viernes, 12 de julio de 2013

Rusia se suma al proyecto ExoMars

Rusia se suma al proyecto ExoMars

ЭкзоМарс

En Rusia comenzaron las labores en el proyecto conjunto con los europeos ExoMars para el envío de sondas de investigación a Marte, en 2016 y 2018.

En la asociación científica y de producción Lavochkin se ocupa de ello un equipo especial. Las cuestiones de la construcción son debatidas en estrecho contacto con los colegas europeos.
En un comienzo, la misión ExoMars fue pensada como un proyecto europeo-estadounidense y la NASA prometió dos cohetes pesados Atlas V. En otoño de 2011, devino claro que habrá problemas con los cohetes. Entonces, la Agencia Federal Europea invitó a Rusia al proyecto como un tercer participante. La NASA poco después iba a abandonar del todo el proyecto, debido a que estaba ya ocupado en los preparativos del robot marciano Curiosity. Por su parte, Rusia anunció su intención de adherirse a la misión y que aportaría de cohetes Protón solo en el caso de que este sea un programa científico conjunto. Esa condición fue aceptada, indicaba Lev Zelionny, director del Instituto de Investigaciones Espaciales.
El proyecto ExoMars consta de dos etapas con los lanzamientos en 2016 y 2018. En 2016, la participación de Rusia consistirá en el suministro del cohete Protón y en el relleno del ingenio orbital Trace Gas Orbiter, que se encargará de investigar vestigios de gas en la atmósfera de Marte. A todos interesa la distribución del metano. En esta sonda viajarán dos dispositivos rusos: el detector de neutrones FRIEND, para el estudio de la distribución del agua bajo la superficie de Marte, y un enorme paquete para la investigación de la composición espectral de la atmósfera.
Los especialistas rusos de la empresa Lavochkin ayudarán a los colegas europeos a realizar los cálculos a la hora de crear el exhibidor del descenso. Su objetivo es exclusivamente tecnológico, razón por la que no lleva equipos científicos algunos.
El Trace Gas Orbiter levantará también un mapa de los puntos donde, desde las entrañas del planeta, sale a la atmósfera el metano y otros gases. Es muy probable que puedan encontrarse allí vestigios de hipotéticos microorganismos, razón por la que ese mapa ayudará en la elección del lugar del descenso de las naves en la segunda etapa de ExoMars. Esa etapa del lanzamiento de 2018 será mucho mas complicada, explica Lev Zelionni:
Rusia suministrará de nuevo un cohete Protón. Además, hará la plataforma de descenso que llevará la nave robot Pasteur. Esta llevará a su vez una perforadora para adentrarse en el suelo unos dos metros. Lo principal consiste en que, en la plataforma, irá instalado un conjunto de equipos científicos rusos.
El experimento de ExoMars y las misiones rusas a la Luna, fijadas para 2015 y 2016, ayudarán a reducir el riesgo de la misión a Fobos, uno de los satélite de Marte. Rusia confía en lanzar entre 2022 y 2025 una versión menor de la sonda Fobos-Grunt.
sb/kg/sm

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