Se elegirá ‘‘en lo oscurito’’, advierte ONG
Fernando Camacho Servín
Periódico La Jornada
Jueves 6 de noviembre de 2014, p. 13
Jueves 6 de noviembre de 2014, p. 13
La realización de citas privadas entre
legisladores y varios candidatos a dirigir la Comisión Nacional de los
Derechos Humanos (CNDH) es una muestra de que el nombramiento del
próximo ombudsman depende de negociaciones a puerta cerrada
entre los aspirantes y los grupos políticos, y no del procedimiento
legal que en teoría sirve para definir este tema, señaló Édgar Cortez,
miembro del Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia.
En charla con La Jornada, el activista lamentó que las
comparecencias oficiales que se realizaron la semana pasada únicamente
sirvan para ‘‘cuidar las apariencias’’, en un ejercicio de simulación
que sólo encubre las decisiones tomadas ‘‘en lo oscurito’’.
Guardar las apariencias...
Estas reuniones privadas ‘‘son inexplicables y reflejan
que las comparecencias en el Senado no fueron un proceso real, sino nada
más un acto para guardar las apariencias y dar la impresión de que todo
es público, pero no. La elección (del titular de la CNDH) se hace a
puerta cerrada, en audiencias donde no sabemos qué se discute, se opina y
se pregunta’’, denunció.
Luego de que trascendió que los principales partidos
elaboraron sus propias listas de candidatos y los piensan citar para
entrevistarlos en privado –al margen del proceso público que ya hicieron
las comisiones unidas de Derechos Humanos y Justicia la semana
anterior–, Cortez alertó que de esta forma se abre la puerta a
decisiones ‘‘arbitrarias’’ y poco transparentes.
‘‘Los indicios apuntan claramente a que vamos a una elección de tipo político y no a una en términos de las mejores posibilidades para la CNDH. Lo que mal empieza, mal acaba, y si este proceso se inició con la decisión de no hacer una consulta pública y transparente, como dice la Constitución, va a terminar con total opacidad y arbitrariedad’’, agregó.
‘‘Hacemos comparecencias públicas, pero donde parece que van a construirse las decisiones es en privado. Me parece una actitud muy incorrecta, vergonzante y deplorable, y ahora cabe esperar cualquier tipo de decisión, incluso la más inesperada.’’
‘‘Los indicios apuntan claramente a que vamos a una elección de tipo político y no a una en términos de las mejores posibilidades para la CNDH. Lo que mal empieza, mal acaba, y si este proceso se inició con la decisión de no hacer una consulta pública y transparente, como dice la Constitución, va a terminar con total opacidad y arbitrariedad’’, agregó.
‘‘Hacemos comparecencias públicas, pero donde parece que van a construirse las decisiones es en privado. Me parece una actitud muy incorrecta, vergonzante y deplorable, y ahora cabe esperar cualquier tipo de decisión, incluso la más inesperada.’’
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