El
principal funcionario militar de EE.UU. ha revelado los planes de
Washington para reducir la influencia de la República Islámica de Irán
en el Oriente Medio.
Durante una entrevista concedida el viernes al diario estadounidense Breaking Defense,
el jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, el general Joseph
Dunford, reconoció el papel importante de Irán en los conflictos
regionales y resaltó los principales objetivos de su país para minimizar
esta influencia en la región.“Las Fuerzas de Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán (CGRI) continúan ejerciendo una influencia en Irak y Siria a través de fuerzas y milicias, y en El Líbano a través del Hezbolá (...) Por lo tanto, la disminución de la influencia maligna de Irán sigue siendo un importante objetivo de Estados Unidos en la región”, indicó Dunford.
El alto cargo castrense norteamericano, además, calificó al país persa como una de las mayores amenazas para Estados Unidos y sus aliados cercanos en el Oriente Medio.
“El Gobierno de Teherán sigue planteando una amenaza a los aliados cercanos como Israel y Jordania”, respondió Dunford, al ser preguntado si ha visto alguna decepción en las actividades “desestabilizadoras” de Irán en la región.
Además, se refirió al poderío de la Armada de la República Islámica en el Golfo Pérsico y en aguas internacionales y lo consideró como uno de los grandes desafíos de EE.UU. en la región.
“Al hablar de Irán, el tema más importante para Estados Unidos es la libertad de navegación persa en el Estrecho de Ormuz y el Bab al-Mandeb. Al hostigar las actividades marítimas estadounidenses en el Golfo Pérsico y suministrar misiles de crucero anti-buque avanzados a los Hutíes en Yemen, en la costa del mar Rojo, Irán plantea una amenaza a dos vías navegables absolutamente cruciales”, alegó el general estadounidense.
Estas afirmaciones tienen lugar aun cuando las autoridades iraníes han rechazado, en distintas ocasiones, las acusaciones de EE.UU. sobre que Irán ha enviado misiles a los combatientes del movimiento popular Ansarolá en Yemen.
Teherán asevera también que la presencia de fuerzas estadounidenses en el Golfo Pérsico –donde han surgido los incidentes– no tiene justificación en el derecho internacional y es contraria a la voluntad de las naciones de la región.
Además, en infinidad de veces, las autoridades iraníes han subrayado la alta capacidad iraní en el sector defensivo para dar una respuesta contundente a cualquier amenaza o agresión.
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