Calla rectoría sobre conflicto en los CCH
A casi dos semanas de la toma del plantel Naucalpan y
la Dirección General en Ciudad Universitaria, el rector José Narro
Robles no se pronunciado al respecto
Hasta ahora y tras la toma de las instalaciones del Colegio de Ciencias y Humanidades Naucalpan, el 5 de febrero pasado, y la ocupación de la Dirección General del CCH, al día siguiente, la directora del sistema Lucía Laura Muñoz ha encabezado las negociaciones con los inconformes, sin que existan resultados concretos.
El 13 de febrero, académicos del CCH Naucalpan llegaron a la Rectoría de la UNAM para entregar un documento con 400 firmas al rector José Narro, en el que solicitan aplicar la ley universitaria contra los jóvenes expulsados de manera provisional por actos de violencia.
Esto, luego de que la noche anterior, autoridades de la dirección general del CCH Naucalpan ofrecieron interceder para que quienes fueron agredidos durante los hechos violentos en ese plantel ocurridos en los primeros días del mes retiraran las demandas contra quienes fueron expulsados.
Los académicos se apostaron afuera de Rectoría con cartulinas en las que se leía “los delitos no se negocian, se denuncian y se sancionan”, “respeto a la legislación universitaria”, “la seguridad no se negocia”.
De manera adicional, el viernes pasado, profesores de matemáticas del mismo plantel entregaron también en Rectoría una misiva dirigida al rector en la que piden que no sean retiradas las demandas e incluso advirtieron que de no resolverse la situación existe la posibilidad del surgimiento de grupos que puedan enfrentarse con aquellos alumnos que mantienen tomada las instalaciones.
Reyes Hugo Torres Merino, representante de los mentores del área de matemáticas, señaló que en toda la UNAM existen grupos radicales, pero “en el CCH se ha manifestado más porque es tanta la permisividad que se ha dado en un hecho anterior, en agosto se dio algo semejante (…) y se retiraron los cargos a los muchachos”.
A finales de agosto de 2012, unos 250 jóvenes, algunos encapuchados, tomaron las instalaciones del CCH Naucalpan con el objetivo de quejarse en contra de las medidas de seguridad aplicadas en el plantel por el entonces recién nombrado director del plantel, Benjamín Barajas, y que incluían que el ingreso al plantel fuera será por medio de la credencial, la prohibición de fumar dentro de la escuela y evitar la venta informal e ilegal.
QUE NO HAYA MARCHA ATRÁS EN LA REFORMA
También el viernes pasado, en una carta al rector de la UNAM, José Narro Robles, académicos e investigadores universitarios demandaron que la reforma propuesta a los planes de estudio del CCH no quede en el papel, “solamente por la negativa de un pequeño grupo que sistemáticamente se ha opuesto a cualquier modificación que afecte sus intereses”.
“No olvidamos el año en que la UNAM estuvo secuestrada. Por lo anterior, hacemos un llamado a las autoridades universitarias a que no transijan con la legislación universitaria como tampoco en contra de la academia”.
CITAN ESTUDIANTES A DIÁLOGO EL MARTES
El grupo de inconformes pidió ayer a las autoridades retomar el diálogo mañana martes a las 3 de la tarde, y justificaron su inasistencia a la mesa convocada por la dirección el jueves pasado al señalar que un día antes la negociación había concluido con una ruptura.
“La directora general nunca nos informó de la reanudación del diálogo. Ante la falta de comunicación por parte de la dirección, no fue posible reanudar el diálogo el día jueves 14 a la hora especificada, hecho que fue interpretado por los medios como falta de voluntad por parte de nosotros”.
Asimismo, en un comunicado difundido este domingo, los inconformes anunciaron una marcha el próximo jueves desde el CCH Sur hacia la Rectoría con el lema “Los estudiantes también contamos”.
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