes. Foto: Reuters
La CIA podría comenzar el envío de armas a Siria
en las próximas semanas, después de dos paneles del Congreso de Estados
Unidos abrieron el camino para la controversial transferencia de armas.
La Casa Blanca anunció en junio que iba a proporcionar apoyo militar limitada a los grupos rebeldes vetados, que recientemente han estado luchando en su campaña contra el presidente Bashar al-Assad .
Republicanos y demócratas en la Cámara de Representantes y los comités de inteligencia del Senado han expresado su preocupación de que las armas podrían terminar en manos de los militantes islamistas que combaten en la región - o no hacer lo suficiente para inclinar la balanza en la guerra civil.
Mike Rogers, presidente del comité de la Cámara, dijo el martes que el grupo había acordado apoyar el plan para armar a los combatientes de la oposición. Sin embargo, el Comité dejó claro que sólo ha aceptado a regañadientes y mantuvo inquietudes serias sobre si la nueva política de Barack Obama iba a funcionar.
"El comité de inteligencia de la Cámara tiene muy serias preocupaciones sobre la fortaleza de los planes del gobierno de Siria y sus posibilidades de éxito", dijo en un comunicado, después de que Reuters informó de la decisión. "Después de mucha discusión y revisión, llegamos a un consenso de que podríamos seguir adelante con lo que los planes y las intenciones de la administración se encuentran en Siria, en consonancia con las reservas del comité."
Representante Adam Schiff, un demócrata de la minoría en el comité de la Cámara que se opone el envío de armas, dijo: "Es demasiado tarde para influir en el resultado con una pequeña cantidad de armas."
El comité del Senado decidió a principios de este mes que iba a apoyar el plan para apoyar a los rebeldes, con la condición de que recibieron información actualizada sobre el programa encubierto. Ambos comités se han reunido a puerta cerrada para discutir el deseo de Obama de transferir armas ligeras y municiones a rebelarse organizaciones insurgentes, así como para suministrar algún tipo de formación.
El plazo para la transferencia de armas no está clara, pero los informes sugieren que el proceso podría tener lugar en las próximas semanas. Grupos de oposición sirios han dicho públicamente que esperan que comenzarán a recibir las entregas en agosto.
Secretario de Estado John Kerry y otros altos funcionarios de la administración de EE.UU. han estado presionando duro detrás de las escenas para persuadir al Congreso para respaldar la nueva política.
Obama, quien se ha mostrado renuente a involucrarse profundamente en el conflicto sirio, cambió su posición a los opositores de armado del régimen de Assad el mes pasado, luego de concluir las fuerzas sirias habían utilizado armas químicas contra la población civil. La Casa Blanca describió que el desarrollo Assad como cruzar una "línea roja".
Por ahora, una política limitada de suministro de armas pequeñas a grupos rebeldes parece ser en cuanto a la administración Obama va a ir.
La parte superior militar EE.UU. funcionario advirtió a los senadores el lunes que tomar acción militar para detener el derramamiento de sangre en Siria era probable que escalar rápidamente y provocar "consecuencias no deseadas". En alusión a las ocupaciones de Irak y Afganistán, el general Martin Dempsey, jefe del Estado Mayor Conjunto, dijo que una vez que los EE.UU. se vio envuelto militarmente en la guerra civil de Siria, "una mayor participación es difícil de evitar".
Él dijo: "Hemos aprendido de los últimos 10 años, sin embargo, que no es suficiente para alterar simplemente el equilibrio de poder militar sin una cuidadosa consideración de lo que es necesario para preservar un Estado que funcione."
La Casa Blanca anunció en junio que iba a proporcionar apoyo militar limitada a los grupos rebeldes vetados, que recientemente han estado luchando en su campaña contra el presidente Bashar al-Assad .
Republicanos y demócratas en la Cámara de Representantes y los comités de inteligencia del Senado han expresado su preocupación de que las armas podrían terminar en manos de los militantes islamistas que combaten en la región - o no hacer lo suficiente para inclinar la balanza en la guerra civil.
Mike Rogers, presidente del comité de la Cámara, dijo el martes que el grupo había acordado apoyar el plan para armar a los combatientes de la oposición. Sin embargo, el Comité dejó claro que sólo ha aceptado a regañadientes y mantuvo inquietudes serias sobre si la nueva política de Barack Obama iba a funcionar.
"El comité de inteligencia de la Cámara tiene muy serias preocupaciones sobre la fortaleza de los planes del gobierno de Siria y sus posibilidades de éxito", dijo en un comunicado, después de que Reuters informó de la decisión. "Después de mucha discusión y revisión, llegamos a un consenso de que podríamos seguir adelante con lo que los planes y las intenciones de la administración se encuentran en Siria, en consonancia con las reservas del comité."
Representante Adam Schiff, un demócrata de la minoría en el comité de la Cámara que se opone el envío de armas, dijo: "Es demasiado tarde para influir en el resultado con una pequeña cantidad de armas."
El comité del Senado decidió a principios de este mes que iba a apoyar el plan para apoyar a los rebeldes, con la condición de que recibieron información actualizada sobre el programa encubierto. Ambos comités se han reunido a puerta cerrada para discutir el deseo de Obama de transferir armas ligeras y municiones a rebelarse organizaciones insurgentes, así como para suministrar algún tipo de formación.
El plazo para la transferencia de armas no está clara, pero los informes sugieren que el proceso podría tener lugar en las próximas semanas. Grupos de oposición sirios han dicho públicamente que esperan que comenzarán a recibir las entregas en agosto.
Secretario de Estado John Kerry y otros altos funcionarios de la administración de EE.UU. han estado presionando duro detrás de las escenas para persuadir al Congreso para respaldar la nueva política.
Obama, quien se ha mostrado renuente a involucrarse profundamente en el conflicto sirio, cambió su posición a los opositores de armado del régimen de Assad el mes pasado, luego de concluir las fuerzas sirias habían utilizado armas químicas contra la población civil. La Casa Blanca describió que el desarrollo Assad como cruzar una "línea roja".
Por ahora, una política limitada de suministro de armas pequeñas a grupos rebeldes parece ser en cuanto a la administración Obama va a ir.
La parte superior militar EE.UU. funcionario advirtió a los senadores el lunes que tomar acción militar para detener el derramamiento de sangre en Siria era probable que escalar rápidamente y provocar "consecuencias no deseadas". En alusión a las ocupaciones de Irak y Afganistán, el general Martin Dempsey, jefe del Estado Mayor Conjunto, dijo que una vez que los EE.UU. se vio envuelto militarmente en la guerra civil de Siria, "una mayor participación es difícil de evitar".
Él dijo: "Hemos aprendido de los últimos 10 años, sin embargo, que no es suficiente para alterar simplemente el equilibrio de poder militar sin una cuidadosa consideración de lo que es necesario para preservar un Estado que funcione."
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